Siete días.|| Min Yoongi y Tn.

6

Día 2.

-Tomen sus libros de historia. -habló fuerte el profesor. Todos obedecieron y abrieron el libro en donde les correspondía para realizar el informe.

Tn se juntó con Mina ya que era en equipos de dos y bueno con la única que tenía mejor comunicación era con ella, por lo cual ninguna lo dudo.

Tomaron apuntes de todo lo que debían hacer, fueron corrigiendo errores y redactando todo lo que consideraban de gran importancia. Una vez que terminaron su informe se lo entregaron al profesor, él cual lo recibió y para la próxima clase les daría las notas. Tn fue en busca de sus libros en su asiento cuando notó un papel, lo leyó para saber de que trataba.

-Nos vemos en la cafetería.

-Yoongi.

Esbozó una sonrisa ante eso, ¿Acaso sería una costumbre de ahora en adelante? Luego recordó sus verdaderas intenciones y esa sonrisa se borró de inmediato. Levantó la vista y lo vio haciendo su informe con Seokjin, estaban muy concentrados.

Camino fuera del salón y se sentó bajo el árbol nuevamente, esperando la hora en que abrieran la cafetería para ir y hablar con Yoongi, tenía la idea de que si no serían nada le gustaría mucho su amistad, de amigos.

Una vez más sonrió como tonta al recordarlo, no entendía porque a un sabiendo y teniendo bien claro que era prohibido lo quería y anhelo tanto. Se odiaba de cierta forma por eso.

No tomó nota del tiempo hasta que sintió unos brazos rodearle por sus hombros, alzó la vista para encontrarse con la persona responsable siendo esté, Yoongi. Se relajó sintiendo protección su lado. Creía verse tonto por lo sonrojada que estaba.

El tiempo parecía tomar otro rumbo y otro color a su lado, de cierta manera le abrumaba y asustaba abrir los ojos ante la cruda realidad y terminar lastimada.

-¿Cómo supiste que me encontraba aquí? -preguntó sin vacilar.

Él bajo su vista conectando ambas miradas entre si.

-No te encontré en la cafetería. -dijo sentándose a su lado- Así que imagine que estarías aquí, recuerdo que una vez te vi en este mismo lugar con Hoseok.

Recordó lo que le había comentado Hoseok cuando hablaron anoche por celular, quiso preguntar pero lo reprimió, solo ocasionaría problemas.

-Ya veo, bueno ¿Cómo crees que te fue?

-Supongo que bien. -miraba distraído algún punto- ¿Y, a ti?

-Pienso lo mismo.  -entrelazó ambas manos, por alguna razón se encontraba nerviosa con su cercanía- Yoongi, ¿Puedo hacerle una pregunta? -él asintió, tomando un poco de agua- ¿Por qué no tiene novia? -este frunció su ceño notoriamente y ella se arrepintió por hacerle semejante pregunta estúpida- N-no, yo quiero decir...

-¿Estás nerviosa? -negó, él sonrió- No me sorprende la pregunta, muchas personas preguntan lo mismo que tú.

-Es que no lo entiendo, tu no eres feo. -él enfocó sus ojos en lo de ella, ahora si sentía que la había cagado- No me malentiendas. -tartamudeó bajando la cabeza, ¿Qué le pasaba a estas alturas?

Sintió que él se acostaba en el suelo posicionando su cabeza en las piernas ajenas, era un gesto lindo y resultaba mejor cuando se era pareja. Lastima no lo eran y no creía que llegarán muy lejos.

-No me siento capaz de hacer feliz a una mujer en estos momentos. -escuchó atenta sus palabras- ¿Sabes? -confirmó con un ''si'' para que continuase-. Soy un chico que le gustan las fiestas, tomar, follar sin importar qué, pero eso solo es momentáneo. -respiró hondo- Yo sé que algún día llegará la chica que me de un empujón para salir de este abismo y me hará suspirar por ella. -quedó impresionada por tales palabras, quién diría que dentro de él había un chico bueno y lleno de sorpresas- La esperaré hasta que sea necesario. -Tn acarició su suave cabello, él no dijo nada ante el tacto. Al contrario le dedico una sonrisa y ambos entendieron muy bien que pensaba el otro con respecto a esto.

