DIA 6 (parte 1)

476 20 3
                                    


Alfred pasa por delante del parque, dónde se encuentra a Celia jugando.

ALFRED: Hola guapísima.

CELIA: Hoia Afred. (Hola Alfred)

ALFRED: ¿A qué juegas?

CELIA: Hago castiyos paa vivir cuando zea mayor. (Hago castillos para vivir cuando sea mayor)

ALFRED: ¿Y vas a vivir en todos estos castillos tan grandes?

CELIA: Zii

ALFRED: ¡Muy bien! ¿Oye, y dónde está Amaia?

CELIA: Ayi (Allí) (Señala un banco, donde esta Amaia sentada, mirándolos).

ALFRED: Es muy bonita.

CELIA: Zi, peo ayer no. (Si, pero ayer no)

ALFRED: ¿Y por qué no?

CELIA: Poque ioraba. (Porque lloraba)

ALFRED: ¿Por la noche?

CELIA: Zi.

ALFRED: Voy a hablar con ella. Adiós preciosa. (Le da un beso en la mejilla y se va hacia el banco, donde se sienta al lado de Amaia) ¿Cómo estás, aparte de guapísima?

AMAIA: (se sonroja) Bien.

ALFRED: ¿Seguro?

AMAIA: ¿Por qué no le tendría que estar?

ALFRED: Es que... me ha dicho un pajarito que ayer te fuiste a tu habitación llorando.

AMAIA: Celia ¿verdad? ¡Esta niña me volverá loca!

ALFRED: ¿Pero es verdad?

AMAIA: ¡Claro que no! ¡Los niños pequeños tienen mucha imaginación!

ALFRED: Pues yo la creo.

AMAIA: Pues no es verdad.

ALFRED: Sé que no me lo vas a reconocer, ni me dirás qué te pasa, pero solo quiero que sepas que para cualquier cosa que necesites, sea cuando sea, yo estaré aquí para ayudarte. Y no pasa nada si no me lo quieres explicar, lo entiendo, y sé que cuando te sientas preparada para explicármelo ya me lo dirás. (Ella lo abraza) Recuerda, estoy aquí para todo.

AMAIA: Muchas gracias amigo, te quiero.

ALFRED: Te quiero.

-

Ana está sentada en un acantilado mirando el paisaje y aparece Mimi.

MIMI: ¿Qué haces aquí?

ANA: Me ha gustado el paisaje y me he quedado pensando, ¿Y tú, que haces aquí?

MIMI: Descubrí este lugar en el segundo día y des de entonces, cuando encuentro un ratito me vengo aquí a reflexionar.

ANA: ¿A reflexionar sobre qué?

MIMI: Nada en concreto. ¿Y tú? ¿Sobre qué pensabas?

ANA: Sobre todo lo que ha cambiado en mi vida desde que salí de la academia. Aunque hace meses, sigue maravillándome todo este cambio, y echo mucho de menos a mis familiares, hasta echo de menos nuestras discusiones, en fin, que echo de menos la normalidad, aunque a la vez no cambiaría lo que me está pasando por nada del mundo...

MIMI: Ya, a mí me pasa igual... Por cierto, ¿cómo está tu familia?

ANA: Todos bien.

Silencio incómodo.

ANA: Bueno, creo que yo ya me voy, y te dejo reflexionar tranquila.

MIMI: Si es por mí no hace falta, ¿eh?

ANA: Nono, no es por ti, pero llevo mucho tiempo aquí, y ya me tengo que marchar.

MIMI: Aii, un momento, antes de que te marches quiero decirte que mañana, en el castillo de Torres, te llevaré a un lugar especial. Ponte guapa, aunque ya lo eres mucho.

ANA: Vale. Muchas gracias, ¡adiós!

MIMI: ¡Adiós!

Yo nunca nuncaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora