Michelle se ha levantado animada, y eso es muy raro en ella cuando tiene que madrugar. Cuando se levanta Erika ya no está en casa. A Michelle empieza a parecerle muy raro ese gran interés que tiene su amiga últimamente por estar en forma. Mientras, en el gimnasio Erika pasa un agradable rato de entrenamiento con su instructor favorito, Alan.
- Está máquina es una de las mejores, y mi favorita. - Dice Alan. - Pero ten cuidado, porque los primeros días puedes acabar con muchas agujetas.
- Me prepararé agua con azúcar al llegar a casa.
- Me gusta tu optimismo. Esta máquina es como si estuvieras remando en una barca, y ejercitas brazos, - Alan sujeta los brazos y los hombros de Erika, ella sonríe nerviosa. - y también ejercita las piernas. Bueno, ¿Te animas?
- Contigo a mi lado, siempre. - Erika se sube a la máquina, mientras Alan se coloca detrás.
- ¡Muy bien, vas bien! ¿Sabes a quién le gusta mucho también hacer deporte? A Nathan, seguro que nos lo encontramos por aquí algún día. Cuando Laura este mejor, claro.
- ¿Que tal esta la pequeña?
- Mucho mejor gracias a ti. Nathan está muy agradecido contigo, y me ha dicho que te diera las gracias en su nombre.
- No hace falta que me lo agradezca tanto, al fin y al cabo es mi trabajo salvar vidas. Pero en fin, si se empeña, siempre hay una forma de agradecermelo.
- ¿Cuál?
- Puedes invitarme a cenar de parte de Nathan, digo... como parte del agradecimiento.
- Claro, cuando quieras.
- ¿Que te parece mañana por la noche? - Dice Erika levantándose de un salto de la máquina.
- De acuerdo.
- Yo elijo el restaurante. ¿Sabes que? Se está haciendo tarde, ¿Que te parece si lo dejamos aquí, nos vamos a las duchas y dejamos el resto del entrenamiento para mañana?
- Vale, así desayuno antes de ir a la oficina.
Erika sale del gimnasio feliz, como si flotase en una nube. Alan sin embargo piensa que está haciendo una buena labor, y planea pasarse toda la cita hablando bien de Nathan y poniéndolo en buen lugar. Esta claro que ambos no tienen la misma expectativa en cuanto a la cita de mañana por la noche. Cuando Erika llega al apartamento Michelle todavía está en casa terminando de desayunar.
- ¿Vienes de correr?
- Emmm...si, eso es, vengo de correr, ufff...estoy agotada.
- Es por un tío, ¿Verdad?
-¿Que? ¡No! Simplemente quiero ponerme en forma, nada más.
- Erika, nos conocemos de hace años, ¿A quien quieres engañar?
- ¡De acuerdo, si! es por un chico.
- ¿Y es guapo? ¿Lo conozco?
- Es guapísimo, y si, más o menos lo cono...
- Me tengo que ir, - Interrumpe Michelle. - pero no te me escapas, seguiremos con esta conversación luego. Quiero saber quién es ese chico que te tiene así.
Michelle se dirige a la oficina, donde Alan la está esperando con una taza de café en la entrada de la oficina.
- Buenos días, ¿Y eso? - Pregunta Michelle.
- Fui al Starbucks a coger un café para mí, me encantan como los preparan y te cogí uno para ti, con leche desnatada y un toque de vainilla.
- ¿Cómo sabes que me gusta asi?
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Alan's Phobia
RomanceGinofobia: Miedo exagerado hacia las mujeres. Alam Smith es un joven fotógrafo de anuncios de mascotas, esconde un secreto, tiene ginofobia, un miedo atroz a tener contacto con una mujer debido al acoso constante de su hermanastra en su adolescencia...