Todo por tí - Marco Asensio.

Cap 3.

-Que haces hablando con Marco?- preguntó Brahim mirándome fijamente.

-Se ha chocado conmigo o yo con él, no se, estaba distraída y él al parecer también. Le he dicho que fuera con más cuidado y me ha llamado cristalcillo.- dije normal.

-no quiero que te acerques a él, de acuerdo?- dijo enfadado.

-Ya empezamos Brahim? No puedo hacer nada, llevo sin tener amigos desde que empecé contigo. Solo amigas y las he tenido que dejar en Manchester por ti, solo por ti.

-Paula, no empieces con eso, te podias haber quedado.

-Ah, que querías que me quedara, cuando también me fui de España por ti, sisi, todo coherente.- dije subiendo las escaleras directa a irme por la misma dirección en la que se había ido Marco, no penséis otra cosa, era la salida. Una mano en mi muñeca interrumpió mi camino.

-Por qué me hablas así?

-por qué me tratas así?- dije con lágrimas en los ojos.- esto no tiene sentido por ningun lado Brahim, nada de esto tiene sentido. Sueltame- dije y le dejé allí.

Me fui saliendo por los millones de pasillos que hay en este estadio.

Cuendo llegué a la salida en la que, de normal, los jugadores dejaban sus coches, me volví a encontrar con Marco apoyado en la pared mirando el móvil. Seque mis lágrimas lo más rápido posible.

Genial - pensé.

-Hombre cristalcillo, otra vez? Me estas siguiendo?- dijo riéndose y dejando el móvil en su bolsillo y mirándome.

- te he dicho que no me llames así- dije molesta buscando mi móvil en mi bolso.

-Ei, te pasa algo?- dijo poniendo su mano en mi hombro.

-no- contesté fría.

-y por eso tienes el rimel corrido y los ojos rojos. Es una nueva moda o a ti te ha pasado algo ahí dentro.- ignoré sus palabras para poner mi móvil en mi oreja. Iba a llamar a una de mis amigas de la infancia aquí en Madrid, ya que iba a ser ahí donde me quedara hasta que encuentre algo. No podía seguir viviendo con Brahim, era demasiado.

Un tono, dos, tres, cuatro, cinco, seis...

-Mierda- dije bloqueando el móvil y mirando al cielo pasando mis manos por mi cara.

-A quién llamas?- dijo de repente Marco.

-A una amiga, me quedaré en su casa unos días mientras encuentro algo, ya lo tenía decidido antes de llegar aquí pero no me lo coge y me tenía que llevar a casa de Brahim a por mis cosas, que fue donde las dejé.-solté de la nada. No se como, pero se lo conté.

-pero no vives con tu novio?- dijo.

-en Manchester si, aquí.... no.- dije y mis ojos se hicieron agua.

-ei, no llores. No se que habrá pasado ahí dentro o entre vosotros pero tranquila. Me puedes decir como te llamas? - preguntó mientras me tendía un pañuelo.

-Paula y muchas gracias- dije quitandome el rimel y las lágrimas.

-te llevo? - dijo señalando su Audi blanco.