En este mundo, Ventino no existe, solo vemos a 5 niñas, aparentemente inocentes y muy hermosas, estudiosas y calmadas; lo que el mundo no sabe es que ellas tienen un secreto que nunca debe salir a la luz, secreto que 5 muchachos pondrán en peligro.
Ryan Prov: La verdad tenía planeada esta cita para el fin de semana pero en vista de que no iríamos al fastidioso colegio la adelanté para hoy, a las afuera de la cuidad en una linda reserva habían cabañas que se arrendaban, es ahí donde nos dirigimos, a una linda cabaña al lado de una hermosa cascada, quiero tener más tiempo con Camí, entre el trabajo, la coartada del colegio y el fastidio de mis amigos no hemos tenido mucho tiempo para hacer cosas importantes, cosas diferentes, estamos a medio camino y Camí está perdida en sus pensamientos.
-¿En qué piensas amor?-le pregunto cogiendo su mano.
- En los lindos momentos que hemos pasado juntos desde que decidiste conquistarme, las citas, la pedida de noviazgo, me has demostrado ser una persona demasiado buena, demasiado dulce, demasiado preocupado y me da miedo no ser lo suficientemente buena para tí, me da miedo fallarte y decepcionarte, eso me rompería el corazón- tengo el alma atorada en la garganta, nunca pensé verla tan vulnerable, tan sensible, apreté su mano con fuerza.
-Tu eres perfecta para mí, en poco tiempo te convertirste en mi mundo e hiciste que solo brillara en tonos dorados en conjunto con tus ojos, te adoro y no pienso dejar jamás que pienses que no vales, ahora levanta la cabeza amor, que el mundo quiere ver tu sonrisa- le digo, para después besarle la mano, ya llegamos, estaciono mi carro un poco antes que ver la cabaña, me bajo y le cubro los ojos, para tomarla al más puro estilo princesa y dejarla frente a la cabaña, cuando cae la venda observo que sus ojos brillan, le encantó, mira atónita nuestro hogar por las siguientes horas.
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-Ahora princesa ¿Quiere conocer su castillo por las próximas 12 horas?- digo mientras le tomo mano y empezar a caminar dentro, sé que en la mesa nos espera un rico almuerzo, porque como dije tenía todo preparado.
Camila Prov: Estoy impresionada, detras de un hombre rudo y fuerte, hay un niño deseoso de amor, alguien tierno y sensible, lo adoro, mi corazón termina por derretirse cuando veo una mesa con un almuerzo delicioso, en una mesa decorada con rosas rojas, no puedo más de ternura, antes de entrar lo beso rápidamente, creo que mi corazón va a salir por mi pecho. Terminamos de comer, son pasadas las 5 de la tarde y estamos conversando viendo la cascada, pronto comenzará el atardecer.
-¿Qué es lo que más te gustaría tener- le pregunta Ryan acostado en sus piernas.
-Estoy enamorada de los Bernés, creo que mi mayor sueño es tener uno, pero no he podido conseguir uno, además que no sé si a las chicas les gustaría- respondo acariciando sus cabellos.
-Creo que no puedo imaginar a una sin la otra, ustedes son como un equipo, nunca están sin la otra- Es primer hombre que entiende la unidad con las chicas.
-Son la única familia que tengo, creo que no podría vivir si les pasara algo, no tengo a nadie más que esas 4 locas, por eso el escándalo de hoy en la mañana, Makis es la bebé a pesar de ser mayor que Olga, ella es la persona que debemos proteger- siento que él me toma la mano y sus ojos están clavados en mi.
-No son lo único que tienes, ahora también me tienes a mi- estoy perdida, el entró en mi corazón e hizo un desastre dentro de él, se apropió de todo, no me importa que estemos al aire libre, me ircorporo dejándolo totalmente recostado en el suelo, como puedo me tiendo sobre él para besarlo con fuerza, sus labios me siguen el ritmo y aumenta la profundidad del beso poniendo su mano en mi nuca, como puede se incorpora y me lleva en brazos dentro de la cabaña, sin dejar de besarme, él me tiende en una cama, sé a dónde va esto y no me importa, quiero hacerlo, quiero hacerlo con él, pero esta vez no será solo sexo como otras veces, esta vez, con este hombre lo haré por amor.
