Desperté con un dolor de cabeza, miro a mi alrededor y veo una habitación blanca, esta no es mi cama y menos mi habitación, tengo puesta mi ropa que tenia anoche en el bar, miro a mi derecha y veo a Kayla dormida tomando mi mano. Escucho la puerta ser abierta y entran Connor y Chase con unos tarros que creo son de café, me miran y sonríen, les devuelvo el gesto.
-Que paso.-pregunto
-Ahmm, ayer estábamos en el bar, te buscamos por todas partes pero no te encontramos, Kayla estaba desesperada, te llamo muchas veces pero no cogias el teléfono, después de varios intentos le llego un mensaje a Kayla que decía que estabas aquí. Ella no ha querido dejarte sola anoche.-dijo Chase apuntando a mi amiga terminado de contar la historia.
-Oh vaya.-respondo, me inclino hacia Kayla y le beso la frente, ella se remueve y luego abre los ojos, me mira y se abalanza sobre mi llorando.
-Oh, cariño me preocupe mucho anoche, creí que te había pasado algo.-dice llorando, yo le toco el cabellos con suavidad.
-Ya paso, estoy bien cariño.-le digo, me separo de ella y seco sus lágrimas con mi dedo. En eso entra un doctor sonriente.
-Buenos días, veo que ya desperto.-dice amable.
-Si, gracias, emmh que ha pasado anoche.-le pregunto
-Oh, un chico la trajo preocupado, usted estaba inconsciente, le hicimos una prueba de sangre y ha dado positivo.-le miro sin entender, uno, porque no recuerdo a ningún chico, y segundo, que ha dado positivo?
-Que quiere decir?
-Felicidades, usted esta embarazada de cuatro semanas.-dice sonriendo, en ese momento todo se congela, mi pulso se acelera, esto no puede estar pasando.
-Esta bien?.-pregunta el doctor, asiento. Esto es difícil de digerir
-Me dejan a solas con el doctor por favor.-les pido a mis amigos
-Si.-dicen al unisono, salen de la habitación y miro al doctor, el me mira extrañado.
-Doctor, yo he sufrido un aborto espontáneo hace dos meses y medio, me preocupa que eso pueda volver a ocurrir, por eso es que quiero que me de indicaciones de como cuidarme y cuidar de mi hijo.
-Oh, lo siento mucho. Bueno lo primero que debe hacer es consultar con su ginecólogo desde ahora en adelante cada 30 días, el ginecólogo le dará las indicaciones que usted necesita.-dice sonriendome.-La llevo con ella ahora mismo si quiere, hay una aquí mismo, es muy buena.
-Oh, gracias.-le acompaño y me dirijo al consultorio de la señora. Entro al consultorio y la ginecóloga me dice que tengo cuatro semanas, me da instrucciones de como cuidarme, como por ejemplo, evitar andar en moto, evitar los nervios, el estrés, no hacer esfuerzos innecesarios, y me ha dado unas vitaminas. Después de todo salgo del hospital con los chicos, le pido a Kayla las llaves de mi coche y buscamos en donde lo había dejado, lo encuentro y me subo, nos dirigimos a mi casa, estaciono el coche en el garaje y entro a la casa, subo a mi habitación y entro al baño, me cepillo los dientes, hago mis cosas y entro a la ducha, me relajo y luego salgo, me visto con mi chándal y una remera negra y mis pantuflas, bajo a la cocina y allí se encuentran Connor y Chase cocinando. Supongo que Kayla se ha ido a duchar.
-Ey, que preparan?.-pregunto sentándome en una silla.
-Pastas con albóndigas.-dice Connor, inevitablemente mi estómago ruge.
-Veo que tienes hambre.-rie Chase.
-Ni te lo imaginas.
Después de un rato Kayla baja las escaleras, me mira y me sonríe, me hace un ademán para que la siga hasta la sala, la sigo y nos sentamos, ella me mira sin hablar, después de un rato habla.
-Y... Que vas a hacer?.-me extraña su pregunta, es obvio lo que voy a hacer.
-Pues claro que tendré a mi bebé Kayla, de eso no hay dudas.-le miro seria, ella sonríe.