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Entró a su casa para subir a cambiarse con algo de rapidez, resultó ser un día algo largo para él y eso que aun no acaba. Por raro que parezca ese joven se sentía de cierta forma feliz de llevarse bien con Tn una gran chica, acepto ser su amiga y eso le gustaba mucho. Podía ganar ahora más que nunca y mas fácil no pudo ser.

Bajó una vez se encontraba listo, tomó las llaves de su auto para subir y condujo como por tres horas hasta llegar al lugar donde vivía con su tía. Al estacionar ella ingresó al vehículo y se dirigieron al hospital donde estaba su madre.

-¿Como está? -preguntó sin quitar la vista de la vía.

-Esta muy... -la interrumpió.

-No mientas. -pidió en voz baja.

-Bien, ella empeora cada vez mas. -confesó enfocando su mirada en él- Antes de ingresar al quirófano ella me comento que si algo le sucedía ya fuese grave. -susurro- Te vinieras conmigo a vivir.

-No lo haré, aunque sea petición de mi madre. -dije algo serio por las palabras de su tía- Vuelva o no me quedo en casa, luego veré que hago con mi vida.

No se dijo ni se mencionó una palabra mas, la mujer se acomodo en su asiento para liberar la tensión de sus músculos. Mientras el joven siguió conduciendo hasta dar con él hospital, bajaron para luego ingresar a las instalaciones, fueron a los ascensores hasta llegar al piso correspondiente. Miraron un doctor y el chico corrió tras él.

-¿Cómo sigue mi madre?

-¿Usted quién es? -el joven iba a contestar pero su tía se adelantó.

-El hijo de la mujer que esta internada ahí. -señaló la puerta.

-Oh disculpe, en estos momentos ella se encuentra igual, no avanza. -caminó a la puerta- Si ve que mueve algún músculo, llámeme rápido. -asintió y lo dejaron pasar.

Las habitaciones solían ser las mismas comunes y sin nada en particular, paredes blancas y aparatos instalados en diferentes lugares, claro cuando no eres paciente de emergencia. Pero esa no, esta era contraria a las demás resaltando, solo una camilla y miles de artefactos conectados entre si y tubos para darle vida al ser que más amaba, y que si llegaba a perder le dolería mucho.

Se acercó a paso lento y con la vista nublada, las piernas le flaqueaban y sus manos temblaban un poco. Su madre se encontraba conectada a todos esos artefactos y con tubos que le filtraban aire a sus pulmones, un dolor se pronunció en su pecho ocasionando cierta triste y con ira a la vez por nunca preguntarle como se sentía, solo se preocupaba por las fiestas y su estatus de chico popular. Ahora ella estaba allí, sin vida propia solo una artificial.

-Mamá, estoy aquí. -sus lagrimas resbalaron por sus mejillas- No me llamaste, así que vine yo personalmente por ti ¿Puedes despertar? -su voz se quebraba lentamente- Soy un inútil sin ti a mi lado. -no pudo resistir más y sollozó contra las sabanas, no quería que nadie le escuchará en esas condiciones.

Ella no le respondió ni movió la mano, no hizo ni el menor de los gestos. Solo su pecho subía y bajaba, pero solo era producto del respirador artificial, no había mas que hacer solo esperar pacientemente. Tomó su mano y la entrelazo fuerte sin lastimarla.

-''Perdí a papá, no puedo perderte a ti también''.

Llorar delante de las personas no era lo suyo por eso prefirió que su tía se quedará afuera, de todas formas mostrar su lado sensible estaba fuera de discusión, solo su madre la conocía y nadie mas.

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Acosté su exhausto cuerpo por el largo viaje, su cara se encontraba totalmente echa un desastre. Llorar no te hacía lindo, pero ya para que preocuparse, la persona que quería la estaba perdiendo. Como anhelaba volver el tiempo atrás y decirle todo lo que sentía, ahora se las decía pero ella no las escucha y era frustrante.

-''No te vayas''.

Se lanzo a su cómoda cama y recordó el tacto de Tn en su cabello. Por alguna razón fue ella quien vino a su mente sin haberlo pensado, tal vez sus sabias palabras le harían sentir mejor, porque sus amigos no resultaban buenos en esos temas delicados.

Rió por ello, par de tarados como los quería.

-''Juntos siempre, amigos''.

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Bueno capítulo nuevo, era ayer pero soy rebelde y lo subí hoy >:v
Errores decirme

¿Desorden? Listo amores <3

Besos mis Porcornitos y Porcornitas <3