Capítulo 20: Miedo al amor.

1.7K 103 31
                                    

- ¿Y si lo intentamos?

- ¿El que?- le dije cerrando los ojos.

- Darle una oportunidad al amor.

Mi corazón palpitaba fuerte y rápido, empecé a sentir calor… Dios mío, no me esperaba esto.

Me levanté mientras masajeaba mi cabeza- Clau… - dije nerviosa, tenía que ser sincera con él- no puedo, lo siento.

Y me metí de nuevo al cuarto, me acosté al lado de Martina y cerré los ojos.

Sentí como él cerró la puerta, sin decir nada, y volví a abrir los ojos, soltando un largo suspiro.

No es cosa mía, tengo que pensar en Martina, yo no quiero que si estoy con Claudio ella le vea como una imagen paterna y luego se vaya.

Tenía que pensar en su bien, aunque a mí me mate la idea de no estar con él.

Además el tema del papá de Martina me dejó muy mal, y no quería pasarlo mal, aunque con Claudio todo era distinto… Pero no, no podía poner en peligro a mi hija, porque ella era más importante.

Abrí los ojos mientra sentía que Martina jugaba con mi pelo, la miré y me dio una tierna sonrisa.

Me había quedado dormida mientras pensaba en Claudio y lo que me dijo anoche.

-¿Tienes hambre princesa?- dije mientras cargaba a Martina que me movió la cabeza en señal de sí.

Salí del cuarto y bajé a la cocina.

-¿Cómo durmió la más linda de todas?- dijo Ulises acercándose a nosotras- y me refiero a Martina eh.

Yo sólo me limité a soltar una carcajada y le di a Ulises a Martina.

Ella empezó a jugar con su pelo y él empezó a hacerla cosquillas.

-¿Qué haces con mi princesa?- dijo León mientras le quitaba de la manos a Ulises a Martina- es mía.

Me limité a mirarlos como peleaban por Martina, mientras ella reía porque no entendía nada.

-Kevin pregunta por ti- dijo Claudio entrando por la puerta.

Su voz se notaba molesta y su cara era de sueño, y de ira, porque no siquiera me miró.

No miró a ninguno, abrió el refrigerador y sacó un cartón de jugo de naranja.

Asentí y me fui a donde estaba Kevin, entre sin hacer ruido y lo encontré sentado en la cama.

-Kevin, casi me da algo al corazón- dije sentandome a su lado- ¿como te sientes?

- Me da vueltas la cabeza, pero bien- dijo dándome la mano- gracias por preocuparte.

- Kevin me moría si te llegaba a pasar algo, ni se te ocurra volver a hacerlo- dije sincera y seria.

- Está bien, pero todo este tema me tiene mal Emi- dijo acostándose- el tema de mi abuela no es fácil, no es fácil ir y que no sepa quién es su nieto… Y tú Emi, no es fácil ser tu amigo mientras veo que no tengo ninguna oportunidad contigo.

- Kevin, es que yo no quiero hacerte daño, mira lo pasé muy mal… Y te estoy siendo sincera, porque no quiero que te pase algo- le dije mientras me levantaba de la cama- será mejor que me vaya, tengo cosas que hacer.

Kevin no dijo nada, era mi amigo y lo quería, pero no podía seguir a su lado, porque pensaría que le estoy dando chance de que me enamore y no, porque estaba sintiendo cosa por el argentino.

Bajé la escaleras y oí muchas risas, una de ellas era las de Martina.

Me quedé apoyada en el marco de la puerta, y mi corazón volvió a latir fuerte y rápido, Claudio estaba haciendo el avioncito con Martina mientras ella reía y Ulises y León intentaban cogerla haciéndole cosquillas.

¿𝗖ó𝗺𝗼 𝘀𝗲 𝗲𝘀𝗰𝗿𝗶𝗯𝗲 "𝗮𝗺𝗼𝗿"?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora