Capítulo 21

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La razón

No he parado de pensar lo sucedido de ayer ni mucho menos sacarlo de mi p*ta cabeza, recuerdo cada movimiento, jadeos y suspiros de excitación del uno al otro, no se como actuar alrededor de él siendo parte del equipo y grupo de amigos de mi hermano.

No debería preocuparme tanto, solo fue un simple beso sin sentido... ¿verdad? no quiero parecer una loca pensando tantas veces que quiera pero a quien engaño, es incontroladamente hacerlo es atractivo, ojos verdosos con lunares esparcidos en su bella cara, labios rellenos con un tono rosa que dan ganas de besarlo, cuerpo bien formado y el cabello café ondulado que dan ganas de enredarse en ellas. Hay que admitir que es guapo y yo bueno ni soy tan guapa ni mucho menos fea pero lo que si se, es que me mantengo saludable, la belleza y los estereotipos no me importa en lo absoluto, no me quiero compararme pero es inevitable hacerlo, lo que sí me preocupo tanto es quien se fijaria en mí después de que saliera todo a la luz, ¿quien? si nada mas soy una vil mentirosa.

Deje atrás las carreras para sentir libertad si me quedara mas tiempo estaría atrapada en un agujero negro de por vida. Descarto los recuerdos que intenta por salir, eso fue el pasado y está enterrado, nadie puede enterarse. Por última vez me miro en el espejo viendo si no tengo ni una marca o algo que me haga recordar. Salgo del baño con mi maleta en la mano, caminó con prisa sin ser visto pero algo me detiene en mi camino.

Apoya sus manos en sus rodillas respirando jadeante, lo quedo viendo mirando expectante.

—Aquí estas— dice recuperando el aliento.

Se incorpora al instante revolviendo su cabello, es nada mas y nada menos que Nick.

Que alivio

¿Qué sucede?— pregunto un poco confundida ladeando la cabeza.

—Te acuerdas el cofre que te dieron anónimamente— cuestiona.

Asiento.

—Si, que tiene.

Respondo frunciendo el ceño.

—¿Dónde está?.

Miro de reojo el entorno, lo arrastró llevándolo en una esquina del pasillo cerca del armario.

—Lo tengo en mi escritorio en la habitación— contesto —No seas tan bruto, diciendolo abiertamente.

—Lo siento— responde dando un suspiro de alivio —No fue mi intención...

Lo interrumpo ignorando sus disculpas.

—Para que lo quieres, si no mal recuerdas estamos en riesgo si hablamos esto públicamente

Dije en un susurro.

—Recibí un nota— explica sacando una nota de algún libro desconocido, me lo enseña.

Para: R.W <3

Esta doblado la nota enseñando esas iniciales, como se atreve...

—Bastardo...— murmuro.

No me lo esperaba de su parte pero tampoco estoy sorprendida de sus manías de preocuparme en vez de asustarme. Lo agarro, arrugandolo con fuerza haciendo un puño, lo guardo en mi maleta junto con otros cuadernos, no se que decir al respecto pero no hay otra manera.

—Nos vemos en mi casa a las 7.00pm— empiezo a decir antes de irme a mi siguiente clase.

Cómo es posible que se atrevió hacerme esto, solo lo hace para entrar en pánico. La única manera de encontrar la clave, es seguir el juego paso a paso sin tener interrupciones ni mucho menos altibajos dando el temor hacia el enemigo. Me siento en la última fila de la clase, sin prestar mucha atención de que nos explica, ideó un plan de contraataque. No creo que sea una buena idea en intervenir hacia él, no es el momento. Estaría arriesgando llevándome hacia el fondo y dándole lo que él quiere. Como quisiera que esa persona estuviera aquí para salvarme de este apretujo amenaza que aproxima. Veo que se sienta Danforth a mi lado, me tenso al darme cuenta que somos pareja de Física, grandioso como si las cosas empeorarán más.

Al Filo del DescarrioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora