En las buenas y en las malas

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-¿Demet? ¿qué pasa? ¿estás bien? -Can coloca su mano sobre la mía y me saca de mis pensamientos. -Te has puesto pálida..

-Han encontrado a mi padre muerto.

-Joder. -suelta Can. -¿Estás bien? ¿cómo te sientes?

-Estoy confundida Can.. Siento cosas que no sé si debería sentir, no sé si está bien alegrarme o llorarle. No lo sé.

-Hagas lo que hagas, estará bien cariño. Si lloras es normal, en el fondo era tu padre y si te alegras también es normal, os hizo la vida más difícil, desapareció.

-Can.. ¿Puedes dejarme sola, por favor?

-No creo que sea lo mejor, Demet.

-Si me quieres aunque sea un poco será mejor que te vayas y me dejes sola, por favor.

*******

-No pienso dejarte sola una vez más. -Can se echa el pelo hacia atrás, frustrado. -Estoy cansado de que me eches de tu lado cada vez que tienes un problema.

-Siempre he sido así. -me encojo de hombros.

-Siempre has estado sola pero ya no, ahora me tienes a mí. -él agarra mis manos con decisión. -Estamos juntos, en los buenos momentos y en los malos, ¿vale?

-Gracias. -y sin saber por qué, rompo a llorar.

-Ven aquí, ven amor.

Can tira de mis muñecas hacia él y me envuelve entre sus brazos. Apoyo la cabeza entre su cuello y su pecho mientras lloro sin reservas. Él envuelve mi cabeza con una de sus manos mientras me acaricia el pelo y deja algún beso entre los mechones de mi coronilla. A pesar de estar llorando, sonrío, sonrío agradecida por tener a una persona como él a mi lado y le doy las gracias mentalmente por no irse y dejarme sola. Por ser refugio en días de tormenta, como hoy.

>>Estrecho mi cuerpo contra el suyo con fuerza y noto como sonríe por encima de mi cabeza, envolviéndome completamente con sus brazos. Inspiro con fuerza en su cuello, él se encoge mientras su olor mezclado con su colonia cubre mis sentidos y me calma. Y sólo así, dejo de llorar.

-¿Demet? 

-¿Sí?

-Suéltame, voy a ir a por agua. -niego con la cabeza en su cuello, que vibra deliciosamente cuando se ríe. Cierro los ojos disfrutando el momento. -Tienes que beber agua, un segundo.

Le suelto a regañadientes y aprovecho para rehacer mi moño y limpiarme la cara. Me miro durante unos segundos en el espejo preguntándome por qué lloro exactamente. Las palabras que le dije a mi padre hace apenas unos días vuelven a mi mente. "No me importa si mueres, yo estuve muerta mucho tiempo por tu culpa." Me encojo ligeramente, sintiéndome culpable. ¿Estaría vivo si le hubiera ayudado? esa duda siempre me perseguirá.

-¿Demet? -Can se acerca por detrás, extendiendo el vaso de agua con lentitud hacia mí. -Venga, tienes que beber. Hazlo por Bolita. -él acaricia mi barriga con su mano libre y yo sonrío.

-No puedes decirle Bolita, es demasiado pequeño para ser una bola.. Es más un Garbancito.

-Bebe. -ordena, poniendo los ojos en blanco. -¿Has.. Has pensado algún nombre?

-Si es un chico me gustaría Azad y si es una chica me gustaría Ilknur.

-Mmm.. Libre y Primera luz. Me gustan. -sonríe. -Primera luz.. ¿Eso significa que habrá más?

-Claro que tendremos más, al menos tres niños. O eso me gustaría..

-Tendré que ponerme al día.. Esto de la abstinencia no es lo mío. -dice riéndose.

Mi mejor destinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora