Capítulo 32

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Amelia

Todo en la vida pasa, nada es para siempre y si lo es, no es realmente bueno.

He pedido tanto para que este dia no llegue, para que en realidad el tiempo se detenga y nada de esto suceda porque el dia de hoy, empieza mi camino hasta la perdición.

Hoy es el cumpleaños numero 15 de mi hermana y por ende, la ultima vez que ella toma sus medicinas, hoy empieza una cuenta regresiva que al segundo cero, se llevará todo.

No la quiero perder, no quiero vivir sin Laura pero ya no es mi decision, es su vida y su sueño, hoy se hará realidad.

- Estás hermosa.- Miro por el espejo a Silas y el se cruza de brazos.- No llores Amelia, hoy no.

Respiro profundo y me miro al espejo, este vestido me encanta, es una pieza de satén de una línea con escote en V y parte posterior de cremallera, tirantes de espagueti en violeta, resalta mis partes agraciadas y admito que me veo bien pero no me siento bien.

- Vamos a llegar tarde.- Digo y me giro a verlo, está muy guapo.- No te has colocado la corbata.

El me la extiende.

- Soy malo en eso.- Sonrío  y se la coloco.- Este es un dia especial para ella Lia, es un paso importante para todos.

- Lo se Silas.- Acomodo el nudo.- Listo.

Silas me mira y frunce el ceño, sabe que no estoy bien.

- Muñeca.- Me levanta por el mentón y me obliga a verlo.- Pase lo que pase de ahora en adelante, recuerda que hiciste todo lo que pudiste.

Asiento y lo abrazo, no puedo llorar ahora. Salimos de la habitación y yo me voy hasta la sala donde Avelene me espera con un vestido lila, Laura ha pedido que su fiesta sea en todos los tonos de morado, todos sus amigos están invitados y bueno, yo no pude negarme.

Silas la acompañará, bailará con ella y yo solo podré ser capaz de describirla, todo ha sido tal y como ella lo soñó, no puedo quejarme.

- Estas hermosa, mi vida.- Le digo a Avalene colocando uno de sus rizos detras de su oreja.

- Tu también mamá.- Amo que me llame de esa manera.- ¡Ahí vienen!

Me giro en redondo para ver a mi marido y mi hermana en la cima de las escaleras, ella luce perfecta en ese vestido degradé desde el mas impoluto blanco en el corpiño hasta el mas oscuro de los púrpuras en la falda del vestido, es increíble y también ha pedido cabello, ella extraña su pelo.

Silas luce un traje negro con una camisa blanca, su corbata es morada y lucen guapísimos estando juntos. Tomo una fotografía y trato de no llorar mientras bajan las escaleras.

- ¡Wow!.- Dice Avalene acercándose a ellos.- Estas hermosa.

- Tu estás mas hermosa.- Replica Laura y luego me mira.- ¿Me veo bien?

Río por no llorar.

- Estás preciosa.- Me acerco y beso su pelo.- Y.

Salimos de la casa y Tarek nos conduce hasta las instalaciones del hotel The Ritz , allí se llevará a cabo su fiesta y no existe ninguna limitación, Silas ordenó que todo se hiciera como ella quisiera, invitaran a quien quisieran, ¡Ah! y no olvidemos que en una semana nos iremos a Italia.

Llegamos media hora despues al lugar y nos introducimos en la edificación, Laura y Silas se desvian por un cuarto y Ava entra junto a mi hasta el lugar donde decenas de jovencitos están vestidos de blanco y diferentes tonos de morado, el gran salon decorado con telas de seda en degradé con tonos morados, mesas dispuestas en puntos estratégicos y unos adornos de cristal con orquideas moradas dentro, centros de mesas de cristal altos con flores fluorescentes que desprenden una luz morada en sus distintos tonos y detalles en cristal, dorado y blanco amenizan el lugar.

Amelia; anoche soñé contigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora