|regreѕo a caѕa|

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capíтυlo 32: nυevo rυмвo

Las huellas de las pesadas botas del príncipe quedaban marcadas en la tierra y fango del bosque, corría lo más rápido que podía mientras que el felino le daba indicaciones desde la copa de los árboles, no podían perder tiempo, lo que parecía ser una situación peligrosa estaba amenazando a sus amigos y familia.

Arrastraba la enorme hacha por el suelo, cortando pequeñas platas y arbustos a su paso, desde arriba Lance le dio la ultima indicación, "siete árboles a la izquierda" indicó y pocos segundos después gritó con temor "¡veo humo elevándose!", inmediatamente ambos aceleraron, giraron a la izquierda justo como Lance indicó y haciendo uso de su hacha, derribó un árbol que se encontraba frente a él y se detuvo a contemplar la situación, la escena era espantosa.

La cabaña donde tanto habían compartido juntos estaba envuelta en llamas, la madera se empezaba a desprender y volverse ceniza ante sus ojos, Lance bajó pocos segundos después y contempló la escena junto a él con horror.

Sin poder evitarlo lágrimas cayeron de los ojos del príncipe, aquella cabaña era donde sus padres se conocieron, una reliquia familiar envuelta en llamas, no solo eso, también el lugar donde compartió buenos y malos momentos, peleas y momentos agradables, todo eso lo pasaron juntos en aquel lugar, y ahora sentía que todos esos momentos se convertían en humo y ceniza.

Sintió mano la cálida mano de Lance entrelazarse con la suya, sostenía su mano con gentileza, pero logrando a su vez una firmeza que le decía que no estaba solo, volteó a verlo y su rostro también mostraba dolor, entiende lo que siente, Keith sonrió con cariño al verlo, pero de un momento a otro pasó a mostrar incertidumbre, habia caído en cuenta de algo, no están Acxa y Lotor.

En un rápido vistaso observó el alrededor, en el suelo se veían algunas huellas que parecían ser viejas, así que no tenía de que preocuparse, exceptuando el hecho de que posiblemente haya llegado tarde, con eso empezó a crear un montón de teorías, entre esas, se imaginaba que los que lo intentaron secuestrar en el pueblo, vinieron a cobrar venganza, eso le traía muy mucho temor.

Se escucharon unos sonidos saliendo de un lado de la cabaña, nunca imaginó que un quejido de Lotor fuera un canto de ángeles para sus oídos, ambos corrieron en dirección y vieron a Lotor peleando con su espalda contra algo que no lograban ver por su pequeño tamaño.

– ¿Lotor, qué estás...? –antes de poder terminar de hablar aquel pequeño ser con el que Lotor "peleaba", se reveló.

Un pequeño dragón bebé le jugueteaba y gruñía a Lotor, aquel pequeño ser alado tenía a Marmora la gallina sentada en su cabeza. El dragón se aburrió de la cobardía de Lotor y se alejó, inmediatamente fueron directamente hasta Lotor, este se encontraba descansando en el suelo, había tenido una lucha campal con una bestia, así que está agotado.

–¿Lotor, dónde está Acxa? –preguntó Keith apenas confirmó que el elfo se encontraba en buen estado.

–Se adentró al bosque a buscar señal, accidentalmente estropeé su aparto, y por eso no nos hemos podido contactar con el príncipe para decirle que su fortaleza se está quemando.

Lotor dio un breve resumen, pestañeo empezando a comprender que era lo que estaba pasando, y entró en pánico al ver quien estaba frene suyo.

–¡Principe!, esta vez no fui yo, fue esa bestia –señaló al bebé dragón–, salió de su cascarón y lo primero que hizo fue empezar a escupir fuego por todo el lugar, –buscó en su bolsa y sacó su corona–, esto es lo único que yo, el gran Lotor pudo rescatar, lo siento, soy una deshonra como caballero –agachó la cabeza ante Keith, implorando su perdon.

Por lo contrario Keith le dio unas palmaditas en la espalda y agradeció, algo que puso sentimental a Lotor, estaba apunto de llorar de la felicidad.

–También alcanzamos a rescatar el cofre de la tía Krolia, fue difícil, pesaba mucho, y mi capa resultó mal herida –mostró su capa de 'héroe' chamuscada–, pero los tesoros de la reina están a salvo.

Tanto Keith como Lance lo felicitaron por su valentía, Lotor no podía hacer más que sonreír y sentirse orgulloso de sí mismo.

El dragón regresó y vio a los recién llegados, fue corriendo hasta ellos y empezó a morder sus zapatos, a Lance se le oprimió el corazón al verlo y dejó a la gallina a un lado para poder cargar en sus brazos al dragón.

–Miralo, es un bebé –lo levantó en el aire y le dio pequeños mimos que hacían al dragón producir algo parecido a un ronroneo.

Keith curioso se acercó a analizar a la pequeña cría, este estaba haciendo sonidos parecidos a un ronroneo y sus ojos destellaban como estrellas, Keith pidió permiso y lo levantó en el aire.

–Se llamará pequeño Marmora o Marmora Jr –anunció a los presentes.

–Pensemos mejor otro nombre –Lance bajó al dragón y sonrió.

Keith no quería renunciar a la idea de Marmora Jr, pero terminó cediendo, pocos minutos después llegó Acxa con el cabello lleno de hojas y algo agotada, apenas vio a Keith jugando con pequeño dragon, fue corriendo hasta él para disculparse, Keith comprensivo supo que era un accidente así que no podía culpar a nadie, menos a un dragón bebé, quizás a sí mismo por aceptar aquel huevo, pero el pasado no se puede cambiar, así que debe seguir adelante.

–¿Hueles eso? es mi ardiente amor por ti –coqueteó el ladrón con el príncipe.

–Pero si la cabaña es la que se está quemando –dejó de forcejear la cerradura del cofre y pasó a mirarlo confundido.

Lance no pudo evitar reírse, Keith definitivamente no sabía que era un coqueteo, todos estaban sentados en círculo, sin saber que hacer, mientras que las llamas que consumieron la cabaña, se fueron apagando hasta reducirse a cero.

Acxa estaba durmiendo sobre Lotor, aplastándolo sobre el suelo, hace unos minutos había forcejeado para liberarse pero no lo logró, así que rendido también quedó dormido boca abajo. Lance acariciaba el lomo del dragón en su regazo, y no dejó de lanzar coqueteos y algunos piropos, disfrutaba de como su novio no entendía y lo amenazaba para que diera explicaciones.

Un sonido de campanillas provientes de Acxa despertaron a la chica, con pereza sacó su artefacto de comunicación y se lo puso al oido.

–¿Hola? –preguntó somnolienta, escuchó la voz del otro lado y abrió los ojos con sorpresa y despertó por completo.

La emoción de la chica llamó la atención de los presentes —menos la de Lotor, él seguía dormido—, ella empezó a responder con onomatopeyas y no dejaba de verse emocionada, tras un minuto colgó y volteó a ver a Keith con emoción.

–La tía Krolia regresó, dice que quiere verte.

Keith de la sorpresa soltó el cuchillo con el que forcejeaba la cerradura, abrió los ojos y sus ojos brillaron, definitivamente volverán al castillo.

conтιnυara...

N/A: muchos posiblemente no leyeron el anuncio que hice en mi perfil, resumiendo, estaré unos días (no diré cuantos) desaparecida, así que hoy publicaré en todos mis libros y desapareceré por un tiempo.

Nos leemos luego ^^

¡No Soy Una Princesa! - KlanceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora