Capítulo 29. ¿Qué hago con mis sentimientos?

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Nos hallábamos estacionados frente al Saint Venice, di un suspiro y miré a Ian. Este me imitó, tenía el rostro algo mallugado.

-No tardaré...- Acaricié su mejilla.

-No, iré contigo.

-¿Estás seguro?- Sonreí.- Apenas y puedes moverte.

Bufó.

-Estoy bien, estoy acostumbrado a esto pequeña.

Me encogí de hombros y salí del auto, el me siguió por detrás. Al llegar a la recepción telefoneé a mi madre y esta apareció de brazos cruzados minutos después al abrirse el ascensor, el tío de Jason estaba a su lado.

-A buena hora...- Soltó con indiferencia.

Iba a responder pero cuando vio a Ian quedó estupefacta.

-¿Qué te sucedió cariño?- Se llevó una mano al pecho, Ian sonrió de lado.

-No es nada, estaba en una pelea- Respondió radiante. Mi madre no había caído en cuenta.

-Recuerda que él boxea...- Continué.- Por eso no llegue antes.

Me miró un instante y luego sonrió.

-Te lo dejaré pasar- Dijo sin más dándose la vuelta.

Saludé al tío de Jason y luego nos dirigimos al restaurante del hotel, pedimos una mesa y estuvimos un momento decidiendo que cenar. Mientras tanto veía como mi madre y el tío de Jason se mostraban totalmente empalagosos, me morí de la vergüenza.

-No puedo creerlo...- Susurré.- Debo decirles algo.

-Déjalos- Sonrió Ian, al parecer le gustaba verme en esta situación.- Están disfrutando el momento...

Entonces ahora yo lo miraba estupefacta. Hasta donde sabia, a Ian no le agradaba para nada las demostraciones de afecto en público, decía que estaba fuera de lugar e incluso se burlaba de las personas que lo hacían. No entendía porqué de repente defendía a mi madre, probablemente podía deberse a que intentaba ganar puntos de alguna manera. Sin embargo, me atreví a darle una advertencia.

-Como veo que estas tan a gusto, un día de estos te besaré frente a todos- Me encogí de hombros.

El sonrió enarcando una ceja.

-No es como si no lo hubiésemos hecho antes- Apoyó la mejilla en su mano.

-Es cierto- Reconocí.- Pero nunca frente a tantas personas, como por ejemplo en alguna de tus peleas. Me gustaría subir al rin y darte un beso... lo haré cuando menos te lo esperes.

Me miró un instante sin borrar la sonrisa de su rostro.

-Eso me gustaría, esperaré con ansias.

Sonreí en derrota.

-¿Ustedes que tanto cuchichean?- Habló mi madre con una risita risueña.- ¡Ahí viene la comida!

-Lamento la demora...- Reconocí una voz.

Me giré esperando que no fuera quien pensaba, pero apareció con paso tranquilo y una media sonrisa dibujada en el rostro. Saludó a todos en la mesa, menos a Ian.

-Qué sorpresa...- Solté.

-Si querida ahora somos una familia, debemos estar unidos- Continuó mi madre mientras tomaba de la mano al tío de Jason.

Lo que temía se había hecho realidad.

Lo admitía, había quedado descolocada. Hasta sentí una presión en el pecho pues ahora que lo pensaba bien mi madre me había traicionado, pero ¿Cuáles eran las probabilidades de que justamente se hubiera enamorado del tío de Jason? No lo estaba haciendo apropósito, aunque mi orgullo herido dijera lo contrario.

Amigo de la Infancia 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora