La dominación de los Lords

Parte 3

El movimiento por parte del Lord de los Hi-Dragón fue sumamente arriesgado.

Desgarrar las leyes del espacio e invadir el mundo de los druidas le había costado una gran cantidad de energía.

Esto se debe a que romper el límite que los separaba mientras hacía frente a la resistencia del mundo no era nada sencillo, incluso para un Lord.

Al haber hecho esto, su mundo quedo más vulnerable sin su presencia. Incluso su fuerza se vio reducida en una pequeña medida.

Esto podría interpretarse como una oportunidad para los otros Lords el invadir su mundo.

Pero si hicieran tal cosa, el costo que deberían pagar superaría en gran marguen al que pago el Lord de los Hi-Dragón.

Esto se debe a que el mundo de los druidas no poseía un Lord en pleno derecho para asumirlo, por lo que su estado era mucho mas débil que aquellos que si tenían uno.

Incluso si alguno se atreviera a esto, el Lord de los Hi-Dragón estaba más que seguro de poder completar su objetivo de hacerse con el lugar del Lord de los druidas, para luego retornar a su mundo y defenderlo.

De esta forma entraría en una etapa donde solo se defendería, una vez su asimilación con el mundo se complete, el resto era solo eliminar a los demás Lords.

Aunque parece sencillo, realizar dicha tarea no lo fue para nada.

Su objetivo era aprovechar el descuido de los otros Lords. Quienes hasta el momento solo se limitaron a esperar que la brecha entre sus mundos se acortara para luego invadir en su totalidad.

Esto les ahorraría el exceso costo de energía, por lo que podrían luchar en su estado máximo.

Ya que en una batalla de sus niveles, cualquier descuido o debilidad supondría la victoria.

Aunque la idea del Lord de los Hi-Dragón podría parecer simple, o incluso tonta. No es que los otros no lo hayan pensado.

Solo que el riesgo era muy grande.

La decisión de enviar fuerzas menores para impedir el apoderamiento fue algo acordado por todos de forma táctica.

Aunque otros tenían ideas y planes distintos, el invadir apresuradamente solo les traería desventajas.

Ninguno de los 7 Lords invasores pensó que el octavo sería tan atrevido y simplemente no le importara la situación en general, arriesgándose enormemente en su apuesta por esta invasión con su cuerpo principal.

Los otros Lords no se limitaron a no hacer nada, cada uno de ellos tenía sus propias maneras de ver que es lo que ocurría en el mundo de los druidas.

Como también se mantenían vigilados entre ellos para evitar cualquier suceso inesperado que hubiera podido cambiar el panorama general de esta guerra.

Al haber ignorado la situación táctica e invadido. El lord de los Hi-dragón creo un enorme revuelto.

Los súbditos por si mismos no podían impedir el avance de un Lord a menos que la totalidad de un mundo se abalanzara contra él.

Y menos aún el reducido número en el mundo de los druidas.

Dicha acción conllevo a una reacción en cadena.

La cual ninguno había deseado.

Debido al gran costo de energía, y que si abandonaran sus mundos para invadir al del Lord de los Hi-dragón, abriendo la posibilidad de que otros los invadieran. Los Lords restantes en sus mundos entraron en un pequeño conflicto interior.