Cuando salimos del centro comercial subimos a mi coche y lleve a Kayla a su casa, me dijo que me llamaría para contarme como le ha ido en su cita con el tal Chase. Salí de regreso a casa pero aun en el centro de la ciudad vi algo que llamo mi atención, era Ryan hablando animadamente con la rubia que Kayla me presento en la cafeteria y a la que vi en el centro comercia, me pareció muy extraño pero decidi ignorarlos y retomar mi camino, ellos no se percataron de mi auto ya que Ryan no sabe que tengo uno. Llego a casa despues de unos 10 minutos, estacione en auto en el garaje y luego entre a casa, pongo las bolsas de la tienda en la cama y entro en el baño, quiero tomarme una buena ducha. Al salir del baño busco algo cómodo para ponerme pero una llamada me hace dejar lo que hacia y contestar, era mi padre por lo que no dude en contestarle. Deslice la pantalla y puse el móvil en mi oreja.
-Hola papá, que...- me corto rapidamente hablando el
-Cariño, ven rapido que tenemos una carga importante que enviar.-dice rapido
-Ok, llego en 30'.-digo poniendome ropa mas adecuada para la situación. Escojo un jean azul, una camiseta negra y mis airmax, y salgo al garaje, me pongo el casco cojo la moto y salgo pitando de ahí. Llego mas rápido de lo que había dicho y busco con la mirada a mi padre. Lo encuentro y voy junto a él.
-Aquí estoy señor Oxford.-en estos momentos le llamo por nuestro apellido ya que están los demás con el y casi la mayoría no sabe que soy su hija. Mi padre se llama Anthony, Anthony Oxford, es un señor de 42 años, de ojos azules, identico a los mios,alto, piel blanca a diferencia del mio, pelo ahora con un poco de canas y muy serio cuando se trata de trabajo, en lo personal es muy simpático.
-Muy bien, la estábamos esperando.-dice serio.-Muy bien, presten atención. Esta es un envió muy importante así que van a ir con el jet privado, los pilotos tienen con todas las ordenes que yo les di, el jet es imposible de localizar. No digo mas así que suban y al llegar a México bajen el cargamento y vuelvan pronto.-dice, me mira y articula un "-te quiero, cuídate" con los labio sin que nadie se de cuenta, yo solo asiento con la cabeza.
Luego de un largo vuelo nos encontramos en México en un lugar donde nadie vendría ya que es un bosque, muy bonito y todo pero es un lugar donde siempre traemos cargamentos y nunca los encuentran. Al terminar de bajar toda la droga volvemos a casa sanos y a salvo.
-Muy bien, ahora podéis retiraros.-dice mi padre cuando damos la noticia de que todo ha salido bien.
-Pss, hija aquí esta tu parte.-dice mi padre entregándome un maletín con el dinero que me toca. Lo pongo en mi bolso y lo cuelgo por mi hombro.
-Gracias, no vemos pa.-digo ya casi todos se han ido.
-Cariño, no nos hemos visto mucho, quiero que vengas hoy a cenar conmigo y tus hermanos a casa.-dice con una sonrisa melancolica
-Claro pa, con gusto a las 8:00pm estoy ahi.-le digo entusiasmada. El sonrie y asiente
-No vemos entonces, cuidate mucho hija.-dice basando mi frente y se despide. Subo a mi moto y voy a casa. Entro y saco el dinero del maletin, es mucho dinero así que guardo la mitad en el escondite secreto que tengo en una pared de mi casa y la otra mitad ahora mismo voy a depositarlo al banco para que yo lo pueda gastar tranquilamente desde mi tarjeta de crédito, así no tengo que estar llevando un montón de billetes conmigo solo la tarjeta en mi billetera.
Casi es la hora de la cena en casa de mi padre así que voy directo a la casa, aparco la moto, le pongo el seguro y llevo el casco en mi mano, toco el timbre y se abre la puerta, no veo a nadie alli, pero mi hermanito me jala de mi cazadora de cuero y miro para abajo.
-Oye ya soy un hombre grande, como no me vas a ver?.-dice mi hermanito desde abajo entrecerrando los ojos.
