Raoul llama a la puerta de la habitación de Mireya.
RAOUL: ¿Se puede?
MIREYA: Las paparras no.
RAOUL: Entonces sal tú, que quiero llevarte a un sitio.
MIREYA: (Abre la puerta) ¿Dónde?
RAOUL: Es una sorpresa. Coge bambas y ponte pantalón largo. Te espero a bajo.
MIREYA: ¿Pantalón largo?
RAOUL: Vamos a andar un poco por el bosque.
MIREYA: Vale.
En 5 minutos Mireya baja, y ella y Raoul suben al coche.
MIREYA: ¿Es muy lejos?
RAOUL: (Arranca el coche) 15 minutos en coche y una hora y media andando por el bosque.
MIREYA: ¿Qué? Me has dicho que andaríamos "un poco" por el bosque. No una hora y media.
RAOUL: Si te lo hubiese dicho no hubieras venido.
MIREYA: Pero a ver, son las 6 y media de la tarde. Entre todo llegaremos a las 8 y media, y ya estará anocheciendo. Entonces tendremos que volver por el bosque, sin ver NADA. ¿Tú estás loco?
RAOUL: He traído la cena. Y linternas. Lo tengo todo planeado.
MIREYA: Eso espero...
RAOUL: Tranquila, soy inteligente. Conmigo no te va a pasar nada.
MIREYA: Si tú lo dices...
RAOUL: ¿Porque no te fías de mí, princesa?
MIREYA: ¿Por qué debería fiarme?
RAOUL. Porque lo hago todo bien.
MIREYA: ¿Conducir barcas también?
RAOUL: Aquello fue un pequeño fallo... Y la mayor parte de la culpa fue de las olas.
MIREYA: Si, claro.
Silencio incómodo.
RAOUL: ¿Sabes qué echo de menos?
MIREYA: ¿Qué?
RAOUL: Tus besos. Hace mucho tiempo que no me das ninguno.
MIREYA: Son errores que he cometido. Y no voy a cometer más.
RAOUL: No vas a durar demasiado.
MIREYA: ¿Por qué?
RAOUL: Porque soy irresistible.
MIREYA: ¿Y porque crees eso?
RAOUL: Tu misma tienes que contenerte para no besarme.
MIREYA: No eres irresistible. Eres odioso.
RAOUL: ¿Enserio? (Pone morritos, cierra los ojos y se acerca a Mireya)
MIREYA: (Se aparta) ¿Puedes prestarle atención al volante? Que como sigas así vas a chocar también el coche, y yo no quiero morir.
RAOUL: Vamos a morir juntitos, como dos románticos enamorados.
MIREYA: ¿Pero qué dices? Anda cállate ya por favor.
RAOUL: (Para el coche) Ya hemos llegado.
Raoul y Mireya bajan del coche y van andando por el bosque hasta llegar a un acantilado des de donde se ve todo el cielo lleno de colores por el anochecer.
RAOUL: Ya hemos llegado.
MIREYA: Uau, que bonito.
RAOUL: Aquí venía con mi abuelo cuando yo era pequeño. Veníamos a esta hora y nos quedábamos toda la noche despiertos mirando las estrellas. Murió hace dos años, y yo aún lo echo muchísimo de menos... (Le sale una lágrima).
MIREYA: ¿Estas llorando?
RAOUL: No, claro que no.
MIREYA: Ven (lo abraza)
Se están unos minutos abrazados y al cabo de un rato ella lo besa.
RAOUL: ¿Lo ves? Te dije que era irresistible princesa.
MIREYA: Ha sido un beso de consuelo. Y no cuenta porque yo estaba flipando.
RAOUL: ¿Enserio?
MIREYA: Si. Mi cabeza estaba en plan: "¡Wow, el "chico orgulloso y sin sentimientos" está llorando!
RAOUL: No estaba llorando.
MIREYA: No, solo estabas sudando por los ojos.
RAOUL: Claro. (Se quedan mirando el cielo)
MIREYA: ¿Qué has traído para cenar?
RAOUL: Bocadillos. Uno de queso para mí y uno de atún para ti.
MIREYA: ¿Cómo lo has sabido?
RAOUL: Soy observador.
MIREYA: Bua, muchísimas gracias por todo. Esto es precioso, y el viaje ha estado bien, aunque un poco largo...
RAOUL: ¿Enserio? Pues para estar bien no has dejado de quejarte.
MIREYA: Porque estaba cansada, pero ha sido bonito. ¿Nos sentamos?
RAOUL: Claro.
Comen y hablan de diferentes temas.
RAOUL: Deberíamos irnos ya.
MIREYA: ¿Porque?
RAOUL: Creo que en 2 o 3 horas va a llegar una tormenta. Y de las grandes.
MIREYA: ¿Eso lo has sabido tu solo?
RAOUL: Claro, me crié en el campo.
MIREYA: ¿Y practicaste tu ego con las vacas?
RAOUL: No teníamos vacas. Mi familia era agricultora.
MIREYA: Cada día me sorprendes más...
RAOUL: Venga, vamos a coger las cosas.
Cogen las cosas y entran otra vez en el bosque. Solo entrar Mireya se cae y se tuerce el tobillo.
RAOUL: ¿Te duele mucho?
MIREYA: No me digas que también eres médico. Sí, me duele muchísimo.
RAOUL: Déjame ver. Está hinchado. Intenta moverlo.
MIREYA: No puedo.
RAOUL: ¿No puedes, o te duele si lo haces?
MIREYA: (Llorando) No lo sé, no puedo. Por favor, quiero ir a casa. O al médico. No quiero más dolor.
RAOUL: (La abraza) Venga, ya está. Voy a llevarte a caballito hasta el coche, pero tienes que tranquilizarte.
MIREYA: Vale.
Raoul lleva a Mireya hasta el coche, y después al hospital, dónde le hacen radiografías.
DOCTOR: Mireya Bravo, puedes pasar. (Mireya y Raoul entran en la consulta y se sientan en las sillas) Tienes un pequeño esguince. Vamos a vendarte el pie y a darte unas muletas. No puedes apoyar el pie en 3 días. Después de estos 3 días podrás andar normal, aunque deberás tener el pie vendado unos 7 días más, por si acaso. Mañana se te va a hinchar, si te duele tomate un ibuprofeno o paracetamol. No hace falta que vuelvas, la venda te la puedes sacar tu misma. De hecho, también puedes sacártela para ducharte.
MIREYA: De acuerdo. Muchas gracias.
Le vendan el pie a Mireya y salen del hospital.
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Yo nunca nunca
Teen FictionTras salir de al academia, y después de medio año sin verse, los chicos de OT2017 (no todos) se reencuentran en un pequeño pueblo de playa, viviendo en la mansión de Aitana, dónde surgirá el amor. (Si no visteis OT2017 no hay problema, prácticamente...