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Era una tranquila mañana, los pájaros cantaban y los rayos de sol se colaban por las ventanas, la brisa era fresca y suave y te hacía sentir como si volaras, y que estaba haciendo mientras todos disfrutaban de ese estupendo día pues simple, ESTAR ENCERRADO CON LA PEOR PERSONA DE ESTE MUNDO EN UN SALÓN ABANDONADO. Todo por un tonto simulacro, desearía haberme quedado en el hospital hasta la graduación.

Intentaba sobrellevar este día, los dos decidimos ignorarnos completamente y que cada uno limpiara un lado del lugar, sin hablarnos, sin mirarnos, sin interactuar el uno con el otro, principalmente porque nos odiamos y porque después de...... lo qué pasó...... es algo incómodo el vernos, así que fue como un acuerdo silencio solo nos alejamos y así es mejor.

Estaba limpiando un poco de polvo que había en las ventanas de arriba que daban a pasillo, era muy fácil ya que soy alto, hasta que escuché unas quejar atrás de mi.

— arhg, estupidas ventanas, esto está echo para gigantes o que- era Cárter que, aunque estaba parado en las puntas de los pies, no avanzaba las ventanas, como alguien puede ser ten enano, yo no tuve problema- y tú que estás mirando- de repente se gira y me ve con cara de enojo.

—.....- no respondí, solo me gire y seguí con lo mío ( BOOM) se escuchó un golpe tras de mi.

— Hay, tonta silla- Cárter se callo sobre unas sillas golpeándose la rodilla.

Aunque, este en contra de mis pensamientos sobre el, mis principios no me permitirían no intervenir, además me ayudo, de algún modo, en le bosque, creo que le debo una.

— oye, em, necesitas ayuda- me acerque un poco a él pero respondió con antipatía.

— no necesito nada de ti oíste- se levanto con una liguera dificultad, yo solo me aleje otra ves.

Vaya, eso pasa cuando intentas ser amable con alguien como el, por eso no lo quiero ni como amigo, es tan detestable y antipático, arhg, yo solo quería ayudar. (BOOM), cárter volvió a intentar llegar a la ventana y volví a caer esta vez causándose un golpe mas grave, un poco resignado me dijo.

— está bien, puedes ayudarme- camine hacia el y Justo cuando lo iba a ayudar a levantar me advirtió- si le cuentas a alguien te destruiré.

— tampoco pensaba decirle a nadie- lo pongo de pie, para darme cuenta que estaba SONROJADO, creo que resivir ayuda no es común para el, hice lo que mejor parecía para poder alcanzar la ventana, subirlo a mis hombros.

— q-qué haces- dice alterado.se tambalea pero logre conservar el equilibrio.

— esto es la forma más fácil para llegar a la ventana, así que, no te quejes y apresúrate- lo tenía sujeto fuerte de sus muslos y él puso sus pies en mi espalda pasándolos debajo de mis brazos para sujetarse bien.

Tardo más de lo que creí, ya que la ventana ocupaba toda la parte de arriba de la pared y al no tener un piso firme, Cárter se movía mucho, haciéndome hacer lo mismo, estuvimos apunto de caernos en varias ocaciones pero no sucedió o al menos eso creí, ya estaba a punto de terminar, solo faltaba bajar a Cárter y listo, volver a ser completos extraños en una habitación, pero no, el mundo me odia y eso me quedo claro hoy.

Me agache ligeramente para que cárter bajará cuando, por extrañas circunstancias, enserio no se como fue esto posible, Cárter se cae, yo por mero instinto me giro y lo tomo, lo agarro de la cintura y lo levanto para que apoye sus piernas en mis caderas, esto era algo que hacía mucho con mis hermanas cuando pequeñas ya que, ellas se creían supergril entonces,le tocaba a supermán llegar a su rescate, así que en esta ocasión también llegó supermán y como si cárter fuera una de mis hermanas lo peque a mi pecho abrazándolo en modo protector, no se que paso solo sentí el impulso de protegerlo y él también reaccionó así, me abrazo igual de fuerte.

BullyingDonde viven las historias. Descúbrelo ahora