Incluso Amándote. Puedo Enamorarme De Nuevo|JINMIN-JINKOOK

23

Toque la puerta con desesperación, a penas y Jin abrió me tire hacía sus brazos aferrándome a su cuerpo.
—Por favor, no te cases. Vámonos juntos, lejos de Jimin y de NamJoon.

—¿Acaso quieres que sea tu amante?— preguntó Jin tomándome de los hombros y me alejo— Yo no suelo recoger la sobra de los demás.

Me limpié las lágrimas de mis mejillas —¿Sobras?, ¿Por qué sigues rechazando me?. Acepta que aún me quieres y deja de mentir.

—Te lo dije una vez, odio que me engañen y tú te casaste con un hombre rico por qué yo no tenía nada, ahora lo tengo todo y no me interesas— golpee el pecho de Jin ante cada palabra —¿Por qué no aceptas tú que ya no eres ni serás parte de mi vida?.

—¡No te creo!— grite furioso y empujando mi cuerpo contra el suyo logré besarlo, fueron segundos pero volví a sentir de nuevo ese fuego en mi boca, ese sabor inolvidable.

Jin me empujó cerrando la puerta en mi cara, aunque toque una y otra vez, él nunca volvió a abrir. Me niego a aceptar que mañana él se casará con Jimin, no lo merece, no merece tener a un hombre como Jin en su vida. Por qué aunque se casen, no permitiré que sean felices, ese matrimonio no durará nada.

Jin me quiere a mí, solamente a mí.

Me coloco el traje con lentitud y no puedo creer que hoy es el día de la boda, estoy nervioso, ansioso e inseguro por lo que vaya a suceder. No sé cuántas vueltas le he dado a la habitación pensando en Jin, en la boda, en mi y en la noche de bodas.

"Olvida eso de seguir vírgen después de nuestra noche de bodas". Sus palabras resuenan en mi mente una y otra vez con ese calor de su voz.

Pego un brinco cuando la puerta es abierta de golpe, Jungkook me observa de arriba hacia abajo y sonríe —¿Crees que te ves bien?. Jin solo se casa contigo para darme celos, no por ti, jamás significaras algo más para él.

—¿Qué ganas diciéndome todo esto?. No vas a lastimarme con tus palabras, ¿Crees que no puedo provocar nada en Jin?— pregunté mirándolo desafiante

Él fruncio el ceño levemente
—No lo creo, lo aseguro.

—Entonces... ¿Los besos y caricias que me ha dado no cuentan?— sonreí quitándole la sonrisa de satisfacción que tenía en el rostro —Jin me ha besado sin tenerte en frente así que no creo que sea para darte celos.

Observé a mi hermano mientras su expresión se descomponía de manera considerable —¡Aunque lo haga, no le haces sentir nada!. Incluso está noche si él llega a tocarte sólo pensará en mí.

—¡Mientes!— grité.

—No querido hermanito. Para Jin he sido inolvidable y siempre me recordará aunque lo niegue— Jungkook acomodó la flor de mi pecho y sonrió, saliendo galante de la habitación.

Me senté de golpe sobre el colchón encontrándome de pronto asustado, ¿De verdad él haría eso?. Hasta ahora, nunca me había detenido a pensar en eso, si, sé perfectamente que ellos estuvieron juntos muchas veces pero yo no pretendo ser igual, lo que yo siento es diferente, tengo confianza para poder lograr que Jin me mire cómo Jimin, no cómo el hermano de su objetivo de venganza.

El camino hacia el registro civil fue tortuoso. Al llegar, ese miedo se disipó al ver a Jin esperando por mi con ese traje azul bien ajustado a su cuerpo, sus cabellos rubios hacia atrás y esa sonrisa en sus labios, esa bonita sonrisa que me hacía sentir flotar. Jin será mi esposo, estaremos juntos, no sé por cuánto tiempo pero estoy seguro de que aprovecharé al máximo el tiempo a su lado.

—Te ves muy atractivo Jimin, aunque siempre lo estás— Jin susurro a penas nuestras manos se tocaron y con tan solo ese roce me hizo sonrojar.

—G-gracias— me golpee mentalmente cuando me quedé mudo ante él, sin saber que más decir, pude elogiarlo también pero solo camine en silencio hasta donde el juez estaba.

Los amigos de Jin fueron sus únicos invitados, por mi parte solo asistieron mis padres, Jungkook y NamJoon. Aún así, estaba feliz, ese sentimiento de plenitud se apoderó de mis miedos y no pude hacer otra cosa más que sostener su mano con fuerza.

Ni siquiera busqué la mirada acusadora de Jungkook, en este momento solo existía Jin mirándome con dulzura y acariciando mis dedos con los suyos —Jimin.

Salí de mi ensoñación cuando nos declararon al fin esposos y voltee perdiéndome en el mar de sus pupilas —¿Si?.

—Voy a besarte— murmuró antes de posar sus labios sobre los míos, fue un toque suave, único y amable. Mi cuerpo tembló pero cerré los ojos sintiendo sus pestañas picar las mías. Por favor, por favor, que nuestro tiempo juntos dure más de lo que imagino.

El primer lugar que pisamos después del registro civil, fue un hotel junto a la playa pero Jin no hizo absolutamente nada para tocarme. Por una parte me sentí aliviado, él probablemente solo estaba jugando cuando dijo aquello, en el trayecto se mantuvo callado, no dijo palabra alguna y yo tampoco me atreví a decir algo, ni siquiera sabía que decir.

Después de ducharme y colocarme ropa cómoda, salí buscándolo, él estaba en el balcón mirando el sol meterse.
—Ya puedes ducharte.

—No pude ver la expresión de Jungkook, mi objetivo principal era verlo hacer una rabieta cuando te convirtieras en mi esposo pero no pude verlo— Jin murmuró sin dejar de mirar el cielo —¿Es ridículo, no?.

—¿Qué cosa?— pregunté tímido.

—Qué me olvidara de Jungkook por qué no pude apartar mi mirada de ti. Simplemente no podía dejar de mirarte— esta vez sus profundos ojos estaban sobre mi y se me hizo difícil contener su mirada —Me atraes como un imán Jimin. No se si esté bien en perseguir este sentimiento—
Me sorprendí cuando se acercó colocando su mano sobre mi cintura y al mismo tiempo lleve la mía a su pecho —Quiero hacerte el amor. Por favor, dame tu primera vez.

Me quedé totalmente mudo e ido ante su petición y pensé que huiria como un cobarde pero no lo hice, en su lugar lleve mis temblorosas manos a su cuello
—Tómame, hazme tuyo Jin, robame el aliento.

—Desde el momento en el cual firmaste el papel de matrimonio eres mío, total y absolutamente mío— gruñó con efusividad antes de tomar mis caderas y adentrarme a la habitación.

Ya no quería pensar más en nada ajeno a esta noche, solamente a SeokJin y a mí juntos.