[ S a b r á s l o q u e e s e l i n f i e r n o ]

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UNAS HORAS ANTES EN LAS AFUERAS DE L.A*

NARRA JUSTIN*

Recuerdo un año antes. 

Un maldito año, ese es el tiempo que había pasé desde que entré en la cárcel aquél fatídico día y lo que me quedaba aún entonces. Lejos de preocuparme lo que pensarían mis fans, tenía otra cosa en la cabeza: como salir de allí. Eso me había ocupado la mayor parte del tiempo, pensar como huir de está mierda. Ya fuera intentando escarbar mientras el guarda no miraba, taparlo con un póster para que no viera el destrozó y barrer la habitación simulando que limpiaba con una sonrisa en la cara.

-Esto es todo lo que tengo-dijo Harson, el hermano de Antonio.

Me alargó un papel con la información que le había pedido de ____, lo que necesitaba para encontrarla. Sus ojos negros me miraban mientras la nota hacía un ligero ruido al rozar con la mesa. Según lo que había escrito, _____ se llama Selena y estaba en Oklahoma con un tal Horan, no me acuerdo del nombre, y su hija Blue. Una sonrisa apareció en mis labios.

-¿No tienes más?-pregunté esperanzado.

-No tío, nada más y no me vuelvas a pedir algo así...los federales me están pisando los talones y no quiero acabar como tú ¿me entiendes?-dijo mientras encendía un puro.

-Lo entiendo, tranquilo, no te voy a pedir más-contesté al fin.

Terminó una de las muchas vistas que había recibido. Miré el papel que me había dado: "Selena...". Me relamí los labios cuando leí ese nombre, tenía apetito. Las ganas de asesinarla, oír los gritos mientras tocó cada parte de su cuerpo y lamer su sangre de mis manos me hacían ponerme ansioso por volver a verla.

[La parte escrita en cursiva puede herir la sensiblidad de algunos lectores. Si no quieres leerlo es normal. Recuerda que está narrado por un Justin psicópata. Prepárate para lo peor]

<<La chica gritaba horrorizada. Su piel tenía varios cortes...sangraba por la nariz y la boca. La iba rajando por debajo de cuello, el líquido rojizo se acumulaba en el filo de la navaja. El placer que me causaba su dolor hacía que mi erección creciera bajo los jeans.

-Grita más nena, por mí-le susurré al oído.

-¡Aaaaaahhhh!-gritaba inevitablemente mientras le rasgaba la ropa con el cuchillo sin medir la fuerza. Después deslizé el filo de la muñeca hasta el hombro.

Le corté por el abdomen y por el pecho, debajo de nuestros cuerpos estaba encharcado y el olor que desprendía invadía mis fosas nasales. Lo amo con todo mi ser, mi corrompida alma se deleita y se expane antes esta hermosa visión. Los dos amantes cogidos de la mano, el rubio ya muerto y la niña llorando enganchada a en la ropa de su padre. La dulce niña lloraba desconsolada al ver como yo mataba a su padre, y ahora a su madre. Sus llantos eran música para mis oídos, no hay nada más amargo que ver un niña traumatizado por un crimen y el odio que desprendían sus ojos azules celeste era simplemente perfecto.

-Dile a tu hija cuanto la quieres, díselo-le ordené sin para de sonreír.

-Te quiero mucho Blue...mami te quiere, te quie...-unas lágrimas se deslizaron por ambos del rostro de _____, era una mujer asombrosa. Era incluso más bella con ese dolor en los ojos, el rímel corrido lo saboreé con pasión. El dolor es ira, la ira es sentimiento. Solo quiero que me odie y besarla hasta arrancarle el labio en un beso voraz."

1 año más tarde al fin podía respirar el aire de la libertad, de la calle.

Hacía más de una hora que me había escapado y andaba haciendo círculos por L.A. Tapado con una capucha y unas gafas de sol que ocultaba mi identidad. Nadie podía saber de mi. Iba por ella. _____, ahora Selena. Esa p**a. Como una ingenua cierva volverá a caer a mi brazos, a mi mereced, el lobo. Mis manos manchadas de tiza después de dejar el mensaje grabado en mi celda. Lo sabría y querría córrer, la atraparé. Tenía un plan, la quería matar pero de una forma...especial. A mi estilo. Lo que incluiría a Zayn, ese cabrón que me la robó. Necesito una pistola.

