Millie observaba entretenida uno de los episodios de Grey's Anatomy, había decidido empezarla para compensar sus ratos libres que la llenaban de aburrimiento cada día más. Observó el reloj en su muñeca y soltó un suspiro algo nervioso al darse cuenta que tan solo faltaban 5 minutos para que Finn y ella cumplieran su primer mes como relación. Esperaba que el chico no se excediera y que no hubiera comprado algo sumamente caro que jamás recompensaría lo que ella había conseguido con parte de su dinero y el de sus padres. Probablemente tendría que hablar con el pecoso sobre ese aspecto más adelante ya que no tenía pensado celebrar cada mes de relación con detalles, algunas palabras le eran más que suficientes. Tal vez después buscaría un espacio para solucionar aquel pequeño inconveniente.
Estaba tan sumida en sus pensamientos que no se dio cuenta que incluso ya solo faltaba un minuto para la hora deseada, soltó un suspiro y agitó de manera nerviosa sus manos, agarró el teléfono de su hermano y buscó entre sus contactos el número de su novio el cual había agregado hace unos días Charlie en cualquier caso de emergencia. Estaba a punto de tocar la para iniciar la llamada cuando el teléfono empezó a sonar, y el nombre de "Finn roba hermanas Wolfhard" Alumbraba en la pantalla de manera casi irónica. Sin dudar ni un solo segundo descolgó la llamada.
—¿Finn? —murmuró con una sonrisita de lado.
—Feliz mes cariño—escuchó la voz de su novio con un tono más ronco del habitual, era obvio que estaba a punto de caer dormido.
—Feliz mes Finnie—la chica suelta un suspiro enamoradizo mientras se recostaba en su cama con una sonrisa.
—Se que hay mucho por decirte... Porque mis sentimientos hacía tí son... No lo sé, inefables, o simplemente no los puedo describir un viernes a las 12 de la madrugada. Pero tan solo quería decírtelo por primera vez en el día, el tiempo contigo no debería ser desperdiciado de una manera tan ignorante.
Millie estaba a punto de gritar de la emoción, aveces sentía que en realidad no merecía a ese hombre. Pero el había llegado a ella de una manera casi tan casual que no podía evitar estar tan dichosamente agradecida con el universo por ponerlo en su vida.
—Finn... —la chica duda tan solo un poco, sus piernas están temblando de manera ligera.
—¿Si, Millie? —el chico pasea por su cuarto en una clara señal de nerviosismo.
—Estoy muy enamorada de tí—le suelta asi sin más, sonriendo de lado y mordiendo una de sus uñas con nerviosismo. Un silencio se forma en la línea, tan tétrico para Millie como precioso para Finn.
El pecoso se sentía como todo un ganador, las inmensas ganas de saltar fuera de su casa y correr despavorido hacia la de su novia para decirle que en realidad el se sentía igual, que sus sentimientos eran correspondidos de manera honesta y altruista.
—También estoy enamorado de ti, Brownie, no te imaginas cuanto— le responde trás unos segundos que le parecieron eternos a la chica de brillante mirada. Los dos suspiraron al mismo tiempo y rieron tan solo un poco por la situación.
—¿Como sabías que tenía el teléfono de Charlie? —le pregunta después de un tiempo.
—Tal vez lo haya sobornado un poco para que te dejara su teléfono por esta noche— suelta una risita cómplice que provoca una sonrisa enorme en el rostro de la castaña.
—Dios mío Finn Wolfhard, ¿En que te he convertido?— finge una voz aterrada provocando que su novio suelte una suave carcajada.
—No lo sé pero me encanta.
—Si... A mi también.
—Un gran día nos espera Brownie, así que descansa— el chico se despide ansioso.
—Duerme bien, Finnie, sueña conmigo— le responde a modo de broma haciendo que el ruloso se ría a través de la línea.
—Siempre—le responde de manera sencilla, sin embargo logra poner a la castaña en las nubes por un largo tiempo.
—Buenas noches, Finn—la castaña cuelga y por fin, desde hace muchos días puede dormir con una inmensa sonrisa en el rostro.
En el momento en el cual la hora de ir al colegio llega, se arregla lo más rápido posible, empaca sus pequeños regalos para su novio en su mochila de manera apurada mientras su hermano le gritaba desde la planta baja que debía apurarse o la dejarían botada.
Bajó las escaleras entre tropiezos gracias a sus zapatos desamarrados y tomó lo que pudo de la mesa del comedor mientras le gritaba una despedida a su madre que le deseó suerte con Finn.
Su padre manejó ante las ansiosas indicaciones de su hija que tal vez estaba actuando un poco más exaltada de lo normal, decidió ignorar a la adolescente hormonal, no quería terminar encendiendo el fósforo el cual su hija se había convertido en ciertos días. Millie se bajó del auto de un solo salto y corrió apresuradamente hasta entrar a la escuela, observó el reloj en su muñeca algo impaciente, tendría por lo menos 5 minutos para interactuar con el pecoso antes de que las clases empiecen. Lo encontró esperándola en su casillero con su teléfono celular en manos y en una postura desinteresada. Mordió su labio para contener una sonrisa y se acercó sigilosamente para poder sacarle un susto.
—Hola cariño— Finn la saluda sin nisiquiera observarla, dejándola atónita.
—No es justo, ¿Me viste llegar? —cruza sus brazos en manera de protesta mientras que con sus labios formaba un puchero.
—Nop— le responde de manera simple, exagerando la última letra de manera innecesaria pero adorable— Solo que te sentí llegar, es algo extraño, pero estaba seguro de que eras tu— el ruloso la tomó de su cintura mientras le sonríe, tan solo para ella, y aquello le encantaba de sobremanera.
—Eres adorable... —la chica recarga sus frentes de tal manera que consigue mezclar sus respiraciones— Pero necesito saber justo ahora que compraste para mí—la chica realiza un intento fallido de convencerlo.
—El que espera, gana— le replica, sin embargo también esta sonriendo animado. La toma de las mejillas y le da un beso rápido. Justo a tiempo como para que la campana suene y tengan que separarse— Sé paciente, Brownie, nada de husmear—la señala en manera de advertencia, como si no la conociera. Pero claro que intentaría averiguar los planes de su novio.
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Si, lo sé.
Pero mejor tarde que nunca jaja.
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Free Wifi |Fillie|
Dla nastolatkówMillie solo asiste a aquella cafetería por el servicio de WIFI gratis.