Amelia; anoche soñé contigo

Capitulo 7

Amelia

El amor es el término que los humanos hemos creado para justificar todos nuestros sacrificios. Es justo lo que yo he hecho desde siempre, he sacrificado muchas cosas en los ultimos años "por amor", ese genuino sentimiento que nos hace olvidarnos de nosotros mismos muchas veces, nos hace concebir a la otra persona como nuestra prioridad sin importar que nunca piel se nos vaya en ello.

La clase de amor que yo conozco es aquel que te hace mas fuerte, no es egoísta, no es angustia o dolor, la clase de amor que yo conozco es ese capaz de hacer de la persona mas frívola, la mas humana.

Entonces; no puedo justificar mi proximo matrimonio con el amor que siento por mi hermana porque no seria correcto. Laura es como cualquier otra niña del mundo que tiene sueños, tiene ganas de vivir y yo no la puedo privar de eso.

Casarme con Silas Berkshire es la unica puerta en este momento para que mi hermana sobreviva un poco mas de tiempo.

Laura ha luchado, no se ha rendido y haré hasta lo imposible porque viva el mayor tiempo posible.

Ella quiere su fiesta de quince años y yo se la voy a dar, aunque aun falten once meses para eso.

Recuerdo como hace justamente tres años atras llamaron a mi servicio en el hospital, una señora de cuarenta y ocho años ingresaba a urgencias con un disparo en la frente, otro en el abdomen y uno en la pierna, todo mundo se había vuelto loco, llovía a mares y mi consulta estaba repleta, solo pude ver a traves de la cortina como era trasladada a los quirófano al mismo tiempo que un nudo instalandose en mi vientre y como de pronto me entraron las ganas de vomitar. Ese fue el peor dia de mi vida y no estoy preparada para perder a nadie mas.

Ver a mi hermana dormida en esa cama conectada a cables y máquinas por todas partes, hace que mi pecho duela y que quiera inventar diez mil maneras para cambiar su realidad, hacer de su vida solo risas y sueños, olvidar las medicinas, las consultas y los extensos exámenes, quisiera borrar de su memoria todas las veces en las que el cepillo quedo forrado por los mechones rubios de su cabello.

Quisiera solo cambiar mi lugar por el suyo y evitarle todo este dolor.

Por otro lado debo agradecer a la vida por contar con personas como Leslie, Edward, Heather y Nathan, nos conocemos desde la universidad y no nos hemos separado nunca mas, no se que haria sin ellos conmigo apoyandome, creo que me volvería loca.

Miro al frente y trato de visualizar como será mi vida por los proximos cinco años, exactamente como antes de que mi madre muriera, crecí en una familia adinerada, los padres de mi mamá tenían dinero pero mi padrastro se lo gastó en sus juegos, esa es la razón por la que estoy tan endeudada con el banco que le pertenece a mi futuro marido, loco ¿No?.

Esto es lo que me depara el futuro por cinco años: Asistiré a reuniones sociales a todas partes de Estados Unidos y otras partes del mundo, viviré en una casa enorme y tendré dinero por doquier pero interesantemente, esas cosas ya no son de gran importancia para mi.

Yo solo quiero que mi hermana esté sana.

- Amy.- Escucho la voz de Heather desde algún lugar y me espabilo.- Tienes que comer algo y dormir un poco.

Asiento, desde que Silas me dejó aquí anoche no me he movido y pegado un ojo, estoy muy cansada y mi guardia empieza en un par de horas, pero no me quiero separar de Laura.

- Yo la cuido.- Estoy a punto de replicar cuando ella me interrumpe.- Mi guardia terminó hace poco, puedo quedarme con ella mientras tu descansas, le encargaré a Dora que la cuide mientras tu trabajas, ¿Vale?