Acércame tus manos

Capítulo 38

Narra Vane

Han pasado dos semanas desde nuestro viaje a Islandia. En todo este tiempo hemos estado organizando el viaje, bueno, Nali y Ana lo han estado organizando, la idea es ir a América. Hay cinco lagos de aguas brillantes o aguas mágicas en el mundo, pero Nali apuesta por los que están en América, además, porque parte de mi sueño, según ella que lo ha interpretado de mil formas, es en el amazonas, en Brasil, así que empezaremos por México, de ahí a Argentina, luego Brasil y Perú.

Es una completa locura, de eso no cabe duda, pero más que nada porque yo estoy en nada de tener que presentar todos los temas. He escrito varios, pero aun faltan y sobre todo y mas importante, falta el título del álbum, que como siempre no lo tengo. Es una eterna pelea conmigo misma.

-¿Te puedes relajar? De verdad me desesperas.- Dice Ana a Nali mientras llegan a mi casa.

-¿Qué ha pasado? Hola.- Saludo a cada una con dos besos.

-Que hoy es la presentación.-

-¡No jodas! ¿Hoy? Que miedo.-

-¡Ay no, no me pongas mas nerviosa! Joder.-

Es así, hoy Ana va a llevar a Nali a su casa para presentarla oficialmente como pareja, Nali no da de los nervios, mas porque Diurna siempre se ha portado bastante creída y no la ha tratado muy bien. Ana me contó que habló mucho con ella y le pidió una oportunidad para Nali.

Jamás había visto a Ana tan enamorada y como toda persona que encuentra al amor de su vida, quiere que su familia la acepte.

-Venga, tia, que todo va a salir bien.- Intento calmar a Nali.

-No lo se, ¿vale? Que además tienen que reunirse mi madre y la abue. ¿Sabes lo que será eso?-

-A ver, que esas mujeres son un encanto. Deja de ponerte nerviosa.-

-Claro, habla la superada.- Interviene Malú que llega de correr. -Ni te imaginas como estaba el día que nuestros padres se presentaron. No, no, no, no tienes la menor idea.- Ríe.

-Pues podrías contarlo, ¿no? Que así quizás la calmamos un poco.- Dice Ana mientras abraza a Nali por atrás, tomándola de la cintura.

-Pues...

Flashback...

-Creo que así estamos bien, ¿no? Mis padres deberían llegar en dos horas.-

-Tus padres y los míos, gorda. No lo olvides.-

-Quisiera olvidarlo, pero no puedo.-

Hoy nuestros padres finalmente van a conocerse, y van a conocernos a cada una como "pareja" de la otra. Vanesa está increíblemente nerviosa, no hay como relajarla. Yo estoy nerviosa, pero no a su grado, lo tomo más natural, sé que todo va a salir mas que bien, además nos amamos, y ambas familias están ansiosas por conocerse entre sí.

-Dejame ver como va la salsa.- Dice acercándose a la olla.

-No, no, no, no. Alto ahí, señorita, ese es mi territorio.-

-Ya, deja, que yo también se cocinar.-

-No.-

Me paro delante de la olla, mirándola y tapándola con el cuerpo, Vanesa se acerca por la espalda, pero no la dejo, tapo cada rincón por el que quiere acceder.

-¡Deja!- Protesta entre risas.

Niego con la cabeza y hago especie de carpa a la olla.