Things Of Love |Jackson Wang|

Capítulo Treinta y Uno

Jackson se había distraído yendo a estacionar su auto, ahora se arrepentía de haberlo llevado pero sin él no había podido buscar un buen lugar para su cita con Katheryn.

Cuando estaba de vuelta en el parque buscó a Katheryn, la vió a unos metros de distancia, se veía muy confundida buscando en todos lados. Le pareció divertido verla de ese modo y decidió esperar un poco.

Cuando vió que Katheryn dejó de buscarlo, se acercó, planeaba asustarla pero en ese momento un chico llegó por detrás y le cubrió el rostro. Jackson frunció el ceño y se dió prisa para llegar más rápido con ellos.

Pudo ver el rostro petrificado de Katheryn y al acercarse escuchó cuando ella murmuró aquel desagradable nombre.

—Sorpresa —respondió el tipo.

—¡Kate! —llamó Jackson viéndose obligado a sonreír.

Katheryn balbuceó y lo miró sin cambiar su expresión.

—¿Kate? —inquirió Dylan.

Ella tomó una profunda respiración.

—¿Qué haces aquí Dylan?

Dylan miró a Jackson colocarse a un lado de Katheryn y tomando su cintura atrayendola a él. Volvió a mirar a Katheryn y se aclaró la garganta.

—Quise sorprenderte. Entré al programa de intercambio escolar y me tocó ir a una escuela cerca de aquí. Estuve investigando y no es la misma en la que asistes pero estamos más cerca.

Katheryn suavizó su mirada, no sabía qué decir. La noticia realmente cumplió su propósito de sorprenderla y la dejó sin habla. El agarre de Jackson en su cintura se volvió más firme, entonces ella salió de su trance.

—Dylan, él es Jackson —dijo ella tomando la mano de Jackson y presionándola con fuerza—, mi n-

—Soy su novio —se apresuró a interrumpir el castaño con una sonrisa.

—Ahm... Es un gusto, mi pequeña me ha hablado mucho de tí —le dijo Dylan—. Soy amigo de Katy.

—¿Oh en serio? —inquirió el castaño fingiendo sorpresa—. Ella no me ha dicho nada sobre ti.

—Jackson —murmuró Katheryn, sabiendo que eso no era cierto.

—Bueno, tal vez un poco —cedió él—. Pero lo olvidé —miró a Katheryn y le sonrió— ¿Nos vamos, cariño?

—Ah, tienen planes ¿cierto? —dijo el pelinegro.

—Sí, tenemos una cita —le presumió Jackson—, de novios, sólo ella y yo.

—Entonces los dejo. Que se diviertan —dijo Dylan con una sonrisa—. Yo iré a algún lugar, no sé, conocer por aquí porque nunca había estado solo en una ciudad desconocida.

—Ve por la sombra, amigo —le dijo Jackson.

Katheryn meditó en las palabras de Dylan, le dió tristeza tener que pensar que estaría sólo en un lugar completamente desconocido. Ella no podía dejarlo así, era su amigo.

_Si quieres, puedes venir con nosotros —le dijo Katheryn.

Jackson frunció el ceño y la miró. ¿Por qué lo invitaba?

—¿Lo dices en serio? —preguntó Dylan con brillo en los ojos, que enseguida se borró— Pero es su cita.

—Kate —murmuró Jackson.

—Ven con nosotros, será divertido —insistió ella.

Jackson rogó en su interior que Dylan se negara y se largara de una vez para poder estar con Katheryn a solas pero eso nunca pasó.