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47: Gran Día

Estoy muy nerviosa, peor, estoy alterada, nerviosa, ansiosa, todo junto, hoy es la boda y desde ayer no he visto a Kevin.

-Joder, niña, tranquila.-dice Kayla fastidiada.

-Estoy nerviosa.-juego con mis dedos.

-Hija, tu tranquila.-mi madre me sonríe, ella y Halsey están con unas botellas de un liquido de no se que, supuestamente te hace bajar de peso o algo así, están empeñadas en que tienen que verse bien, Agnes, Kayla y yo no pudimos tomarlo por el embarazo.

-Joder, y si le pasa algo a Kevin al llegar a la iglesia o si yo me tropiezo y caigo por las escaleras, o si al caminar hacia el altar caigo y se cancela la boda?.-dije mordiéndome las uñas.

-Caca nena.-Agnes me saca la mano de la boca haciéndome reír.

-Venga ya, ponte el vestido de una vez.-dice Halsey soltando un suspiro, por los nervios ni siquiera me había puesto el vestido.

Le hago caso y me coloco el vestido encima de una lencería blanca que había comprado para la noche con Kevin, nos íbamos a Cancún por la noche de bodas, mis padres me dieron la idea y van a cuidarar de mi hijo pero solo por tres días.

Al estar lista totalmente, con un maquillaje natural, un peinado y el vestido dejando ver mis tatuajes yo ya estaba lista, me mire en el espejo y casi lloro pero no lo hice, me veía como una novia.

-Estas hermosa!.-dijeron las cuatro al unisono.

-Bien, vamos.-salimos de la casa y le di las llaves del coche a Halsey.

Al llegar frente la iglesia me ayudan a bajar del coche y me paro en la entrada con mi padre.

Las puertas se abren y al caminar la canción nupcial hace eco en el lugar.

Kevin

Al abrirse las puertas de la iglesia la canción nupcial hace eco.

Todos los presentes se levantan de su asiento, volteo y puedo ver a Emma y a mi suegro caminado hacia acá, ella se ve hermosa, todo en ella es perfecto, es perfecta para mi. Cuando llegan mi suegro me entrega la mano de mi Emma.

El padre inicia con la ceremonia, la atención se centra en cada una de las palabras del padre hasta que llega el momento cumbre de la ceremonia.

-¿Han venido aquí a contraer matrimonio por su propia y plena voluntad sin que nada ni nadie los presione?.-pregunta el padre.

-Sí padre.-Emma y yo contestamos a la vez.

-Ya que quieren establecer entre ustedes la santa alianza del matrimonio, unan sus manos y expresen sus sentimientos delante de Dios y de su iglesia.

-Yo, Kevin Freeman te pido a ti Emma Oxford que seas mi esposa porque te amo, prometo serte fiel no importa las circunstancias, estaré a tu lado en la riqueza y en la pobreza, en la salud y en la enfermedad, prometo amarte y respetarte todos los días de mi vida hasta que la muerte nos separe.

-Yo, Emma Oxford te pido a ti Kevin Freeman que seas mi esposo porque te amo, prometo serte fiel no importa las circunstancias, estaré a tu lado en la riqueza y en la pobreza, en la salud y en la enfermedad, prometo amarte y respetarte todos los días de mi vida hasta que la muerte nos separe.

-Que el Señor confirme esta unión que han manifestado ante la iglesia y cumpla en ustedes su bendición. Lo que Dios acaba de unir no lo separe el hombre.
Puede besar a la novia.

Unimos nuestro casamiento en un beso, un beso lleno de amor, la amo tanto que asusta.

Al salir de la capilla nos lanzan arroz mientras caminábamos fuera. Llegamos frente del auto y mi hermosa esposa dice.