Al salir ya no había nadie, genial, no quería que nadie me viera así, con los ojos rojos de llorar. Caminé hasta el jardín y me senté alejada de todo y de todos, y me llevé las manos a la cara, y empecé a llorar.
- ¿Todo bien?- sabía de quién era esa voz, sentí como se sentó a mi lado y me abrazó.
- Gracias Kevin- dije después de unos minutos abrazada a él.
- No te preocupes, pero te pusiste como una loca Emi, ¿qué te dijo?- me dijo mientras con su mano limpiaba un poco de mi maquillaje corrido.
- Me llamó zorra, me dijo que estaba contigo, con Ulises y León y con Manu, y estaba tensa por lo de Claudio- dije apenada.
- Haber, Kathy es odiosa, y no eres ninguna zorra Emi, eres un amor de chica con unos mejores amigos maravillosos- yo asentí feliz, es verdad, Ulises y León eran los mejores- y sobre lo de Claudio... Es idiota, es todo.
- Idiota tú salame- y ahí estaba de nuevo, el chico argentino de siempre, yo giré los ojos y me recosté de nuevo en el pecho de Kevin, cerré los ojos, no quería discutir con nadie, quería y necesitaba paz.
- ¿No te cansas de joder Claudio? ¿Qué pasó ahora?- dijo Kevin, mientras tocaba mi hombro masajeándolo.
- Quiero hablar con Emilia, ¿puedo?- yo seguía con los ojos cerrados.
- Ahora no Claudio, déjala tranquila, no te cansas de molestar- dijo enfadado Kevin.
- Mira salame...
- Ya cállate sí- dije enfadada, abrí los ojos y me separé de Kevin- si vienes a gritarme o a pelear mejor no, no me siento bien- dije cansada.
Ambos me miraron y yo sólo bajé la mirada.
- Por favor, quiero hablar contigo Emilia- dijo en tono suave, yo levanté la cabeza y le miré, se le veía avergonzado.
- Está bien, ve a la sala de lectura Kevin, en un rato voy- él me miro, me dio un corto beso en la frente y se fue, mientras miraba mal a Claudio.
Me recosté sobre el árbol que daba sombra, abroché mi sudadera y le miré- ¿y bien?- dije relajada.
Él se sentó en frente mío, mientras jugaba con el césped del suelo, le costaba hablar.
Cerré los ojos, mientras masajeaba mi cabeza con mis dedos, me sentía realmente cansada.
- Lo siento- oí su voz baja, como con pena.
- ¿Perdón?- dije para comprobar si era verdad lo que oí.
- Lo siento por gritarte Emi- me dijo mientras acariciaba mi rodilla.
Abrí los ojos, mi cuerpo se tensó, quité su mano de mi rodilla, él me miró, me levanté, dispuesta a irme- disculpas aceptadas, y soy Emilia- y me fui, tensa, pero bastante enojada.
Me senté al lado de Ulises, que también estaba en la sala de lectura.
- ¿Cómo sigues? Te estuvimos buscando- me dijo Ulises mientras cerraba el libro que sostenía sobre sus manos.
- Bien, necesitaba tomar algo de aire- miré a Kevin, él me dedicó una tierna sonrisa y moví la mano para decirle que me esperase un rato que ahora iba.
- Dios mío Emi, pensé que la pequeña demonio te había matado- dijo riendo, yo le miré mal y él se sentó en el suelo- lo siento- dijo mientras me daba la mano.
- Tranquilo mi lion- y acaricié su mano- estoy muy cansada, creo que iré a echarme una siesta.
- ¿Cómo que una siesta señorita Ruíz? Tenemos clase- dijo Humberto- toca tutoría- dijo mirando a todos- ¡a sus clases!
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¿𝗖ó𝗺𝗼 𝘀𝗲 𝗲𝘀𝗰𝗿𝗶𝗯𝗲 "𝗮𝗺𝗼𝗿"?
Fiksi Penggemar𝘓𝘢 𝘷𝘪𝘥𝘢 𝘢 𝘷𝘦𝘤𝘦𝘴 𝘥𝘢 𝘶𝘯 𝘨𝘪𝘳𝘰 𝘥𝘦 180°. 𝘠 𝘭𝘢 𝘵𝘦𝘰𝘳í𝘢 𝘥𝘦 𝘭𝘰𝘴 𝘱𝘰𝘭𝘰𝘴 𝘰𝘱𝘶𝘦𝘴𝘵𝘰𝘴 𝘴𝘦 𝘢𝘵𝘳𝘢𝘦𝘯, 𝘦𝘴 𝘵𝘰𝘵𝘢𝘭𝘮𝘦𝘯𝘵𝘦 𝘤𝘪𝘦𝘳𝘵𝘢. 𝘖 𝘴𝘪 𝘯𝘰, 𝘱𝘳𝘦𝘨𝘶𝘯𝘵𝘦𝘯 𝘢 𝘊𝘭𝘢𝘶𝘥𝘪𝘰 𝘔𝘦𝘺𝘦𝘳 𝘺 𝘌𝘮𝘪�...