capíтυlo 26: ғιn de la dιverѕιón.
Antes de irse, Keith rápidamente se la colocó su mascara, después regresó con Lance. Todo el camino de ida al pueblo pasó volando, apenas llegaron al pueblo, fueron recibidos por Acxa. Lotor fue a abrazarla.
–Hola chicos –finalmente pudo saludarlos–, tú debes ser Lance, mucho gusto –extendió su mano.
–El gusto es mío –Lance algo avergonzado —por haber pensado mal de ella antes—, aceptó su saludo y mostró una sincera sonrisa.
Lotor rápidamente apartó ambas manos y tomó la de Acxa con recelo.
–Espero que Lotor no les haya causado muchos problemas.
–No, para nada –mintió Lance–, fue muy agradable convivir con él.
–No solo eres un secuestrador, también un mentiroso –Lotor se escondió detrás de Acxa, sin quitarle la mirada de encima.
–Acabo de hablar bien de ti...
–No importa, me caes mal, solo tienes suerte de que Keith sea tonto y le gustes –le sacó la lengua.
–¡Tú eres el tonto! –gritó Keith indignado.
–¡Tú lo eres!
Keith se acercó a Lotor y le empezó a jalar del cabello, haciéndolo lloriquear.
–Perdónalos, son así desde pequeños, parece que no han crecido nada.
–¿Qué?, yo sí he madurado –Keith respondió indignado.
–Ni que fueras fruta –Lotor hizo un puchero.
Keith empezó a jalar de su cabello más fuerte, haciendo que Acxa tenga que intervenir debido a que estaban siendo el centro de atención debido a los lloriqueos de Lotor, y al igual que hacía cuando eran niños, los sujetó de las orejas y los separó. Primero soltó a Keith y empezó a regañar a Lotor.
–Pide disculpas a Lance, Lotor –Acxa lo soltó.
–No –se cruzó de brazos.
–No te compraré chocolate...
Lotor suspiró rendido.
–Bien... Lo siento por mi mal comportamiento.
Acxa asintió orgullosa y lo soltó.
–Ese es el gran Lotor –el mencionado se cruzó de brazos avergonzado–, ahora Keith discúlpate.
–¿Qué, yo por qué?
–Porque al igual que Lotor, eres un inmaduro.
–Yo sí he madurado –exclamó molesto.
–Yi sí hi midiridi –Lotor bufo.
–Deja de ser tan estupi- –con su mano Lance cubrió su boca y negó con la cabeza.
Keith se cruzó de brazos molesto; Lotor lo imitó, se escondió tras de Acxa sin quitarle la mirada de encima y le sacó la lengua.
–Vamos ya, la dulcería está cerca –Acxa empezó a caminar.
Lotor inmediatamente la siguió, la tomó de la mano y empezó a relatarle como le había ido solo, Lance y Keith los siguieron.
–¿Ellos son...? –preguntó Lance en un susurro.
Keith no respondió, solo se encogió de hombros.
Unos minutos después llegaron a la tienda decorada con colores pastel atendida por hadas, había varios niños corriendo de lado a lado, jugando y gritando, mientras que los padres estaban sentados en las mesas hablando de cosas de adultos o lo que sea, Lotor casi sale corriendo a la sección de chocolate de no ser que iba de la mano con Acxa.
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¡No Soy Una Princesa! - Klance
HumorHace mucho tiempo atrás nació el príncipe heredero del reino de la familia real Kogane, un reino prospero y lleno de diversidad sin prejuicios Al príncipe no le agrada la idea de pasar su vida sentado en un trono, así que el príncipe de nombre Keith...