Never© [Badboy x Badgirl] [COMPLETA]

Capitulum XXX

Capitulum XXX

Me levanto de un salto, mareándome por unos instantes. Cojo a Edric del brazo y le obligo a ponerse en el centro de la estancia.

Alex observaba apoyado en la pared, serio. Intenté no pensar mucho en la razón por la cual estaba tan serio.

Obligué a Edric a mirarme a los ojos, hice una seña a Ellie para que se colocara.

Edric me observaba con esos hermosos y hipnotizantes ojos color miel, tenía que haberle empujado pero me quedé prendada observando esos ojos durante más tiempo de lo normal.

Él no despejaba su mirada de la mía y viceversa y mientras me quedaba observando en un silencio muy cómodo. 

Entonces un pequeño click resonó con fuerza seguido de unas palabras que llegaron a dejarme aún más perpleja de lo que estaba, lo que esta decía en mi cabeza era: ¡Te gusta Edric!

Sí, nos habíamos dado unos cuantos besos pero un beso puede ser solo es un beso. Me quedé aun pasmada, pensando en ello en mi propia revelación y solo cuatro  palabras me vinieron a la mente: Esto no es bueno.

Entonces alguien carraspeó sacándome de mí ensimismamiento aunque mi acompañante seguía observándome sin prestar atención a nuestro alrededor.

Decidí pinchar la burbuja en la cual se encontraba empujándolo hacía adelante, debido a la confusión y su estado de he-muerto-de-pronto él cayó hacía atrás tropezándose con el cuerpo de Ellie, quién se había colocado allí estratégicamente.

Las piernas de Edric reposaban sobre la espalda de Ellie, él maldecía en voz alta intentando incorporarse eso hasta que ella se levantó, haciendo que su intento se quedará solo ene so: un intento, ella acercó a mí y levantó el puño.

-¡Bien hecho!-chocamos los puños gritando a la vez, con una gran sonrisa de psicópata adornando nuestros rostros.

-¿Y ahora vais de Ladybug y Chatnoir?-cuestiona Edric, ya de pie con el ceño fruncido y quitándose el polvo imaginario de sus pantalones deportivos.

Su pelo se encontraba más desordenado de lo común dándole un aire desenfadado muy sexy.

Una maraña de pelo pelirrojo asomó por la puerta, sus ojos marrones observando la habitación un momento para luego volver a cerrar la puerta.

Todos nos mirarnos confundidos.

-¿Y eso que fue?- Jason fruncía el ceño, así que me acerqué y le levanté las comisuras de los labios. Sorprendiéndolo.

-Sonriendo te ves más guapo-comenté, él me regaló una sonrisa genuina-. ¡Mucho mejor!

-Y respondiendo a lo de antes, esa era Desiree.-Alexis saca un cigarrillo a lo que yo me acerco y se lo quito de las manos.

-No vas a fumar Alexis.-Aseveré pisando el cigarrillo a lo cual él me regaló una mirada de fantasma de cachorro recién asesinado viendo a su asesino, solo diré que no era bonita esa mirada.

Me agaché para recoger el espachurrado cigarrillo cuando alguien entró.

Repito: ¿Alguien aquí sabe lo que es tocar y aguardar a que te dejen entrar?

El doctor Prince entró con un portafolio en mano mirando directamente hasta Jason, lo revisó por todas partes y cuando ya estuvo satisfecho se dirigió a mi camilla para revisarme.

Solo hay un pequeño inconveniente, yo no estaba en camilla.

Entonces los ojos furiosos de un enfadado doctor se fijaron en mí.