~Follow you~ {GoldxFreddy Goldred} T2 (Finalizada)

Cap 41

P.O.V Gold

Freddy está extraño desde que ha entrado a mi casa.

Yo estudio mientras él se tumba en mi cama detrás de mi con el móvil, aunque antes estaba jugando con las ratas.

Suspiro y lo miro disimuladamente; parece entretenerse.

Vuelvo mi vista al libro no sin antes empezar a pensar en el gemelo de Freddy... Me pareció algo distante e inquietante.

Supongo que así me veo yo frente a otros ¿no? Serio, callado, observador...

—Gold... ¿cuando terminas? —pregunta Freddy. Yo ruedo los ojos.

—Te dije que debía estudiar, canelita... Seguramente toda la noche me la pase estudiando ¿entiendes? —respondo. Freddy suspira, se levanta y se pone a mi lado.

—Que difícil... Suerte —murmura dejando un beso en mi cabeza. Yo suspiro, que tierno.

—Gracias —respondo mirándolo y tomando su mejilla para que se acerque y juntemos levemente nuestros labios.

Freddy sonríe cuando nos separamos.

—Entonces... No te molesto —comenta sentándose de nuevo en la cama.

—Por cierto, ¿por qué tantas ganas de venir a dormir aquí?

—No soporto por ahora mi casa, mi padre me molesta y molesta a Francis y cuando lo defiendo mi madre y él me molestan a mí... Es una casa de locos y necesito un descanso —responde.

Eso sonó tan poco Freddy... Realmente está cambiando.

—Vaya... —murmuro.

P.O.V Francis

Todo está aburrido sin Freddy.

Padre y mamá están discutiendo mientras que yo estoy en la habitación de Freddy sin hacer nada.

Tomo aire y suspiro, hoy ha sido un día agotador lleno de nuevas emociones; algunas malas y otras buenas.

La cuestión esque el colegio es mucho mejor que trabajar, y es mil veces mejor que cuando padre me enseñaba, eso si era horrible.

Pero ahora todo ha mejorado: Ya no más trabajo, ya no hay riñas a todas horas, ya no más castigos, ya no más necesidad de ser serio... Ahora me siento algo más libre.

Excepto porque lo de ser serio que debo de hacerlo delante de casi todos, pero me alegra tener a alguien con quien puedo ser yo mismo sin importar nada, es muy satisfactorio.

Suspiro con una sonrisa, que se borra de golpe cuando escucho pasos apresurados junto a gritos acercarse a la habitación.

Padre abre la puerta bruscamente y la cierra con un potente golpe que retumba en mis oídos. Seguido cierra el puño y se muerde el labio inferior con ira.

Yo me siento en el colchón y agacho la cabeza.

—... Hola padre —murmuro.

—¿"Hola padre"? ¿¡Tienes idea de lo que has hecho!? ¡Llevo toda la maldita tarde discutiendo con tu madre por tu culpa! ¿¡Entiendes!? —Trago saliva y asiento con la cabeza.