Capítulo Treinta y Cuatro

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En el descanso Irene acompañó a Jackson a la cafetería, donde estarían sus amigos y Katheryn.

Jackson le había dicho a Irene que le tomaría unos días pensar en lo que le diría a Katheryn, no quería que todo terminara mal y que las palabras que usara fueran las correctas. Irene le insistió con que hablara cuanto antes con Katheryn para poder terminar de una vez y no seguir atormentandose, pero él dijo que necesitaba tiempo.

En la mesa estaban Youngjae, Yugyeom y Katheryn hablando sobre alguna cosa graciosa, todos reían y se veían contentos.

Cuando ambos se sentaron en la mesa el ambiente se tornó un poco pesado, el resto trató de ignorar ese detalle y continuar con su conversación pero era inevitable notar el silencio de Jackson.

—¿Te sientes mejor? —le preguntó Katheryn tomando su mano.

Él la apartó con cuidado y asintió, no queriendo decir algo al respecto.

—Oigan chicos —dijo Irene—. ¿No notan un extraño olor?

—Mmm no ¿A qué huele? —le preguntó Youngjae con curiosidad.

—No sé ustedes pero siento el inconfundible olor a cortada —explicó ella.

—¿A cortada? —inquirió extrañado Yugyeom. Ella asintió— ¿Cómo puedes llegar a percibir ese olor?

—No le hagan caso —intervino Jackson.

—Bien, entonces Katheryn ¿Vendrás al primer partido del torneo? —dijo Yugyeom cambiando de tema.

La castaña asintió con entusiasmo.

—Por supuesto, no me perdería la oportunidad de verlos jugar.

—Claro, los chicos son muy buenos —dijo Irene—. ¿Qué es lo que más te gusta del baloncesto?

—Bueno, no sé mucho del deporte pero puedo aprender —respondió Katheryn.

—Sí, bueno —dijo Youngjae—. Katy, tendrás que llegar temprano a cada partido si quieres tener un buen lugar. Yo te recomiendo en primera fila, se tiene una buena vista desde ahí.

—Youngjae —interrumpió Irene— ¿Terminaste ya tu jugo?

La sonrisa en su rostro hizo sobresaltar a Jackson. ¿Por qué ella se ponía a decir eso en frente de Katheryn? ¿Le estaría anticipando que terminaría con ella?

—No, y no te pienso dar —respondió Youngjae—. Es mi favorito de frutos rojos.

—Ey, tranquilo. Sólo era curiosidad —se defendió ella—. ¿Y tú, Yugyeom? ¿Terminaste el trabajo con el que me pediste ayuda?

—Oh sí, por cierto gracias por ayudarme —exclamó el menor—. Tuve la mejor nota de la clase.

—Me alegro —respondió ella con una sonrisa—. Yo tengo un asunto que tengo que terminar, pero me es muy difícil. No sé cómo terminarlo.

Jackson endureció la mirada y le dió una patada por debajo de la mesa. Ella se quejó pero al instante le dió una mirada llena de burla. Katheryn ajena a la situación se puso a pensar y la conclusión a la que llegó le revolvió el estómago.

Jackson no terminaría con ella ¿o sí? Eso era imposible, seguramente era producto de su imaginación creer que Irene le daba indirectas muy directas.

La idea de que Jackson terminara con ella le aterraba, no quería que eso sucediera. Simplemente no podía ser así.

—¿Podemos hablar? —le dijo Jackson llamando su atención.

Things Of Love |Jackson Wang|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora