Acércame tus manos

Capítulo 24

Narra Malú

Llevamos el día entero grabando, no he parado ni un minuto, no doy mas del cansancio, todo lo que quiero es ir a ver a Vane, que según algunas fotos que me ha mandado, se la está currando con la cena, me mata cuando hace esa clase de cosas.

Paulina acaba de llegar, su consultorio queda muy cerca de los estudios de la Voz y ya que vamos para casa de Nali, le pedí que pasé por mi.

-Bueno, creo que ya estamos entonces.- Digo una vez que terminamos con el último concursante.

-Tenemos que ir a grabar unos adelantos ahora.- Dice Rosa que mira unos papeles.

-Estoy muy cansada, Rosa, no doy mas.-

-Esto es algo que debías haber grabado los días que no cumpliste con tu trabajo por andar haciendo tonterías en Irlanda.- Interviene Blanca irónica.

-No lo aconsejo.- Dice Paulina que se une a la conversación. -Como su terapeuta recomiendo que vaya a descansar.-

-¿Perdón? ¿Terapeuta? ¿Desde cuando tienes terapeuta?- Pregunta Rosa bastante confundida.

-La tengo y ya, Rosa, no puedo decirte todo lo que hago.-

-Descansar es lo que menos irás a hacer.- Habla Blanca bastante encabronada.

-Mira tía, lo que sea que vaya a hacer saliendo de aquí es problema suyo, pero tiene que tener horas libres, no es una maquina que vive para trabajar.- Responde Pau igual de encabronada.

-Pero bueno, chiquillas, ¿qué es todo este alboroto?- Pregunta Ale que se acerca, lleva su mano a mi espalda y me da un beso en la mejilla.

-Que todavía me quedan cosas por grabar.- Digo bastante frustrada.

-¿Cómo que cosas por grabar, Rosa? Es una locura. Deja ir a descansar a esta mujer.- Habla Ale.

-No es algo que esté en discusión.- Dice Rosa firme.

-Pero vamos, que mañana sigue, dejala ir a ver a su malagueña, no ves que por eso tanta desesperación.- Insiste Ale entre risas.

-Mira tío, no te metas, ¿vale? Malú tiene que cumplir con su trabajo y si no te gusta, pues me vale.- Habla Blanca enojándose cada vez mas.

-Relaja, niña, mira...-

-Mira nada. Me importa tres cojones quien seas tu, Malú se queda porque se queda.- Dice Blanca casi gritando.

-Detente ahí, niña, que voy a permitir que me faltes el respeto.- Dice Ale bastante serio.

-Pues no te metas, imbécil.-

Ale le dice un par de cosas de manera muy educada para calmarla, pero Blanca está cada vez mas alterada, no se calma con nada, pero sin previo aviso, una bofetada le da vueltas la cara dejándonos a todos y a ella especialmente con la boca abierta.

-Era la única forma de calmarla.- Dice Pau que se frota las manos y mira con malicia

Narra Vane

-Espera, déjame servir la cena al menos.-

-No, quédate aquí, abrázame y hazme mimos.-

Estamos en el sofá de casa de Nali, Malú llegó hace un rato y desde que llegó estamos a puros besos, mimos y caricias. Ella me habla con su voz de peque que tanto me puede, me fascina cuando es así de tierna.

-Vamos a cenar, anda, que me he esmerado.- Digo mientras acaricio su espalda.

-¿Pero luego regresamos al sofá?- Pregunta con su cara hundida en mi cuello.