-Jaja claro mi amor, es que no te vi.-le digo poniendome a su altura, el ya tiene diez años y no es muy pequeño que digamos pero es que pensé que mi padre abriría la puerta.
-Pasa hermanita, papa esta en la cocina.-dice mi hermanita Saribel atrás de Saúl.
-Holaaaaa! Pero como han crecido los dos.-me adentro a la casa y jalo a mis dos hermanitos y les doy un fuerte abrazo. Mi hermanito se hace el enojado por lo de hace ratito y yo le hago muchas cosquillas para que se le quite lo enojado.
-Ok para, para, te perdono.-dice arqueándose de risa.
-Mas te vale peque.-digo molestándole.
-Aysh no cambias.-dice, yo alzo las cejas extrañada, quien le enseño eso?
-Jajaja, mi hijo ya es todo un hombre dejalo en paz.-habla mi padre desde la cocina. Voy allí y me encuentro a mi padre con un delantal de cocina puesto que dice "el mejor papa del mundo" que se lo regale yo. Me hace gracias y al mismo tiempo ternura al verselo puesto.
-Te queda bien.-digo apuntando al delantal.
-Ohh gracias.-dice poniendo una mano en su pecho en modo de alagado.
-Jaja,y que hay de cenar, muero de hambre.-digo sobandome el estomago.
-Estoy cocinando unas deliciosas albóndigas con pastas.
-Ohh siii, se me cae la baba de solo pensar en que lo voy a comer.-digo abriendo la boca y haciendo como Homero Simpson cuando se imagina una rosquilla.
-Jajaja, no cambias eh!.-otro que dice esa palabra, ya van tres este día.
-Y que me cuentas papi.
-Pues no se. La empresa esta yendo bastante bien, en el "negocio" fenomenal y en casa de maravilla, solo hay un pequeño detalle.-dice, me preocupa y le pregunto.
-Que detalle?
-Pues Vanessa esta aquí en Washington.-me quedo estática al oír el nombre de la perra de mi madre salir de la boca de mi padre, ella ha dejado de ser una madre para mi desde el día que se marcho.
-Tranquila hija, ella no se va a volver a acercar a ninguno de ninguno de nosotros, he puesto una orden de alejamiento en su contra asi que no te preocupes.
-Pero se ha acercado a los niños.-le pregunto muy alterada.
-No, claro que no, de eso ni hablar, ella va a volver a Brasil, con su marido, no nos va a molestar mas, le deje muy en claro las cosas y le dije lo que le ocurriría a ella y a su esposo si volvía.-dijo tranquilo
-Pero que queria?.-esa señora no volvería a acercase a nosotros eso dependía de mi, me jure a mi misma que no le haría daño a los mios y si lo hacia, de ello me encargaría yo de tomar represalias contra ella.
-Quería volver a estar conmigo la muy... bueno dijo que se arrepentía y que quería volver a estar con la familia, obvio que la rechace, yo se a lo que venia y no lo iba a permitir, ella es una mujer muy interesada.
-Papá, por favor, te lo ruego, no la vuelvas a aceptar en sus vidas, yo no lo haría nunca, pero ella tiene sus modos de manipular.-le rogue a mi padre.
-Claro que no cariño, ustedes son lo mas importante para mi, jamas permitiría que a los niños los volviera a hacer daño.-dijo, papá es un hombre fuerte, el les dijo a mis hermanos que Vanessa había muerto, y eso es algo que agradecía ya que ellos no iban a sufrir porque la muy perra los abandono.
Nos mantuvimos abrazados un rato y luego la cena ya estaba lista. Cenamos y literalmente me senti de lo mejor en casa, este siempre fue mi hogar, y la comida de mi padre es de lo mas exquisito. Me despedí de ellos después de jugar con mis hermanos y hablar un rato mas con mi padre, todo iba bien en los negocios, así que no me preocupaba.
ESTÁS LEYENDO
Volver A Empezar
Teen FictionEmma Oxford con tan solo 9 años de edad presencio el asesinato de su hermano menor. Al pasar ocho años ella conoce a un chico, quien la engañaba para sacarle todo su dinero y ella al enterarse se fue de la ciudad. Gracias al engaño de ese hombre aho...