Boulevard//Lust!Sans x Reader

New deal

Esperabas el auto de Skelleton-Family afuera de tu edificio, estallabas en rabia, pensando cuidadosamente que era lo que ibas a hacer, no te importaba en ese momento nada más que Lust y su hermano, ni siquiera las estúpidas normas que habías pactado con Mafia!Sans respecto a tu vestimenta por ir a Mafiatale, todo aquello lo mandabas al demonio en ese momento.

El auto finalmente llegó, subiste como si nada y te dirigiste hacia la casa grande.

El auto manejaba con mayor velocidad de lo usual, algo curioso de los empleados de Skelleton-Family, era que siempre sabían que hacer dependiendo del humor de sus jefes.

En cuanto llegaste a la casa grande, sin importar que fuera la madrugada te dirigiste a paso firme a través de los pasillos; si querías una respuesta inmediata, debías atacar desde raíz, Mafia!Papyrus.

Sabías donde se encontraba su habitación, Mafia!Gaster te lo había dicho, nunca te dirigido hacia allá, no le sentías necesario, además de que lo que te había contado Mafia!Sans cubría toda tu curiosidad sobre lo que su hermano hacía en las noches.

Antes de dirigirte hacia dicho lugar, pasaste a tu habitación por un par de armas, solamente para ser precavida.

Después de pasar por varios pasillos y escaleras de la mansión, a aproximadamente diez metros antes de lo que se suponía era tu destino, empezaste a escuchar gritos y gemidos a la distancia, con una voz aterradoramente familiar para ti, una voz que conocías a la perfección y habías escuchado reír y llorar antes.

Te partió el corazón estar cerca de lo que pasaba, querías vomitar de la repulsión que aquellos ruidos te generaban.

Sentías tu cuerpo débil, e insuficiente para irrumpir.

¡¿Eras una cobarde?!

Habías salido de tu casa para proteger a la familia de tu novio, para defender a su hermano menor, ¿realmente podías hacerlo? ¡¿por qué te estabas deteniendo?!

Trataste de que esas preguntas abandonaran tu mente lo más rápido posible, aquel ruido también te recordaba a cientos de "incidentes" que tu madre había tenido con clientes importantes, hombres de dinero e influencias en lo que solía ser tu propia casa.

En ese entonces no podías hacer nada, pero ¡¿ahora qué?!

-Yo puedo -dijiste para ti misma en voz baja.

No querías escuchar el ruido de aquellos dos más tiempo, corriste hacia tu destino y pateaste la puerta sin conseguir nada, ¿en qué habías pensado? era una puerta resistente y tu vida no era una película.

Trataste de abrir con la manija, pero estaba cerrado con llave.

Tomaste tu arma y disparaste a la cerradura múltiples veces, hasta que finalmente la puerta se abrió.

Sin temer a nada, con un valor que había surgido de escuchar los lamentos de Lust, dijiste viendo a la cara a M!P:

-Vengo a cambiar el trato contigo.

Mafia!Papyrus despegó su miembro del pelvis de Papy, con su magia tomó el alma del otro esqueleto y estrelló su cuerpo con una pared violentamente, para acercarse a ti desnudo y decir:

-No te entrometas en mis asuntos, humana.

-Vengo a negociar contigo, para que dejes a Papy en paz -respondiste con firmeza.

-Papy tomó su decisión, esta pagando la cuenta del hospital de Lust ¿no recuerdas?

-¡Ninguna cuenta vale todo lo que Papy está haciendo! lo sabes ¡todos ustedes lo saben! solo nos estás usando, ni siquiera es justo.