Siete días.|| Min Yoongi y Tn.

24

-¡¿Qué?! -gritaron todos al unísono. La joven rió un poco por lo graciosos que se veían.

-Pe-pero, ¿Ustedes no se...? -Jimin fue él más sorprendió.- Irresponsables.

-La culpa es de Yoongi. -lo señaló y esté la miró indignado. Mina era quién más tranquila estaba en su sitio. Claro, ya lo sabía.

-¿Tu sabías nena? -preguntó Hoseok refiriéndose a su novia.

-Si. -respondió natural- No lo dije porque no me correspondía, además quería ver sus reacciones y vaya que me estoy divirtiendo. -confesó riendo.

-En casa no te perdonaré. -ella arqueo una ceja y mordió su labio inferior.

-¿Y si... Nos vamos ahora? -susurró en un tono sensual. Todos se quedaron quietos en sus sitios, mirando a la pareja mas descarada en todo el mundo, ellos desviaron sus miradas al notar como los miraban.

-Descarados. -comentó la chica incrédula negando con su cabeza. La pareja rieron y se despidieron a los segundos. Todos los demás se miraron y poco a poco se marcharon. Solo quedaron Jimin, Yoongi y Tn.

-Y bueno... ¿Cómo irán los estudio? -un Jimin preguntó a la joven pareja- Ella en ese estado no podrá.

-Tomaré el cargo de mi padre en la empresa. -mencionó de forma relajada.- No tendré la misma preparación de papá, pero aprenderé rápido. Recuerda todos nosotros tenemos poder.

Jimin suspiró en su asiento más relajado, haciendo notar que su preocupación por la joven chica era grande. Era un chico muy dulce ¿Cómo nadie aún lo notaba?

-Jimin. ¿Por qué no tienes novia? -él casi se ahogaba con su limonada ante la pregunta- Di-disculpa no quería...

-No, no pasa nada... Solo me tomó por sorpresa tu pregunta. -respondió rápidamente- Pero no se... -medito- Seguro ya llegará ¿No?

Ella asintió sin estar conforme con lo dicho, él sonrió para después despedirse de su amigo y de la chica.

La puerta se cerro dándoles a entender que estaban solos.

-¿En serio le contaste a Mina?

-Es mi amiga, obvio debía decírselo.

-Fingió bien.

-Es un tanto buena en eso, me imagino que en más de un momento quiso decirlo pero se acordaba de mis amenazas.

-Me impresionas, en si es una buena noticia. -sonrió.

-¿Cuando hablaremos con nuestros padres? -preguntó curiosa.

-Ya me adelante, en la noche vamos a casa de tu madre. -enfocó su mirada en ella con una sonrisa y está asintió.

-Eres el mejor, ¿Lo sabías?

-Claro, siempre he sido extraordinario. -le golpeó en su brazo. Dándose la vuelta para subir a su habitación.

Es increíble como al estar con la persona que quieres resulta ser tan malditamente hermoso, sentir sus abrazos cuando desees, sus besos recordándote el amor que te tiene, las caricias para acelerar el corazón en un instante. Su mirada puesta en ti detallandote con añoración, las palabras expulsadas por su boca diciéndote que nunca se alejará, el rozar de sus labios dándote a entender que solo eres dependiente a ellos. Cada gesto es simplemente una montaña de emociones, te sientes como si estuvieras en el mejor momento de tu vida y por más que sabes que llegará su final; te aferras a que eso no sucederá por ahora. El caminar con tanta normalidad, saber que cada parte de su cuerpo solo te corresponden a ti, la felicidad que irradia al verte a su lado. Cómo se preocupa porque nada te falte, sus constantes regaños por miedo al pasado, sus celos que son solo el reflejo de su inseguridad por los ajenos a nosotros. Todos esos detalles y más son sinónimo de inmensa alegría que desbordan por aquellos pares de ojos, y te preguntas si realmente eres merecedora de tanta atención.

Sus ojos miraron el alrededor y observo todo sin creerlo aún, con solo 19 años ya vivía con un hombre y estaba esperando un hijo de él. Tocó su vientre por una necesidad que se apodero de si misma, movió sus piernas para mirarse en el espejo y sonreír al notar que no se veía nada. ¡Claro! Solo tenía 1 mes y una semana, solo se distinguía un diminuto bulto. Sintió unos brazos rodearle y una sensación de protección la acogió, conocía demasiado bien ese aroma que aquella persona emanaba de su suave piel pálida.

