Die trying + jjk + kth + myg ✔️

cuarenta y uno

Dedicado a mxnmon_

(!)

Las hebras de su cabello rojizo corrían por toda su piel nívea. Su espalda estaba descubierta y la picazón en mis manos hacía que quisiera acariciar cada centímetro de su piel tan suave como la de un bebé. Acaricié cada zona, recorriendo los lunares que tenía en su espalda mientras veía su rostro sereno al dormir. La luz  que entraba por la ventana de mi habitación caía a un lado, con tonos bastante grises puesto que el otoño hacia los días tan tristes para solo estar envuelto en cubrecamas. Para mí, esos días no eran tristes, no si tenía a Solbin a mi lado.

Ella había sido un maldito huracán en mi vida, llegando primero como una tormenta, un maldito dolor de cabeza y luego había puesto mi vida de pies a cabeza en solo un día. Un maldito día, alterando todo a su paso y dejando un lío en mi corazón. Así de fuerte y potente había llegado a mi vida, y me agradaba que me vida fuera interrumpido por ella, porque aunque un huracán fuese algo negativo, para mí ella era todo lo contrario. Ella era algo tan bueno para mi vida.

Observé su rostro una vez más, sus pestañas largas, sus labios rosas con una ligera herida en ella, pues decía que se había estado jalando los pellejitos mientras estaba en un examen; unas ligeras ojeras por haber estado estudiando para los exámenes de ingreso, ya que su escuela rendía antes que la mía. Al menos era jueves y ella había venido a casa, aprovechando que mis padres trabajaban hasta tarde, para pasar un rato. Nos veíamos dos veces por semana apenas, pero era suficiente,  porque cada vez que la veía, me daba cuenta cuánto mierda la había extrañado.

¿Quién iba a saber qué ella terminaría conquistándome?

La había conocido en la fiesta de un compañero de clase, Hyunjin. Una fiesta a la que fui simplemente porque buscaba tirar con alguien esa noche. Desgraciadamente, era así. Era un maldito insensible que solo buscaba satisfacerse, mis favoritas eran las que caían tan rápido, sin esfuerzo, las que sentían atracción inmediata.

Era una mierda de persona, lo sabía, pero tampoco es que me desagradara. Es decir, yo solo buscaba algo de una noche o quizá de una semana, pero no me comprometía de los sentimientos del otro, pero tuvo que llegar Solbin, con su mirada felina observándome con superioridad en esa fiesta. Tenía un vestido rojo vino y tacones que le hacían ver más alta de lo que era. Tenía los labios gruesos y muy rosados, unas pestañas bastante largas sin siquiera tener máscara. Era elegante y de aspecto refinado. A simple vista, era una chica a la cual sí me quería llevar a la cama sin dudar, más ella parecía ser dura de ligar, y más si Hyunjin desde un inicio me dijo que ni la mirara.

一Con mi prima, nunca一 él me dijo, advirtiendo一 Ella no es lo que aparenta. Puede verse como alguien desenfrenada y lanzada, pero es todo lo contrario, es un ángel. Así que ni se te ocurra Taehyung siquiera echarle los perros.

Ni siquiera era necesario que me lo dijera porque en primer lugar Solbin ni me veía, solo me la habían presentado y ya, antes de irse hacia otro lado.

Mis ojos se iban por ella de vez en cuando ¿Cómo es que alguien de 18 años se veía tan bien como ella? Es decir, no parecía de nuestra edad siquiera, parecía una universitaria experta y tenía un cuerpo que hasta al mismo diablo podría tentar. Ella solo estaba al lado de un chico que hacía lo mismo que ella hacía conmigo, ignorarla por estar prestándole más atención a sus amigos, a un lado, que a ella. Un par de chicas también estaban ahí, más podía deducir que eran de la antigua escuela de Hyunjin.

Solbin parecía algo frustrada, al punto que se dirigió a la cocina, donde le di el alcance, encontrándomela bebiendo agua.

一¿No bebes alcohol?一Le pregunté, algo curioso. Esa chica tenía algo. Ella rodó los ojos, volteándose para mirar a otro lado. Sonreí, irónicamente, ella realmente era difícil. Sé que había dicho no meterme con ella, pero no significaba que no podía hablarle. Ella se veía como un trofeo para mí. Me ingenié para sacar un cigarrillo de mi pantalón, y me acerqué a su lado para alcanza  la caja de fósforos cerca de ella, a pesar que tenía un encendedor. Yo solo quería sentirle un poco. 一¿Te molesta si fumo?