Deseo.

No puedo estar un minuto más sin ti.

RenJun.

Me tomó mis manos, y las entrelasó con las suyas. Y me besó, yo le correspondí el beso.

Pero de algo quiero estar seguro, y es de que ya no siento nada por el; o eso de verdad me lo quiero hacer creer.

Pero creo, que con cada beso, me hace saber, que aún lo amo; bajó a mi cuello, y empezó a besarlo, yo le di la libertad de que haga lo que quiera conmigo. Me desvistió por completo, y el hizo lo mismo con su cuerpo.

Sus besos bajaron a mis pezones, los succionó y mordió a su gran antojo, yo era un mar de gemidos; no podía controlarme, hace años, que no tenía sexo, y me dejé llevar por sus besos y caricias, de la forma de volverme loco. Sentí su miembro entrar en mi, de una sóla embestida, y yo grité por el dolor, el me empezó a besar, y a distraerme; empezó sus estocadas, lentas, y poco a poco, fue subiendo el ritmo, y yo empecé a moverme con él, rasguñé su espalda, cada que daba en mi punto sensible, y gemía más fuerte.

Cambió de posición, dejándome en cuatro, embistió de nuevo; me fascina estar así, extrañé esto.

No pude aguantar más, y me corrí, manchando la cama, y después de unos minutos, el se corrió dentro de mí, y me dejé caer, en la cama.

La misma cama, donde hace exactamente 8 años atrás, el me había quitado la virginidad.

- RenJun, te extrañé, mi amor, no sabes lo que pasé, no sabes lo difícil que ha sido para mí, el estar sin ti- me abrazó fuerte, y yo lloré.

- Jeno, tu cómo crees, que ha sido mi vida? Crees que yo estuve en un lecho de rosas? No Jeno. Me rompiste el corazón, al ver que sólo me ilusionaste, al decirme que querías casarte conmigo, y el día de la maldita boda, tu me dejaste plantado, salgo del registro civil, sólo para ver a la persona, que me dejó plantado, casarse con otro, el mismo día que me dijo que nos casariamos.

Me miró con los ojos llenos de lágrimas, y yo lo confronté.

- No fue nada fácil, RenJun, yo también sufrí, fui obligado a casarme con un niño mimado, y déspota, también me sentí miserable, al saber que mi padre podía dañarte, ese día lloré hasta cansarme, porque te necesitaba, y te sigo necesitando; luego me enteré de que habías vuelto a China, y perdí las esperanzas de poder explicarte todo.

Me quise levantar pero el no me dejó, me siguió abrazando.

- Te digo la verdad RenJun, no creas que estuve en un matrimonio feliz, Jaemin me fue infiel, tuvo una hija con su amante, no la reconocí como mi hija, porque de ante mano, sabía que no es mi hija. Jamás toqué a Jaemin, siempre te respeté.

Mi corazón palpitaba con fuerza, mi alma se reanimó. Sentí paz y felicidad. Pero tenía que decirle como me siento.

- Pasé mi embarazo sólo, Jeno, también te necesité, y mucho, mi labor de parto se complicó, y perdí el conocimiento; una de mis gemelas, murió, y yo ni siquiera, pude abrazarla, ni conocerla, cuando desperté, mi hijita ya había muerto, pasé el luto, sólo. Me encargué de mi hija viva, sólo. Mi hija muchas veces, me ha preguntado por su papá, y yo no sé que responderle.

Me acarició, y me abrazó fuerte, dejó un beso en mi frente.

- Le diremos que me fui de viaje, estoy divorciandome, no te perderé de nuevo Renjun, ni a ti, ni a mi hija, y menos ahora, que se que tengo a dos hijitas.

Volvió a llorar y abrazarme fuerte, y yo seguí llorando con él.

- Perdóneme RenJun, perdóname por dejarte sólo, perdón, por no protegerte, ni a ti, ni a mis hijas, perdón por nuestra hija muerta

Sentí que mi corazón se partía en mil pedazos, recordar a Injun me pone sensible, me pone tan mal.

- No puedo estar ni un minuto más sin ti, te necesito en mi vida, y también necesito a mi hija.

Me recosté en su pecho, ya no quiero vengarme, ya no quiero hacer esto, pero, le explicaré lo que haré por mi mamá, lo haré únicamente por el, y por sus dos bebés muertos; nada más por eso y por mi padre, que también fue víctima de esa familia. Jeno también fue víctima de ellos, e incluso mi pequeña hija muerta.

- Cuándo es el cumpleaños de nuestra hija?- miré a Jeno, volví a acomodar mi cabeza en su pecho.

- El 23 de Mayo- el me abrazó y me sonrió, empezó a acariciar mi espalda.

- 23 de marzo, 23 de abril y 23 de mayo. Es curioso los cuatro nacimos el 23, pero de meses consecutivos- solté una carcajada.

- Voy a celebrar el cumpleaños de Inna, será el sábado, porque el jueves ella estará en un concurso de lectura- sonrió orgulloso, y me abrazó más fuerte, y sentí su dura erección restregarse en mi pierna y después me volteó, embistiendome.

Jaemin.

-Jisung? Tenemos que hablar, por favor, escuchame.
-Pon lugar, hora y fecha.
-El Domingo, a las 5 de la tarde en el parque cerca de la escuela de Hanna.
-Correcto...

Siento que todo va de mal en peor, y que si no le digo la verdad a Hanna, la voy a perjudicar y me va a odiar.

- Jaemin, no le firmes los papeles del divorcio a Jeno, retenlo- miré a mi mamá y negué.

- Ya se los firmé y se los di, delante de mi, el los firmó- mi mamá me dio una cachetada.

- No sabes harás perder a tu padre, mucho dinero?- me tallé la mejilla, honestamente yo ya me estoy cansando de todo esto.

- MAMÁ, POR DIOS...ÉL ESTÁ ENAMORADO DEL TAL RENJUN, LOS VI, VI A JENO MIRARLO CON AMOR- mi mamá me miró como planeando algo.

- Quién es ese tal Renjun?- rodé los ojos.

- El hijo mayor de los Ji, se iban a casar, pero, obviamente no lo hicieron, ya que Jeno, se terminó cansando conmigo.

El abrió los ojos de la sorpresa y me miró un instante y luego se fue, muy extraño que no esté planeando nada.