Mia
Aquel sueño me dejó totalmente confundida, principalmente por el hecho de que mi mente siempre trató de decirme la verdad o advertirme de alguna manera. Me pregunto que es de mi madre adoptiva. ¿Aún querrá sacrificarme? ¿Estará ideando algún tipo de plan maestro?
Aunque me siento lo suficientemente segura en este lugar, hay pequeñas preocupaciones que no me dejan vivir tranquila, como el hecho de que Camille es constantemente acechada por aquellos demonios al igual que mis amigos.
Bajé silenciosamente las escaleras de aquella enorme casa sin hacer algún tipo de ruido. Sé que es estúpido, ya que Christopher me escuchara de todas maneras por ser vampiro, pero debo ser cortes, ¿no?
Necesitaba tomar un gran vaso de agua porque mi boca estaba seca y realmente no podía soportar aquella sensación. Vi que la luz de la lámpara en la sala estaba encendida, lo cual llamó mi atención. Asomé mi cabeza solo para ver si había alguien allí.
Christopher estaba con un vaso de lo que supongo es whisky en la mano y la otra estaba apoyada en su frente como si estuviese realmente preocupado. Me causa mucha curiosidad saber sobre él y su pasado, pero sé que no será capaz de contarme cosas tan privadas como lo es su vida. Además, basta y sobra con saber que es uno de los primeros híbridos nefilim vampiro de la historia. Creo que por el momento no necesito indagar más en el asunto.
— ¿Qué haces despierta a esta hora, Mia? Son las tres de la mañana — sus ojos cansados se dirigieron a mí.
— Tuve un sueño algo extraño. El mismo de siempre — me encogí de hombros y caminé hasta sentarme a su lado —. ¿Por qué bebes? ¿Estás angustiado?
Me miró de mala gana, pero con una pequeña sonrisa en su cara y luego estiró su brazo para dejar el vaso sobre la mesa de centro.
— ¿Cuál fue tu sueño? — se acomodó hacia un lado para quedar frente a mí y darme toda su atención.
— Quiero creer que son mis padres biológicos — jugué un par de segundos con mis manos —. Estamos mi padre y yo, acostados, él siempre contándome el mismo cuento terrorífico.
— ¿Terrorífico? — él rio un instante.
— Sí, acerca de una temible bruja que quiere apartarme de mis padres. Mi madre es la reina de los lobos y mi padre el rey del lugar. No sé en qué escenario él sería un rey y ella un lobo porque para ser sinceros yo no soy ninguna princesa y mucho menos un lobo ─ reí un poco y miré a Christopher.
Su mirada era seria como si pensara algo muy importante, incluso, por un momento, pensé que no escuchaba nada de lo que decía.
— Tu eres una princesa, Mia — dijo él tiernamente a lo cual sonreí.
— Obviamente no. Al contrario, soy una abominación. Realmente desearía ser completamente normal, una humana común y corriente — di un gran suspiro —. ¿Me das algo de Whisky?
— Tienes dieciséis — elevó su ceja juzgándome —. No te daré alcohol y mucho menos whisky.
— Tengo diecisiete, casi dieciocho. Por favor, Christopher, es solo un poco.
— Absolutamente no. Creo que deberías ir a dormir en lugar de beber.
Rodé los ojos y lo abracé. Muchos pensaran que es algo extraño, sobre todo Camille, pero para mí es algo completamente desinteresado estar con él. No busco nada más que la compañía de Christopher.
Vi como él tomó una manta y me tapó con ella. Su brazo rodeó mi hombro y así de alguna manera el sueño me ganó por completo.
***
Lentamente abrí los ojos y pude ver a través de la ventana que el cielo estaba totalmente oscuro. Miré el reloj de la pared que marcaba las ocho en punto. Miré a un lado de mí y Christopher seguía durmiendo. ¿Cómo rayos dormimos tanto?
Su brazo cubierto irradiaba una luz brillante a través de la ropa, lo cual me pareció completamente extraño, jamás vi la marca de Christopher. Debe ser igual a la de Tristán.
— Chris, despierta. Tu brazo brilla — lo moví reiteradas veces hasta que despertó.
Descubrió su brazo y aquella marca brillaba tan fuerte como vi brillar la marca de Camille.
— ¡Diablos! — Christopher miró el reloj de la pared — ¿Cómo rayos pudimos dormir tanto?
— ¿Qué es lo que sucede Christopher? ¿Por qué tu marca brilla?
— Nosotros, los primeros, como creadores de la alianza tenemos esta habilidad. Cada vez que nuestra raza está en peligro, nuestra marca brilla. La he visto brillar millones de veces antes, pero ahora que sé que Daniel es el peligro inminente de mi familia, no dejaré que los ataque.
Dicho esto, corrió hasta su habitación y yo también a la mía. No dejaría que se fuera solo y mucho menos si mis amigos están en peligro.
Estaba en la puerta de la entrada esperando hasta que apareció por las escaleras con el traje de la alianza, es realmente impresionante. Pude ver que en los bolsillos al interior de su chaqueta llevaba aquellas características cuchillas que ocupan los chicos en las misiones.
— ¿Esa es tu chaqueta de la alianza?
— Claro — pasó por mi lado rápidamente hasta llegar al auto a lo cual corrí lo más rápido que pude y me subí en el asiento de al lado.
— Tu no iras, Mia
— Sí, iré. Mis amigos están allá.
Dio un suspiro y encendió el auto. Salió lo más rápido que pudo directo a la ciudad y ninguno de los dos dijo nada durante el viaje. Cuando llegamos a la calle principal, él estacionó y bajó rápidamente del auto. Había muchas personas en el lugar, mejor dicho nefilim, los cuales murmuraban un sinfín de cosas y lo único que podía escuchar era una voz de hombre realmente tenebrosa para mi gusto. Seguí a Christopher entre la multitud hasta que llegamos al centro del problema donde un hombre de cabello muy rubio y Jasmine Evans compartían un par de palabras.
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Los Caídos #1 - Ángel guardián
FantasyLos Caídos es el nombre de una alianza creada por cinco nefilim, cuyo único objetivo es destruir a las deidades del infierno para proteger a la humanidad. Camille es una adolescente cuya vida se ve interrumpida por aquel nuevo mundo que la atorment...