Cincuenta

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Navidad en Italia – Parte II

En cuanto llegamos a la casa, cada quien fue a su habitación a dejar las  compras para bajar nuevamente y esperar la cena.

Lamentablemente, Marcus, se quedaría junto con su familia en casa de Jay; aunque seguía ligeramente enojada con él y desconozco la razón del porqué ellos dos no se llevan bien, no quería que se peleara con alguien de su familia.

Y hablando de Jay... Salí un momento a la terraza del tercer piso de su casa y lo veo allí, solo. Decido acercarme y arreglar las cosas de una vez por todas.

Estaba tan concentrado que se asustó cuando lo abracé por la espalda.

— ¿Todo bien? – le pregunto poniéndome de puntas para besar una de sus mejillas.

— Creí que estabas molesta conmigo...

— Lo estoy pero sigo siendo tu novia ¿no? – me pongo a su lado sin dejar de abrazarlo – ¿Estás bien?

— Si... – gira un poco su cabeza para mirarme – Perdóname por hablarte de esa manera en la tienda, no era mi intención

— ¿Puedo saber la razón de por qué te llevas tan mal con alguien de tu familia?

— ¿Me perdonas?

— Jay, sabes que te amo más que a nadie y que siempre voy a estar ahí para ti, para lo que necesites, pero... No quiero que pagues tu enojo conmigo ¿está bien?

— Si, lo siento. No volverá a pasar, lo prometo

— Bien – me acerco para darle un beso – ¿Me quieres contar por qué Marcus y tú...?

— La verdad es que no me gusta hablar de eso...

— Si no quieres, esta bien. Solo quería entender un poco su situación

— Otro día te digo ¿si? – asentí. — Aunque si te puedo decir que no es una persona en la que confiaría

— Esta bien, creo – le digo. ¿Por qué dice eso de su primo?

— Ustedes dos – ambos nos volteamos ante el llamado de su abuela – ¿No tienen hambre o qué? ¡Bajen a cenar! ¿O es que acaso van a comer entre ustedes huh? – dice mirándonos con picardia

— Abuela...

Jay me toma de la mano y me lleva con él mientras le hace muecas a su abuela. Los tres bajamos al primer piso y caminamos hacia el comedor; allí estaban Elle, Ivana, los padres de ellas, mi cuñado y los tíos de Xavier; padres de Catherine y Marcus.

— Angie, antes de que se me olvide – me dice Elle una vez llegamos – Es noche de chicas

— Esta bien... – le sonrío mientras tomo asiento

— No, Angie es mía – interviene Jay

— Jay, no empieces. Desde que Angie dejó la universidad, casi no la veo

— ¿¡Dejaste la universidad!? – exclama Xavier

— No, por supuesto que no – me apresure a decir – Elle se refiere a que dejé las residencias de la universidad para irme a vivir con Jay

— Uff... Pensé que era porque estabas embarazada... – dice Xavier

— Xavier – lo llama Jay mirándolo directamente. Había pasado un tiempo ya, pero era un tema un tanto delicado para mi.

Unbreakable LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora