Una tarde lluviosa de regreso a casa, la universidad había sido dura aquel día. Te encontrabas estudiando derecho, realmente no se trataba de algo que te apasionase, sin embargo estabas harta de la vida que habías vivido hasta ahora; al estudiar esto te centraste en obtener una vida normal y que tus recursos proviniesen de un trabajo más respetable y decente para la sociedad y así cambiar la vida que te había tocado vivir.
Las 8 de la noche, ya casi es tiempo de abrir el burdel que te había dejado tu abuela de herencia. Ella fue una mujer de vida alegre, a pesar de tener lo necesario para estudiar una carrera decente terminó trabajando en un burdel como stripper, hasta este punto de tu vida no entendías como le pudo hallar placer a ese tipo de trabajo; trabajo en varios burdeles hasta recaudar el dinero suficiente para abrir el suyo propio, contrato varias de sus compañeras de toda la vida en su local teniendo así un gran éxito.
En uno de sus trabajos descuidados quedo preñada de tu madre, cuando esta nació tu abuela la mostró acerca de su oficio, al crecer tu madre también había llegado a ser una stripper bastante reconocida en la ciudad, trabajo por varios años. Cuando eras pequeña comprendiste que no eras como las demás niñas, no tenías un padre, tu habitación no estaba siempre limpia, tu madre no trabajaba en el día como las madres de las demás niñas y no te contaban un cuento para dormir.
Con el paso del tiempo mientras crecías abusaban constantemente de ti en la escuela, pateaban tu mochila, te trataban como si fueses una chica fácil, cuando salias de la clase y regresabas tus cuadernos estaban rallados con la palabra "puta" en ellos. No tenías muchas amigas, ya que desde un principio sus madres les habían advertido sobre la familia de la que provenías, tu reputación era de las peores en la escuela.
A pesar de eso, no tenías con que distraerte en clase, la energía que no gastabas afuera conviviendo con demás niños la utilizabas en estudiar para tu clase, eras de las mejores por así decirlo, pero de todos modos no destacabas del grupo debido al bulling que sufrías.
Aquellas situaciones y otras más te habían hecho una niña bastante seria, a pesar de estar cambiando constantemente de escuela e intentar hacer nuevos amigos la historia siempre era igual, cuando tu madre llegaba a una junta escolar tu reputación bajaba en picada.
Aquello continúo hasta terminar la secundaria, cuando tu mamá te ofreció unirte al "negocio familiar" pero tu lo rechazaste, le dijiste que querías tener un trabajo diferente al que ella hacía, que querías ganar mucho dinero sin la necesidad de desnudarte en un escenario frente a varios hombres desconocidos. A pesar de la forma de ser de tu madre, decidió apoyarte en cada paso que estabas dispuesta a dar, se esforzó por mucho tiempo para seguir pagando tus estudios y apoyar tu sueño de ser alguien en la vida; un sueño que ella no tuvo el valor de completar.
Al poco tiempo de empezar la preparatoria tu madre fue diagnosticada con sífilis, los síntomas eran cada vez más notables, con el paso del tiempo aquella sífilis se fue transformando en SIDA.
Hace dos años que tu madre murió, dejando en tus manos en negocio familiar y tu sustento.
A decir verdad no habías tenido problemas con aquel burdel; cuando pasó a tus manos comenzaste a tener mejor atención en los seguros médicos de las trabajadoras, para que situaciones como la de tu madre no ocurriesen mientras tu estuvieses al mando. Logró a tener un gran resplandor cuando pasó a tus manos, pero debido a el dinero que habías invertido en parte en mejorar las condiciones sanitarias del lugar y en las medicinas costosas de tu difunta madre, ya no podías pagar igual a las bailarinas como les correspondía, debido a esa situación varias de ellas se fueron retirando, hasta quedar con unas cuantas pocas.
Así es como aquel reconocido burdel situado en el bulevar mas privilegiado de la ciudad llegó a ser rápidamente olvidado de la memoria de la gente.
A pesar de seguir funcionando para poder pagar justamente con su mantenimiento, de las 50 trabajadoras que un día habían estado ahí, ahora solamente quedaban 15, a duras penas podías todavía mantenerte y seguir pagando tus estudios.
Pensabas en todos estos líos mientras abrías el local, por que a pesar de todo era el mejor de aquel bulevar, repentinamente sentiste una mano esquelética en tu hombro.
Asustada volteaste la mirada y te encontraste con un esqueleto.
-¡Aaahhhh! Por favor toma todo mi dinero pero no me mates.
Le dijiste asustada, debido a que los monstruos que acababan de salir del Underground tenían gran fama de ser unos bandidos sin corazón que robaban a los humanos a cada paso que daban.
Debido a tu grito aquel esqueleto también se sobresaltó, y te dijo algo nervioso.
-S-siento mucho asustarla señorita... no era mi intención. Solamente quería preguntarle algo.
-¿Qué?
-¿Acaso conoce a el dueño de este lugar?
Dijo el esqueleto refiriéndose al Burdel que estaba a medio abrir, donde justamente ibas a entrar a acomodar el lugar.
-Bueno... ¿gustas pasar?
Dijiste abriendo la puerta invitando aquel esqueleto a entrar.
-¡Oh! muchas gracias señorita.
Dijo el esqueleto con una sonrisa entrando a aquel lugar.
Acomodaste unos sillones al rededor de una mesa que estaba para presenciar el taburete, invitando a aquel esqueleto a sentarse.
-Estás hablando con la dueña, ¿se te ofrece algo?
-La verdad sí, por cierto me parece impresionante que tu seas la dueña, bueno cuando te vi no tenías apariencia de trabajar aquí.
Te sentiste algo ofendida por el comentario del esqueleto, este al notarlo prosiguió.
-B-bueno... me preguntaba si... necesitaban lugar en el table.
-Ugh... así que viniste por eso. Lo lamento, no podré contratarte.
-¿Pero por qué? ¿Es por que soy un monstruo?
-No exactamente, mira estamos atravesando una situación bastante difícil por aquí, no estamos como para contratar personal por ahora. Además el que seas un monstruo no ayuda, no te ofendas, pero la mayoría de clientes son humanos, heterosexuales. También tenemos nuestra zona gay, pero...
-¡Necesito trabajo! No comprendes, mi hermano y yo estamos desesperados.
-¿Enserio crees que traer monstruos nos daría mas publicidad? Estamos casi en quiebra, no podré pagarte como desees.
-¡No te voy a decepcionar! Haré lo posible por levantar el lugar.
Dijo el esqueleto con sus pupilas violetas iluminadas por la ilusión y la esperanza dentro de él.
-Mira, si realmente necesitas el trabajo, hay muchos burdeles ahí afuera, sinceramente sería mejor para ti buscar en otro lado.
-Lo comprendo chica, pero sabes, este lugar me da buena espina, tengo un buen presentimiento, creo que cosas buenas pasarán por aquí con mi ayuda.
-Eh...
-No espero que me creas, pero por favor dame una oportunidad.
-Es bastante complicado tener un nuevo trabajador, de veras lo siento... desearía ayudarte pero no puedo.
-No te seré una carga, es más, no me pagues todavía. Cuando la situación mejore podrás corresponderme.
-¿Realmente estás tan desesperado por entrar a este lugar?
-Más de lo que crees.
Soltaste un fuerte suspiro, para volver a mirar aquel esqueleto lleno de entusiasmo, quizás demasiado.
-De acuerdo...
-Llámame Lust.
-De acuerdo Lust, ¿cuándo podrías empezar?
-Hoy mismo.

ESTÁS LEYENDO
Boulevard//Lust!Sans x Reader
Fanfiction-¡Necesito trabajo! No comprendes, mi hermano y yo estamos desesperados. -¿Enserio crees que traer monstruos nos daría mas publicidad? Estamos casi en quiebra, no podré pagarte como desees. -¡No te voy a decepcionar! Haré lo posible por levantar el...