Ryan Prov: Esta tendida bajo mío, en ropa interior, estamos en igualdad de condiciones, no puedo dejar de apreciar su blanca piel, no puedo mantener mi boca alejada de sus lunares, beso cada lunar que encuentro en mi camino, saboreando cada trazo de piel, no puedo más, estoy explorando con el roce su intimidad con mi miembro, cuelo mi mano por su espalda para poder retirar su sostén y deleitarme con sus suaves pechos, los acaricio, los muerdo y los apreto, escucho como gime y me encuentro en la gloria, no me doy cuenta cuando una pequeña mano se introduce en mi ropa interior masajeando mi miembro con maldad, me quere hacer explotar pero no me quedaré atrás, con disimulo introduzco mis dedos en su ropa interior, introduciendo mis dedos en ella, dando masajes circulares en su clítoris, siento que tiembla y las ansias salvajes se apoderan de mí, retiro su ropa interior en conjunto con la mía, me acerco a la mesita de noche y encuentro un preservativo, al ser un destino romántico estas cosas siempre tienen, me lo pongo y me acerco a Cami, mientras la penetro con lentitud no puedo dejar de mirarla, su frente sudada, sus labios rojos e hichados de tantos besos, sus mejillas sonrosadas por el cansancio y sus hermosos ojos dorados iluminando cada parte de su ser, sin darme cuenta la danza de nuestras caderas comienza a ser salvaje, entro y salgo de ella con ferocidad, llegamos a un Vortex de placer perfecto y explotamos simultáneamente, dejando escapar un brutal gemido. La amo, no puede ser, la amo con todo mi corazón. Nos quedamos acostados después de hacerlo una segunda vez, a la 22:00 hrs saldremos camino a la casa y no puedo ir más feliz, la amo, pero no se lo diré aún, no quiero espantarla, nos montamos en el auto y voy a dejarla a su casa para dirigirme más feliz que nunca a mi casa, mañana tengo colegio, pero no me importa, nadie me quitara de la cabeza que amo a Camila Esguerra.
Tyler Prov: Ví llegar a Camí, estaba con Juli durmiendo en mis brazos, se supone veríamos una película pero está plácidamente dormida, la cargo en brazos y voy con ella a su habitación, la dejaré ahí para descansar, después irme a mi casa, pero mi misión no tiene éxito, porque Juli a mitad de la escalera se despierta, aunque me niego bajarla hasta llegar a su cama donde la recuerdo cómo una princesa, la muy descarada se para de la cama y se quita la ropa, quedando solo en ropa interior, me está está tentando, no es la primera vez que lo hacemos, que digo, esta mujer tiene fuego dentro y es única para mí, sabe que esto me hará perder el control, a la mierda el control me abalanzo sobre ella como un salvaje, hacemos el amor como dos locos y después nos quedamos recostados en su cama.
-Te amo- sale de mi boca sin permiso.
-¿Cómo puedes saberlo?- me contraataca
-Eres lo mejor que me ha pasado en la vida, me haces olvida el pasado oscuro que me atormenta, me haces olvida todo lo que está mal y me haces ver todo lo que está bien, tu sonrisa hace que mi corazón salga de mi pecho, haces que no pueda respirar cuando estoy cerca tuyo, te amo, te amo, te amo Juliana Pérez no me cabe duda que te amo- digo mientras la vuelvo a besar, poco a poco ella va cediendo al sueño, y sin querer yo también, antes que nada, pongo una alarma a las 6:30, no pienso sufrir lo mismo que Dylan. Duermo aspirando su aroma, sin darme cuenta recuerdo a la mujer que me clavó un cuchillo en el hombro, el cual por suerte pude tapar, pero prefiero quedarme con la imagen de Juli en mi mente antes de dormir.
Olga Prov -Te amo- dice un adormecido Daniel entre mis brazos, hoy en la noche se va a quedar a dormir, espero que se duerma para poder decirle en un susurro.
-Yo también te amo, pero no le cuentes a nadie- sonríe y me besa, el desgraciado no está dormido.