-Te verás más hermosa cuando...  -posicionó sus manos en su vientre, se sintió extraña pero bien. La acarició con sumo cuidado, se inclinó y dio un corto beso en esté. Ella sonrió embobada con la situación que se reflejaba ante sus ojos.- Esté más crecida, pero más hermosa te verás con él o ella en nuestros brazos.

-Sin duda nuestro bebé tendrá un buen padre. -dijo con una sonrisa- ¿En serio tomarás la posesión más preciada de tu padre?

-Por supuesto, ustedes son mi prioridad ahora. Seré rico, pero no dependeré de mi madre siempre. Ahora seré padre y debo de mantenerlos con mi propio sudor.

-Te apoyaré en ello. -besó sus labios. Luego se separó para irse a dar una ducha y luego ir a casa de su mamá.

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-¡Sungjong! -expresó feliz de verle.

-¿Cómo has estado pequeña? -preguntó con una sonrisa en su rostro. Escuchó un bufido de parte de Yoongi.

-Ella esta bien. -respondió con el ceño fruncido- Nos tenemos que ir. -sujeto su mano y comenzo a avanzar. Amaba sus celos.

-Puede responder por si sola, ¿No crees? -contraatacó a la defensiva.

-Si per...

-Estoy bien y espero tú igual, nos vemos. -le dedicó una hermosa sonrisa y la pareja se retió del lugar desapareciendo de su campo de visión.

Ya algo lejos Yoongi se miraba molesto. Es tan adorable verle en ese estado.

-¿Por qué te tiene que decir así? Detesto eso.

-Es solo un amigo ¿Si? No tienes que tener celos.

-No puedo evitarlo, tengo miedo. -murmuró.

-Nada de eso, siempre estaré para ti. -esbozó una sonrisa para él- Incluso si el mundo se opone ahí estaré yo contigo.

-Gracias. -beso su frente y luego sus labios.

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-¿A qué debemos esta cena? -preguntó la madre de la joven.

-Bueno señora...

-Nada de señora. -ríe alto- Dime, suegra.

-¿Eh?... Esta bien, suegra.

-Así esta mejor, ¿Y ahora? -bebió de su vaso- ¿Qué tenían que decirnos?

-Mamá mejor terminemos la cena, luego les diremos -ella asintió y su suegra igual.

La cena transcurrió con normalidad hablaron de temas personales y diversos. La abuela siempre se mantuvo en total silencio, era feliz así.

En más de una ocasión nombraron a la nueva pareja de la señora Min, solo porque Yoongi no lo aprobaba del todo.

-Aún no me convence del todo. -musito.

-Hijo mírate, eres todo un hombre y pronto te irás de casa. ¿Y yo? No me quiero quedar sola, es un buen hombre.

-Mamá no estarás sola, nosotro...

-No hijo, las visitas son temporales. -lo pausó- Tu tendrás tu propia vida, debo rehacer la mía.

-Yo la apoyo suegra.

-Esa es mi hija. -felicito y besó su frente.

-Sigo sin estar de acuerdo. -musitó nuevamente por lo bajo.

Horas de pura armonía, la chica admitía en silencio que tenía nervios era muy joven, no estaba tan preparada como quisiera para esté reto, pero lo asumiría.

-Llego el momento. -se levanto y todos la miraron- La noticia que les diremos son dos.

-La primera es... -habló Yoongi- Tomaré la empresa de mi padre.

-¿En serio hijo? Me alegra mucho escuchar eso. -lo abraza- Tu padre estaría muy orgulloso de ti. -derramo algunas lágrimas- ¿Y, la otra es...?

La pareja se miraron las caras dando a entender que la chica se encontraba mentalmente preparada para dar la noticia, él le brindo apoyo.

-Estoy embarazada.

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Perdón la tardanza estoy enferma

Errores decirme
¿Desorden? Ya lo solucione xd

¿Les gustaría que hiciera curiosidades de mi?

Besos mis Porcornitos y Porcornitas *korazonez*