Todo por tí - Marco Asensio.

Cap 23.

-Eres una luchadora. Perder a seres queridos no es nada fácil y menos si estás sola, como estabas. Sabes que, a partir del día que te conocí, voy a estar para ti en todo Paula.- dicho eso me abrazó.

Un abrazo reconfortante, un abrazo que necesitaba. Marco tenía la capacidad de hacerme sentir mejor en décimas de segundos. Puede que tenga que hablar con Marina, o Marco hace algo en mí o me estoy volviendo loca.

Cuando nos separamos nos quedamos mirando a los ojos. Sus preciosos y enormes ojos me dejaron en una nube, me pasaba siempre que le miro.

Fue él quien empezó a acortar la distancia. No sabía muy bien cómo pero estábamos a centímetros cuando el sonido del timbre interrumpió.

-Voy a abrir, quédate aquí.- dije levantándome. No se quién podía ser a estas horas. Las 12 de la noche no es muy buena hora para picar. Lo más seguro es que fuera Marina. Tenía la costumbre de hacerlo siempre.

Abrí la puerta encontrándome a quien menos quería ver en ese momento. Mi corazón comenzó a latir con fuerza y mis manos empezaron a sudar.

-que haces aquí?- pregunté mirándole a los ojos con firmeza.

-hablar. Quiero hablar- dijo entrando y cerrando la puerta.

-qué coño haces?- pregunté cabreada.

Marco apareció por en salón y Brahim le miró directamente para luego mirarme a mí.

-Anda que te ha faltado tiempo.

-vete ahora mismo- dije levantando la voz.

-que quiero hablar, joder!- dijo cogiendome fuertemente y zarandeandome al cogerme el brazo. Me retorcí de dolor y Marco le quitó el brazo cogiendome a mí por los hombros.

-tío, que mierda te pasa? Que haces tratándola así?!- preguntó Marco alterado. Brahim suspiró.

-Paula, no me arrepiento de lo que viste la noche pasada. Te mentiría si digera lo contrario. Me llevo viendo con esa chica desde que llegué aquí. No es que no te quiera, de verdad pero, ya no es lo mismo de antes.

-Brahim, hace 7 meses que no estamos bien. Te crees que te sigo queriendo después de todo lo que me has hecho? No. Me podría decir que sí y metermelo en la cabeza pero sé lo que siento y no puedo corroborar tu opinión.

-Sé lo que sientes. Te crees que soy bobo y no se que te gusta este?- dijo señalando a Marco quien lo veía todo desde mi lado izquierdo.- te crees que no me jode que un compañero mío te tenga. En sí, ya lo sé, todo fue culpa mía pero, me jode. Se que desde que os visitéis en el tunel de vestuarios los dos conectasteis. Le miras como nunca me miraste a mí. Nunca te vi una sonrisa tan sincera junto a mí. No te he podido dar lo que él te va a dar, no soy gilipollas y también sé lo que pierdo por imbécil. Te crees, Marco, que no sé  lo que piensas cuando la ves? Yo también lo pensé en su momento. Dicho esto, ojalá seáis muy felices y, ya nos veremos Paula.- dijo y se fue.