Capítulo II - Un pastel, una mirada.

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Narra Ari

Todo el mundo está como loco el día de hoy, mi tía Blanca lleva arreglando el departamento desde hace unas semanas y hoy al fin llegaran los vecinos nuevos. Me dijo que son cuatro personas quienes vienen y que hay un chavo de mi edad. Espero seamos amigos. Bueno es hora de acabar con mi live.


Yo: ... Muy bien Followers hemos terminado por el día de hoy, gracias por escucharme y espero que logren recomendar este libro a sus amigos. Bye y recuerden... El corazón nunca se equivoca.

Blanca: ¡Aristóteles! – me llama desde la cocina.

Yo: ¡Voy tía!

Blanca: Hijo qué crees, ya llegaron Los López, los nuevos vecinos que me arrendaron el departamento.

Yo: Que bien tía, ¿puedo ayudar en algo?

Blanca: Sí, por favor. Mira, este pastel lo horneé especialmente para ellos para darles la bienvenida.


Era un pastel de chocolate y se veía delicioso, mi tía me pidió que se los lleve a los López así que fui hasta su casa y toqué la puerta. Mientras alguien venía a abrir, me di la vuelta y tomé un poco del pastel con mis dedos. No podía evitarlo. En eso siento que alguien abre la puerta.


Yo: ¡Hola! Que tal, soy Aristóteles, mi tía Blanca, su casera, les horneó este pastel para darles la bienvenida.


Quien abrió fue precisamente el chavo que mi tía me había comentado, era de mi edad y vestía una camisa muy padre. Me di cuenta que él se quedó como congelado cuando me vio... ¿Nos habíamos visto antes quizás?


Yo: Ehmm... ¿Hola?

Temo: Sí, sí, perdona, se me fue el avión...

Yo: Sí, me di cuenta... ¿Ya nos conocemos? Porque siento como que tú a mí sí... Bueno, toma, espero les guste mucho – dije mientras le daba el pastel.


Él siguió viéndome pero estoy casi seguro que no prestaba atención a lo que decía. De repente pasa lo peor... ¡El pastel se le cayó de las manos! No podía creerlo, ¡¡¡mi tía me iba a matar!!!


Temo: Ay, ay, ay, ay... ¿Qué hiciste Cuauhtémoc?

Yo: ¡¿Qué hiciste?! Ay, no, no, no... ¡¡Me van a matar!!

Temo: Perdón, perdón, perdón – dijo hasta el cansancio – te compro otro.

Yo: Comprar no, ¡¡mi tía lo hizo para ustedes!! ¡¡Ve cómo quedó!!


De repente escucho la voz que menos me esperaba detrás de mí...


Blanca: ¡Aristóteles que hiciste! Ay Santo Dios...

Pancho: ¿Que pasó Temo, apoco hay guerra de pasteles? – dijo Pancho mientras salía del departamento.

Blanca: Ay Don Pancho... este era un pastel especial que hice para ustedes de chocolate y mil leches...

Pancho: Pues de las mil leches no quedó ni una, doña – dijo alegremente – No se preocupe en serio.

Temo: Sí, sí Doña Blanca... fue toda culpa mía... se me aflojó de las manos...


Narra Temo

No puedo creer que me esté pasando esto... lo vi y era él. El chico de la foto, ese ángel que me sorprendió, lo tenía enfrente de mí sonriendo y con un pastel. Pero claro, Cuauhtémoc López siempre tiene que regarla. No sólo te quedaste embobado viéndolo sino que tus manos de gelatina soltaron el pastel... ¿Por qué no eres un chavo normal Temo?...


Ari: Sabes qué tía, por qué no mejor voy por unas donas a la panadería para compensar algo lo del pastel.

Blanca: Tienes razón hijo, ve por ellas y te esperamos en casa, vine a invitar a Pancho y sus hijos a una comida.

Yo: Voy contigo – dije levantándome.


No paraba de disculparme con él mientras íbamos a la panadería, y él se reía y me decía que todo estaba bien... ¡¡Es una chulada!! Espero que al menos seamos buenos amigos...


Ari: Y dime Temo, ¿cómo así llegaron acá a Oaxaca?

Yo: Pues... venimos desde Toluca porque... a mi papá no le late que hablemos del pasado... – dije algo cabizbajo.

Ari: Tranquilo, entiendo muy bien.

Yo: Pero bueno, a ver cuéntame ¡¿es neta que te llamas Aristóteles?! – dije rompiendo la tensión creada.

Ari: ¡Sí!... y espérate porque mi papá se llama Audifaz, mi mamá Amapola y mi hermanito Arquímedes – dijo riéndose mientras escogíamos que donas llevar.

Yo: Ahora sí como diría mi papá "No manches"

Ari: ¡Sí! ¿Ves? tenemos algo en común. Un nombre chistoso. – Dijo mientras me sonreía – Subamos, ya mi tía debe estar esperándonos.


Mientras subíamos me puse a pensar... ¿Audifaz Córcega?... ¿será acaso el mismo que...? No, no. Es imposible otra coincidencia... ¿o sí?

El Corazón Nunca se Equivoca - Aristemo (T1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora