Principio

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Algunas veces en el extenso cielo, Suaves puntos brillantes tintinean con fuerza en el cielo. Unas pequeñas, diminutas y plateadas estrellas que recorren el mundo oscuro para armonizar romance, amor, Felicidad y tristeza.

Una pena que eso no pase conmigo y con mí destino. Porque siendo una pobre joven de 19 años, sintiendo un nudo en mi garganta tras la muerte de sus padres en una de esas brillantes noches estrelladas.

- menudo lío -... mientras derramó en mi corazón lágrimas de dolor, pero por fuera finjo que me da igual la perdida para orgullecer a mi esposo.- ¡Vámonos de aquí! - mi Marido Vernon, el mismo que gira su cuerpo con frustración para la salida del panteón donde ahora solo dos cajas son enterradas.

- si- tan idiota, que prefiero irme del velorio, en lugar de llorar y abrazar a mi hermana menor. Tanto odio llevo que ni dudo en retirarme antes de que termine el padre en hablar.

Incluso después de ese momento...  mi vida fue normal y tranquila, claro,  hasta tener a mi pequeño hijo entre mis brazos y crecer la normalidad. Un varón de nombre duddle dursley... Mi pequeño terroncito. 

- es hora de dormir mi pequeño angelito - pasaron años desde que no me comunique con mi hermana. Mucho menos pense en ella o ir y  visitar la tumba de mis padres.- shh, shh- al final de mi habitual vida y mi pasado... Solo una noche fue el verdadero pecado que cayó como última gota... Empezando por el querer ir a tomar agua entre las 2 o 3 de la madrugada, justo un 1 de agosto.

Porque esa madrugada, luego de escuchar los llantos de mi hijo en su cuarto.

–vernon, cariño. – decidí llamar a mi esposo para que fuera y acunara a nuestro hijo pero...

–¡Ve tu!– al final fui yo la que decidió no molestar más a mi esposo.

– está bien cielo, iré yo. – aunque recibí una advertencia antes de salir.

–¡No vuelvas a la habitación!–

– como desees mi amor. –

'¡Menuda suerte!'

Al final, logré que mi hijo dejara de llorar.

' pero está bien.'

Incluso le cambié el pañal antes de dejarle en su cuna.

- fue culpa mía por no dormirlo antes - decidí no hacer más problemas y mejor solo dormir en la habitación de huéspedes. - será mejor ir por un poco de leche o un té relajante para dormir el resto de la noche. - suspiré, antes de salir de la habitación de mi terroncito para disponerme a ir por el té en la primer planta de la casa.

Prefiriendo sufrir y degradar a una simple sirvienta que tuvo un hijo, a discutir con mi esposo y proteger mi lugar como su esposa y madre de su primogénito. Una acción que no quería hacer.

Aunque, gracias a eso, logré escuchar el llanto de mi sobrino.

Flash back.

Petunia baja los peldaños para la primer planta a tomar un té antes de dormir, sin embargo. Un llanto detuvo sus pasos a la cocina.

'¿Que?'

Giro su mirada de un lado a otro, procesando de dónde sale el suave gimoteo de lágrimas, recordando en segundos a su pequeño terroncito pero.

– No puede ser durlesy... El apenas lo cambie y alimente. – murmuró mientras el llanto se intensificó de pronto. – Espera un momento. – logrando visualizar donde se localiza la puerta de la pequeña casa.

' el llanto es afuera de la casa... Entonces... Alguien dejo un bebé.'

Trago saliva antes de apretar sus puños y poner una mirada molesta.

cambia el destino Harry PotterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora