Mi mejor destino

Las cosas claras

El día en el set continúa y a pesar de llevar muchas horas grabando, se pasan rápidamente. Desde la zona donde hacemos las fotos, subimos a la oficina de nuevo para seguir grabando alguna que otra toma. Los ánimos están un poco decaídos después de más de nueve horas de grabación por lo que Cagri nos da un descanso extenso mientras pone música en el set. Cuando comienza la música, Can me abre los brazos y corro para abrazarle entusiasmada, pero al ver que están grabando desde la otra punta del salón, paso por debajo de los brazos que él me extiende.

-¿Qué pasa? -pregunta ligeramente enfadado, con el ceño fruncido.

*****

El camino a casa lo hacemos entre incómodos silencios y murmureos inacabados. Can resopla una y otra vez y cada vez que nos paramos en un semáforo en rojo me mira pensativo. Refunfuña. Resopla. Murmura. Se rasca la barba. Vuelve a refunfuñar y comienza un bucle que no acaba hasta que aparca el coche en la segunda plaza de la cochera que he tenido que alquilar. Bajo con rapidez del asiento del copiloto y cierro con un portazo.

-¡Eh! ¿que te pasa? -Can me agarra del brazo. Me suelto con brusquedad.

-¿Que qué me pasa? ¿¡Que te pasa a ti!? -grito. -Llevas todo el camino sin dirigirme la palabra, murmurando y haciendo ruidos. Eres un niño pequeño.

-No me gusta que mi novia quiera esconderme de todos. -suelta enfadado.

-¿Tu novia? -en cuanto lo digo, él bufa.

-Esta conversación ya la hemos tenido, no voy a tenerla más veces. -las luces del coche saltan cuando él aprieta el botón para encenderlo. Can abre la puerta del conductor decidido. -Me voy.

-¡Espera! -grito. -Ni me lo has preguntado.

-¿De verdad necesitas una pregunta? pensé que todo estaba claro. -él cierra de nuevo la puerta. -Yo te quiero y tú me quieres. -Can se acerca a mi y coge mi cara entre sus manos. -¿Que más necesitas?

-No necesito nada más pero hay decisiones que debemos de tomar los dos.

-¿Quieres estar conmigo? -pregunta con rapidez.

-Sí.

-Yo también. Decisión tomada. -me río, no me queda más remedio y él también sonríe. -Aunque no pueda resistirme a ti sigo molesto porque quieras esconderme.

Tiro de él hacia el ascensor del parking, mientras subo entre sus brazos, con la cabeza apoyada en su pecho, pienso en las palabras adecuadas. Es la hora de la verdad, de dejar las cosas claras. En cuanto se para el ascensor y se abren las puertas, voy con ansiedad hacia la puerta, necesito soltarlo ya. Darle mis razones. Civan nos saluda moviendo su peluda cola y sin prestarle mucha atención, llevo a Can hacia el sofá agarrándole la mano.

-Vale, es hora de poner las cosas claras. 

-Dispara. -dice él, acariciando mis manos entre las suyas.

-Somos personajes públicos. -él asiente. -Estuve con Seckin cuando empezaba a ser más conocida, quise llevar una relación normal con él, publicar nuestro día a día como personas normales, salir a pasear, a cenar.. -él gira la cabeza, disgustado. -La prensa nos perseguía a todos lados Can, era un acoso continuo. Nuestra relación no pudo con eso y Seckin se volvió más agresivo y controlador.

-Pero nuestra relación no es igual y yo tampoco soy.. 

-Ya, ya se que no eres igual. Eres mucho mejor. -le interrumpo. -Y aunque eso no hubiera pasado, no hubiera seguido con él al conocerte a ti. -le aprieto las manos con cariño y él sonríe de medio lado. -No quiero volver a pasar por eso. No tenemos que escondernos con las personas del set, amigos y familiares pero no quiero confirmar lo nuestro ante la prensa.