Recuerdo
Recuerdo
Un año atrás...
Estaba mirando cómo los corredores participaban de una de las carreras mas peligrosas del siglo. Siento una mano apretando mi cintura, soltando un gemido de dolor, no quiero verlo.
—Nena, vamos a otro lugar— murmura centímetros en mi cuello, trago grueso aguantando las ganas de vomitar de disgusto.
—Quiero ver la carrera— respondo aun sin mirarle, me coja de los cachetes con fuerza haciendo que lo mire a la cara.
—Dimelo, mirandome a la cara— murmura desafiante.
—Quiero ver la carrera— contesto entre dientes, me suelta con brusquedad dejándome caer en el piso.
No lo miro solo me levanto limpiandome las rodillas. Otra vez me humilla en frente de todos los participantes, no vale la pena llorar, ahogó un gemido de dolor aguantando las ganas de sobar las mejillas que de seguro estan rojas.
Veo a lo lejos como Nick gana la última vuelta de peligro, se acerca a mi chequeando si tengo un rasguño, él sabe que la persona que está detrás de mí está besándose con una cualquiera como un objeto, no me quiere solo me usa por despecho y por popularidad creyéndose el mejor de todos, temiendolo como si fuera el rey de este lugar.
—Felicidades, sabía que ganarías!—grito fuerte sobre la estruendosa música. Me abraza cargandome lejos de la escena detrás de mí—.
—Todo por ti Lei...
Me suelta dejándome adentro en el coche, se adentra arrancando el motor saliendo lejos de ahí.
—Gracias— murmuro evitando mirar el espejo.
—Que te hizo esta vez.
—Inquiere apretando el volante con fuerza.
—Me apretujo los cachetes con fuerza solo por que no lo mire directamente a la cara— respondo.
—Te dije que te alejarás de él desde el primer día que nos escapabamos.
—Y qué quieres que haga, ese día estaba borracha no era consciente lo que hacía.
—Pero te uso en esas fachas.
—Aunque lo intentará Nick, él seguirá fastidiando si lo dejo—digo suspirando.
Él bien lo sabe, solo es tan necio.
—No debí enojarme contigo ese día, es mi culpa.
Se contra que arrepienta.
—Claro que no, fui yo por necia intentando buscar un significado de lo que sucedido—digo avergonzada.
—No te lo tomes a mal después de todo, pasó por una razón— dice encogiéndose de hombros.
Cierto concuerdo con él
—¿Dónde vamos?.
—A despejar de ese lugar mugroso.
Asiento conforme no debemos meternos la misma pata seguidas de veces, solo porque haya hecho esa estupidez no significa que se haya acabo el mundo.
—Creo que tengo una idea— comienzo a decir. Formando planes en mi mente.
—Haber, ¿cual?.
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Al Filo del Descarrio
Novela JuvenilLa lluvia desciende por sí misma, empapándolos de pies a cabeza. No tuvieron la conciencia suficiente para traer un paraguas. Ella trata de escapar esquivando a las personas que transeunte en la calle, ignorando los llamados de la persona que ama. É...