-Sabes que no me refiero a eso, es obvio que lo vas a tener, y si pensabas hacer otra cosa yo misma te tiraba por un puente.-me señala con el dedo indice.-Me refiero a que si se lo vas a contar a Ryan o lo vas a tener sola, si lo vas a hacer sola tienes todo mi apoyo, y claro que de Connor y Chase también.
-Se los agradezco, y no pienso decirle nada a Ryan, en un principio el no lo quería, dijo que solo iba a ser un estorbo.-inevitablemente una lágrima cae por mi mejilla, pero lo limpio rápidamente.
-Cariño, te apoyo en eso, sabes que te adoramos.
-Gracias, enserio no se que haría sin vosotros.
-No tienes nada que agradecer, se bien como es estar si mi.-dice con pose de diva, me rio.-Aun que no, no se que es vivir sin mi pero me lo imagino.-pone cara de susto.
-Jajaja.-suelto una carcajada por sus ocurrencias.-Oye y tu no sabes quien fue el chico que me llevo al hospital ayer?.-le pregunto a Kayla, se ma hace muy raro, aun que pensándolo bien recuerdo que antes de desmayarme vi un rostro conocido pero no recuerdo de donde.
-La verdad que ni pinche idea cabrón, no sabría decirte.-dice ella.
-Ok, pero se lo agradezco inmensamente, si no fuese por ese hombre yo no iba a estar aquí ahora.-le dije sonriendo.
-No pensemos en eso, cariño, ahora estas a salvo.
-Si, tienes razón.
-La comida esta lista!.-escucho decir a Chase desde la cocina, me levanto como una rayo del sofá, pero me arrepiento porque me mareo un poco, me recupero y voy hasta la cocina.
-Oh, ya estaba muriéndome de hambre.-exageré un poco.
-Vamos, a comer se ha dicho.-dice Connor levantando un tenedor. Me río y después como todo lo del plato, inevitablemente me sirvo mas comida, esta delicioso. Me levanto de la mesa y lavo las vajillas que usé, lo seco y los guardo en la estantería, los chicos terminan de comer y hacen lo mismo, nos vamos a la sala y nos sentamos en el sofá, miramos películas y alguna que otra caricatura, estábamos mirando la serie animada Gravity Falls cuando miro por mi ventana y veo que ya se hace de tarde, me despido de los chicos y voy a mi habitación, tengo que hablar con mi padre, me acuesto en mi cama y marco el numero en mi móvil, al segundo pitito contesta.
-Hola hija! Como estas?.-pregunta felizmente
-Hola papá, yo muy bien y ustedes?.
-Muy bien, cariño, ah y te tengo que decir que ayer Ryan vino a verme.-en ese momento me tense.
-Que te ha dicho.-pregunto preocupada
-Me ha dicho que después de recibir tu mensaje trato de localizarte por todas partes, te llamo, te envió mensajes pero nada, y que por eso venia a verme, le dije lo que me dijiste que le dijera y quedó pálido, casi me reí en su cara, dijo que si tenia otra información que le avice, jaja, no tiene idea.-dice, expulso todo el aire que estuve reteniendo, ahora es mi turno
-Papá, que haces?.
-Ammh estoy mirando una serie que no se de que mierda se trata, por que?
-Papá, estoy en una situación delicada por lo que ahora mas que nunca necesito tu apoyo.
-Hija, que pasa? Me estas asustando.
-Papá, es que... ammh... Estoy embarazada de cuatro semanas.-cierro los ojos esperando su reacción, pero no escucho nada.-Papá, sigues ahí.
-Ahora mismo voy a castrar a ese Ryan. Como se atreve.
-Papá, papá, por favor no hagas una tontería, yo quiero criar a mi hijo sola, no quiero a Ryan en nuestras vidas, por favor.-digo con vos temblorosa.
-Esta bien hija, cuenta con mi apoyo.-dice suspirando
-Gracias pa, te Amo.
-Y yo a ti hija.
-Ok, me voy a dormir, descansa, cuidense los amo.
-Ok cariño, también te amamos, y cuidense mucho, los dos.
-Claro, besos.-cuelgo la llamada e inmediatamente me quedo profundamente dormida
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Volver A Empezar
Teen FictionEmma Oxford con tan solo 9 años de edad presencio el asesinato de su hermano menor. Al pasar ocho años ella conoce a un chico, quien la engañaba para sacarle todo su dinero y ella al enterarse se fue de la ciudad. Gracias al engaño de ese hombre aho...