No tan perfecto (TP#2)

Parte sin título 39

Narra Martina

Unos pequeños susurros a no sé que hora de la noche, me hacen despertar. Poco a poco empiezo a reconocer la voz y sus palabras. Este momento de mi vida me recuerda que puedo amar y frustrarme por la misma persona, en el mismo tiempo.

-Y serás guapo como yo o guapa como tu madre, pero si quieres ser una combinación de los dos no hay problema.- los susurros de Samuel son los que se escuchan por toda la habitación.

Empiezo a abrir mis ojos y la cara de Samuel sobre mi abdomen casi plano es lo primero que veo, no me hace presión, solo la tiene muy cerca mío, su mano está en el mismo sitio, posada con mucha delicadeza.

-No quería despertar a mamá, no nos deja hablar a solas.- finge estar enojado

-Faltan siete meses para que puedas separar a esa criaturita de mí. – digo con la voz adormilada.

-No le digas criaturita, es nuestro hijo o hija.- me regaña.

-Lo digo con todo mi cariño, lo sabes.

-No entiendo porque duermes tanto, hoy es el gran día. – de un salto ya está fuera de la cama.

-No me emociona hablar con mi padre.

Lo sigo hasta la cocina y me siento en un taburete. Tengo a penas una camisa suya y mi ropa interior. Empieza a moverse con comodidad en medio de los instrumentos culinarios.

-Pues lo tienes que hacer, no puedes esconder a nuestro hijo... o hija.

-¿Cómo se te ocurre decir que escondo a nuestro bebé?

-O nuestra bebé.- aclara

Rio por lo bajo ante su preocupación por no decir hija. Dice que no quiere hacer sentir mal a nuestra criaturita por decirle hijo cuando es una niña, y viceversa.

Planeamos un viaje a Inglaterra, vamos a recoger un resto de mis cosas y hablaremos con mis padres y los padres de Samuel, aprovechando que todos están en Manchester. Samuel se encarga de todo, confunde mi embarazo con invalides. Además de que solo tengo dos meses y aun puedo hacer muchas cosas como una persona normal.

Queremos ver crecer mi panza juntos, luego verlo nacer y crecer. Nada de estar un semestre en Inglaterra. No lo queremos así. Terminaré mis estudios en España, por intercambio y luego las practicas en la empresa que trabaja Samuel.

(...)

Como es costumbre tenemos que salir corriendo por todo el aeropuerto para que nuestro vuelo no nos deje.

(...)

Piso tierras Inglesas luego de tres semanas. Todo sigue igual, huele a mi hogar. Nuestra primera parada es en casa de Samuel, su madre no quiere que nos quedemos en un hotel y yo no quiero quedarme en casa de mi padre.

-¡Chicos, que gusto verlos! Creí que su vuelo se había atrasado o algo por el estilo. ¿Qué tal el viaje?¿quieren descansar?- dice de prisa mientras nos ayuda a subir las maletas a la habitación de Samuel. Definitivamente, mi lugar favorito.

-El viaje fue bien madre. Solo estamos un poco cansados, vamos a descansar y luego a cenar con los Jonhson. Tenemos una noticia por darles.- tres segundos después de que Samuel terminara sus palabras, se escucha un fuerte grito por toda la casa.

-¡OH DIOS MIO! ¡¿Se van a casar?! ¡No! ¡Espera!¡No me lo digas! ¿Están esperando un bebé?- dice a todo pulmón.

Pensaba que todos se iban a enterar en la cena que organizamos con ayuda de Camila y Matt. Todos debían pensar que el bebé es de ellos, debería ser así. Pero una fuerte intuición de madre arruinó nuestro plan. Me pongo un poco nerviosa cuando salgo de la habitación y veo a la señora Steel abrazar a su hijo con fuertes sollozos.

-estoy tan feliz, por ambos. Yo lo sabía, rayos, lo sabía. – dice con su rostro en el pecho de Samuel.

-¿Saber qué?- dice Samuel en el mismo estado que yo.

-Sabia que un hilo rojo los unía, ese bebé solo lo confirma...- se seca sus lagrimas y se dirige a mi- ¿Es niño o niña? ¿Cuántos meses tienes? Puedes preguntarme lo que quieras sobre el embaraza, el parto, criarlos... lo que tu quieras. Me alegra que seas la madre de mis nietos.- me da un ultimo abrazo y se va por el pasillo no sin antes gritar- ¡Gracias Dios, por escuchar mis suplicas ¡Mis nietos serán guapos hasta las medias!

Empiezo a reír con nerviosismo. Samuel me toma por detrás y me da un fuerte abrazo.

-Te lo dije, no tenias porque preocuparte por mamá. Ella va a adorar a nuestro pequeño o pequeña.- afirma- Como nosotros lo haremos. Todo saldrá de maravilla esta noche.

De las ultimas veces que traje a Samuel a una cena familiar, todo salió horrible. Mi padre se encargó de destruir muchas cosas entre Samuel y yo. Pero no se lo puedo permitir, no de nuevo, no cuando nuestro bebé está de por medio.