Cap 36.

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Fui a comer a casa de Marco, donde comimos Igor, él y yo juntos. Pero tampoco faltó Rome.

-tengo a la mejor- dijo Marco tirándose encima mía en cuanto Igor se fue a su habitación.

-pues dile que no se acerque mucho, igual me pongo celosilla.- dije besandole.

- no puedo.- dijo pasando a mi cuello.

-por qué?- pregunté riendo. Me hacía cosquillas con su barba.

-porque ya no puedo vivir sin ella.

-pues tengo mis contactos y me han dicho que ella sin usted tampoco, mallorquín.

-pues me suena bien. También sabe usted, madrileña, que la quiero mundos?

-pues mis fuentes creen que si.- dije y nos besamos.

Pasamos el resto de la tarde juntos.

-Seguis igual que cuando me fui. Sois unos empalagosos.- dijo Igor viniendo de su habitación y viendonos super juntos y Marco pasando su mano por mi espalda ya que me había subido la camiseta por detrás.

-Como te quiero bro- dijo Marco levantandose y yendo hacia Igor. Cuando llegó, le abrazó casi estrujandolo.

-Paula, creo que no te ha abrazado lo suficiente.- dijo Igor y me empecé a reír de sus caras.

Me dio un ataque de risa allí mismo y empecé a rodar por el sofá como una croqueta apunto de darla un ictus.

Los dos hermanos pararon de hacer el idiota y se quedaron mirando hasta que a Marco se le soltó una carcajada y detrás de esa unas cuantas más.

Acabé descojonándome en el suelo con Marco riéndose a muerte en el borde del sofá, Igor en el otro sofá comiendo y riéndose también.

Llegó un momento dado en el que paramos porque ya no podíamos más.

-Me meo, voy al baño- dije levantándome de un respingo del suelo.

Todo por tí - Marco Asensio.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora