Trilogía Lux in Tenebris (I)
A pesar de los años llenos de fama y dinero, Taehyung siempre ha pensado en aquella niña de ojos azules que robó su corazón desde el primer momento en que la vio. Nunca dejó de amarla a lo lejos.
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«Odio cuando miras a alguien más»
Mi mente no deja de dar vueltas, preguntándome si he hecho lo correcto al portarme de esa manera con quien solía ser mi mejor amiga. La he alejado de mí por miedo a permitirme volver a adquirir algún tipo de cariño por ella, porque es mucho más que obvia la razón. Tiene un solo nombre, y es una chica que me hace sonreír todos los días cuando estamos juntos: Son Sana.
Me relamo los labios al pensar en ella, en la manera en que probablemente es una de las pocas personas que entiende a la perfección lo que es sentirse bajo agua. No pone presiones cuando me cierro en mi propio mundo, no exige atención al verme a punto de tirarlo todo por la borda. Es feliz cuando yo lo soy, sonríe cuando lo hago y le apasiona mis gustos. Es una relación de dos, porque regreso el mismo esfuerzo mostrándole que me importa cada mínima cosa que ella realiza.
Mejor amiga desde hace cuatro años, enamorada a escondidas desde que las grabaciones para nuestra serie empezaron hace un par de meses. Las cosas sucedieron tan rápido entre nosotros que a veces me preguntó en qué momento cruzamos la fina línea de nuestra amistad. Una sonrisa de lado aparece en mi rostro al recordar su fiesta de cumpleaños, ambos completamente ebrios de pies a cabeza al igual que los demás.
Después de que todos se fuesen me encontraba en su habitación como siempre, en el lugar en que tantas veces había dormido sin ningún pensamiento impuro en mi mente. Pero aquella noche algo cambió cuando la hermosa mujer salió del baño desnuda, sin ninguna prenda cubriendo sus partes más íntimas. Mi instinto animal tomó las riendas de mis acciones. No pasaron ni dos segundos cuando la tenía en mi regazo con mi boca recorriendo cada extremo de su pecho, con mis manos tocando todos los rincones de la parte baja de su anatomía.
Sana es una de las muchachas más talentosas que conozco. La manera en que puede aprenderse sus líneas con tan solo mirarlas una sola vez es admirable. O como puede hacer cualquier personaje que le asignan suyo, volverlo parte de ella haciéndote creer que ha pasado por cada una de esas dificultades. A su corta edad ha ganado varios premios importantes por su trabajo, demostrando con hechos que es una persona dueña de un talento único.
Salgo de mis pensamientos cuando Seokmin nos dice que irá a ver cómo está mi hermana después de lo sucedido. No puedo evitar sentirme culpable al saber que tiene razón de alguna manera u otra. Sana abarca gran cantidad de mi tiempo cuando estoy a su lado, mi atención siendo suya y de nadie más porque me gusta hacerle sonreír. Soy capaz de ver en el rostro de Hoseok que tampoco le agrada la idea de que el viaje familiar se vea cambiado ante su llegada.
—Tengo una sorpresa para ti —le digo, a lo que alza una ceja con los brazos cruzados —. ¿Adivina quién está viniendo con Sana?
El disgusto deja sus ojos mieles para abrirse en sorpresa, sus irises llenándose de felicidad. Sus mejillas se llenan de un color rosado suave, y sus labios esbozan una gran sonrisa de emoción. Entreabre los labios, provocando que una carcajada salga de mi boca.