Al girar la esquina, llegué a mi destino. El club que antes era de Antonio y que ahora es de Jay, un pez gordo del narcotráfico en L.A. En la puerta había unas mujeres fumando con sus chulos, las rodeaban y las manoseaban a pie de calle. Yo reí. Me saqué las gafas y me bajé la capucha, dejando a la luz quien era. Aquí no me tenía esconder. Digamos que...aquí nunca llaman a la polícia para nada. Desde el exterior se podía oír 99 problems de Jay-Z. 

-Pasa guapo, bienvenido-me saludó una mujer cuando entré, le echaba unos 30 años. Un gran escote gracias a un corsé rojo, le estrujaban los pechos operados y dejándolos como dos pelotas perfectas. Los pintados de rojo, como no y peluca rubia.

GENTELMEN CLUB STRIP LADIES, L.A.*

-Bieber, por aquí-dijo un hombre de Harson. Lo conocía, lo había visto un par de veces. No recordaba como se llamaba-te ha estado esperando-me informó.

Me guió hasta una puerta de "privado" al final del club y se apoyó en la puerta para dejarme pasar. Harson estaba sentado en una sofá aterciopelado rojo, con una p**a a cada lado y puro en la mano, como siempre. En ese año no había cambiado para nada. Su pelo a rastas y sus dientes dorados. Me senté a su lado como él mismo había señalado y una de las chicas, la morena, me sirvió una copa de whisky. 

-¿Qué quieres Biebs? No tengo todo el día, habla de una vez cabrón-soltó una bocanada de humo.

-Quiero una pistola cargada-le contesté sin apartar la mirada, quería que viera que voy en serio.

-Veo que estás decidido a matar a la chica, me parece bien-rió juntos a las chicas, que mientras reían su rostro mostraba pánico-¿Quieres una navaja también? ¡Kilerson trae el maletín anda!-le gritó a otro de sus hombres, el de su izquierda y le susurró algo al oído. El hombre vaciló unos segundos y después abrió la puerta que estaba detrás suyo. Un minuto después reapareció con el maletín.

-¿Qué tienes?-pregunté impaciente pero manteniendo una cierta calma.

Una pistola pequeña plateada y una navajita nada ¿Qué coño?

-Es todo lo que te puedo dar, no pidas más...no creo que necesites mucho para acabar con esa chica ¿me equivocó?-preguntó para después comerle los morros a la rubia de la derecha.

-Bien, pues me voy, te lo devolveré-dije levantándome del asiento.

-No Justin, quedatelo...no...lo necesito-soltó una carcajada repelente. 

-Claro que no lo necesitas, esto es una mierda...pero mejor esto que nada-di media vuelta y salí del local.

Caminé a lo largo de la calle, vaho salía de entre mis labios y me froté las manos. Me había guardado lar armas en el bolsillo. Oí sirenas de polícia y me escondí entre unos arbustos. Vi que entraban en el local pero no me quedé para ver lo que hacían. Seguí mi camino. Llegué a una calle comercial y me quedé embobado mirando una tienda de electrónica. Estaban dando las noticias.

-Me pasan una noticia de última hora, el presó 8902314 de la Prisión Estatal de los Ángeles, Justin Bieber está a la fuga desde hace 2 horas, se ruega a cualquier persona que lo vea que llamé inmediatamente a la polícia e informé de su localización y cualquier información de a donde se diriga...también se ruega a toda la población de L.A. que evite la calle, ya que tiene un arma de fuego en su poder, muchas gracias y muy buenas noches-entonces supe porque la polícia había entrado en el club, el cabrón de Kilerson había llamado a la polícia mientras cogía el maletín.

Lo sabía porque vi como se metía el teléfono dentro del bolsillo trasero del pantalón y con la otra mano le entregaba el maletín a Harson. Eso prueba que no te puedes fiar ni de los tuyos. Nunca. Al cabo de un rato llegué a mi objetivo: la casa de Simon. Había robado un coche dos calles más abajo, un Audi negro y me paré en la sombra detrás de una coche aparacado. Al cabo de poco vi a Zayn y ___ salir de la casa. 

Hermosa, pronto sabrás lo que es el infierno....

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El final se acerca ¡Espero que os haya gustado el capi!

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The Fight (Zayn, Luke y Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora