Acércame tus manos

Capítulo 1

-¿Estas bien? ¿Me oyes?-

¿Qué ha pasado ¿Dónde estoy? No entiendo. Luces me dan directo a la cara, estoy mareada, todo se pone negro de a ratos, siento un dolor inmenso en la cabeza y algo que aprisiona mi mano.

­-¿Me oyes? Tengo que sacarte de aquí rápido, ¿vale?-

Asiento, no sé quién me habla, es solo una voz que parece sonar a lo lejos.

-¡Joder! Tienes la mano atrapada. Esto va a doler, pero si no te saco de aquí, no la vas a contar.-

Solo asiento, estoy mareada, no sé qué ha pasado, no recuerdo nada, quiero cerrar mis ojos y descansar.

-No, no. No te duermas, necesito que me ayudes. ¡Paulina, ven aquí ahora!-

-Ya estoy, tía. Avisé a Gaby. Nos está enviando la ambulancia y tiene todo listo en el hospital.-

-Vamos a sacarla, hay que cortar el cinturón.-

Las voces se alejan, todo se pone negro, no oigo nada más.

En Majadahonda...

Sus manos recorren mi espalda, besa mi cuello y desciende despacio hacia mis pechos. Me separo de golpe.

-Vamos, ¿de nuevo? Malú, no puede ser.-

-Lo siento, Blanca, es solo que...-

-Es solo que llevamos dos meses y aun no quieres estar conmigo, ¿tienes tres años, tía?-

-No digas eso, no entiendes.-

-No, ¡no entiendo!- Responde enojada.

Se aleja de mi en dirección a la ventana, dándome la espalda. Me siento una imbécil ahora mismo. Me acerco y la abrazo por la cintura.

-Quiero entenderte, de verdad, pero no me dejas. No me dejas acceder, ser parte de ti.- Dice algo frustrada.

-Lo se, es solo que...-

Sol, mi asistente y amiga, entra abruptamente interrumpiéndonos, me mira con pánico, su semblante es pálido, coge el mando de la tv y la enciende.

"Accidente trágico de la cantante Vanesa Martín..."

-¿Qué... cómo...?-

"El coche ha explotado, no tenemos más detalles, solo sabemos que..."

No puede ser, no puede ser, no puede ser, enciendo mi móvil, cientos de llamadas perdidas y mensajes preguntando qué ha pasado, no lo sé y necesito saberlo. No puede ser.

-Se que se la llevaron al hospital central.- Explica Sol.

-Hospital...- Repito casi por inercia.

-¿Se sabe algo más? Pregunta Blanca preocupada.

-Debo ir.- Digo con un hilo de voz.

-Vamos, te llevo.- Dice Blanca.

-¡No!- Grito. Ella se paraliza sorprendida. -Lo siento, yo... prefiero ir sola.-

-Vale, vale, tranquila. Lo entiendo, es tu amiga. Ve.-

Me da un beso al que casi no respondo, no me puedo concentrar, es Vanesa, no... salgo de la habitación corriendo, mi chofer tiene el coche listo para partir y nos vamos.

No puedo evitar estar nerviosa, Sol entrelaza su mano con la mía dándome apoyo, se lo agradezco y dirijo mi mirada a la calle, deseo con todas las fuerzas de mi ser que esté bien.