Capítulo 28

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Terminé de comer mi lasaña sin dejar ni un poco en el plato. Estaba absolutamente deliciosa. Miré mis dedos y no pude resistirme a lamer los restos que quedaron entre ellos. Me percaté que Michelle se me quedaba mirando con la boca abierta mientras los lamía.

—Tu lengua es increíble, ¿no te lo han dicho?—habló

—Deja a mi bebé en paz-—salió Calle del baño a mi rescate y se sentó en mi regazo abrazándome

—Aún estoy enojada contigo—avisé

—Mi amor, sabes que te quiero—me dio un beso suave en el cuello y me miró con un puchero

—Vamos por buen camino, Ruiz—se levantó aplaudiendo

—¿Por buen camino?

—Un beso en el cuello abre más piernas que un ginecólogo, querida—explicó

Michelle había pasado toda la tarde en la empresa junto a Calle. Ella no quería estar allí, pero se quedó sólo porque estaba Sofía y seguramente quería llevarla a la cama esa misma noche. Tuvieron un par de reuniones que para mi hubieran sido aburridas, revisaron algunos archivos y todo ese tipo de cosas. Calle era la persona que reemplazaba a Kim durante sus ausencias en la empresa; ella sabía dirigirla correctamente y sabía como funcionaba. Si la empresa quedara en manos de Sofía, cuando Kim regresara todo sería un desastre total y quedaría en quiebra.

—Necesito que me ayudes con Sofía—la ojiverde me sacó de mis pensamiento—Tienes que hablarle de mi, decirle que yo me comporto bien y soy buena persona

—¿Y tú te comportas bien?—levanté una ceja

—Ella no tiene que saber que es mentira—contestó

—Eres caso perdido—dijo Calle con su rostro en mi cuello

—Hoy intenté muchas de mis tácticas con ella, pero ninguna parece funcionar

—Sofía es difícil—advertí

—Pero no imposible. Ella será mía—dijo—Ya veras

—Tienes mucha confianza en ti—le dije tratando de no concentrarme en el trabajo que hacía mi novia en la piel de mi cuello

—También potencial—me guiñó el ojo—¿Quieres probar un poco de esto?—se señalo

—Aparta la vista de mi novia—advirtió Calle en susurro

—Las amigas se comparte las cosas—se hizo la ofendida

—A partir de hoy te acercas a mi novia y te arranco los huesos—amenazó

Me dio tanta ternura que la abracé para pegarla más a mi y sentí su sonrisa en mi cuello. Michelle se levantó malhumorada y hablando otro idioma salió de la habitación y lo siguiente que escuché fue la puerta principal cerrarse con fuerza, dejándonos sola, debido a que la pequeña se había quedado a dormir con su tía Sofía. Si, Calle en la llamada me había engañado.

Mi novia sacó su rostro de mi cuello y me miró con una sonrisa antes que yo uniera nuestros labios en un beso. Al principio fue un beso despacio, pero esa tranquilidad quedó a un lado cuando decidí llevar las cosas a un segundo nivel. Ni siquiera soy consciente del momento en que recosté a mi novia en el sofá, sólo reaccioné cuando estaba moviendo mis caderas sobre ella.

—¡No lo puedo creer!— al escuchar la voz de la chica de ojos verdes me sobresalté y caí al suelo—¿Acaso estaban esperando que me fuera para tener sexo?—la vi poner una mano en su pecho y hacer como si fuera a llorar

—Deja el drama—bufó mi novia arreglando su blusa y sentándose a la vez que me ofrece su mano para levantarme

—Tú cállate—dijo ofendida por sus palabras, haciendo mucho más drama—Por años me hiciste pensar que tu eras la activa en las relaciones—se limpió una lágrima invisible—Eras mi ídola, Daniela

TODO POR AMORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora