Alan's Phobia

Capitulo 51

Erika y Nathan salen del hospital felices después de la gran noticia de que van a ser padres.

- ¡Voy a casa a darle la gran noticia a Michelle!

- ¿Quieres que te acompañe?

- No, vete a la oficina y da la noticia por allí, está noche tendremos un motivo más para celebrar. - Dice Erika besando a Nathan y metiéndose en un taxi.

Pero Nathan en vez de ir a la oficina se dirige a otro sitio. Desde que su hermana ha dicho que se marchara de nuevo, tiene cada vez más claro que está ocultando algo, y va a contratar los servicios de un detective privado. Nathan se dirige al despacho de Peter Guiber, un conocido detective de Nueva York conocido por su profesionalidad y discreción.

Peter Guiber tiene su despacho en la calle de Lexington Avenue. Por suerte cuando Nathan llega, es recibido por el propio Peter que estaba a punto de hacer una pausa para tomarse un café.

- ¿Es usted el detective Peter Guiber?

- ¡El mismo en persona! - Exclama haciendo un gesto para que entre.

Peter Guiber es un hombre de mediana edad, que fue policía cuando era más joven. Pero debido a un disparo en una pierna tuvo que dejar su trabajo como policía, desde entonces se dedica a trabajar como detective. Aunque la mayoría de los trabajos para los que lo contratan es para espiar a parejas de personas que creen que les están siendo infieles. Si hay algo que Peter no perdona es el desayuno en la cafetería de la vuelta de la esquina donde sus viejos compañeros de la comisaría hacen su descanso para tomarse su café con donuts.
Nathan nada más llegar se sienta en una de las sillas de su despacho, está algo nervioso, es la primera vez que está en el despacho de un detective privado, y sus manos comienzan a sudar por los nervios.

- Gracias por recibirme sin cita.

- No se preocupe. - Peter enseguida nota que Nathan está incómodo, e intenta relajar el ambiente. - No tiene por qué estar nervioso, todo lo que me diga se mantendrá en la mas absoluta confidencialidad. Llevo muchos años en esto, soy un profesional.

- Lo se, he oído a algunos de sus clientes, y están muy contentos con su trabajo. Es la primera vez que contrato los servicios de un detective.

- Bueno, para todo hay una primera vez. Dígame , ¿Cómo se llama la mujer a la que tengo que investigar?

- ¿Cómo sabe usted que lo quiero contratar para que investigue a una mujer?

- Son muchos años, y no es el primero que viene a mi preocupado por que sospecha que su novia o su mujer le está siendo infiel.

- ¡No, no! - Dice sonríendo Nathan. - ¡No se trata de mi novia! A quien quiero que investigue es a mi hermana. Verá, mi hermana ha estado viviendo en las Vegas durante varios años. Prácticamente no hemos sabido nada de su vida allí. Apenas nos llamaba, y cuando lo hacía no se molestaba en darnos detalles de lo que hacía. El caso es que hace un tiempo que ha decido volver a vivir a Nueva York, y parecía que quería quedarse. Hasta se había involucrado en la empresa familiar, pero de repente, de la noche a la mañana, ha cambiado radicalmente de opinión y ha decidido volver a marcharse sin ni siquiera saber adónde quiere ir. Por eso necesito que investigue que es lo que está pasando alrededor de mi hermana.

- Entiendo, por lo que me dice, la vida de su hermana está rodeada de misterio.

- Si, temo que ella esté huyendo de algo o de alguien. Quién sabe, quizás son tonterías mias, pero, quiero tener la certeza de que no esté metida en algún lío, y de los grandes.

- No se preocupe, yo me encargaré de saber que es lo que ocurre, me pondré enseguida a ello, y en cuanto sepa algo le mantendré informado.

- Gracias, se lo dejo en sus manos, la verdad es que mi hermana me tiene preocupado.