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Seokjin no había podido terminar de hacer su trabajo. La angustia lo estaba matando, la ansiedad le estaba comiendo las uñas y eso no podría ser más literal.

Desde que Hoseok había venido a buscar a Namjoon hace media hora, había estado dando vueltas por toda la habitación, revisando cada 20 segundos su teléfono.

Nisiquiera sabía si el castaño había llevado su teléfono, y quería creer que no, porque no le había llamado aún a su teléfono.

Teléfono que comenzó a sonar en ese momento, avisándole de una llamada. Seokjin se aventó a la cama con el teléfono en la mano sin ver el remitente.

—¿Si? ¿bueno?

Nada... al otro lado de la línea no se escuchaba nada.

—¿Namjoon?

Una risa se escuchó. A Seokjin se le enfrió el cuerpo por el macabro sonido y cortó la llamada.

Miró el número de la llamada un momento antes de sobresaltarse por el golpe fuerte que dieron a su puerta.

El corazón de Seokjin se aceleró, apretó el teléfono en sus manos antes de marcar al número de Namjoon.

1...2...3...

Nada.

Lo volvió a intentar.

1...2...3...

Nada.

«¡TOC!»

Seokjin se arrimó hasta la esquina del cuarto, acurrucandose ahí. Él no iba a abrir, no haría sonido, tal vez quien esté afuera se iría si Seokjin le hacía pensar que no había nadie en el cuarto.

Presentía algo malo, algo malo iba a pasar si abría la puerta.

Pero después de un rato, volvieron a tocar fuertemente la puerta. Seokjin dio un brinco en donde estaba y marcó el número de Jimin.

¡Hey! ¿cómo estás, Seokjinnie?

—¡Jimin!— susurró Seokjin.—¿dónde estás?

¿Eh? ¿qué ocurre? ¿por qué susurras?

«¡TOC!»

Seokjin miró la puerta con desesperación, el pomo se estaba moviendo sospechosamente.

¿Qué fue eso? ¿Seokjinnie?

—Jimminnie, pide ayuda, alguien está entrando a mi cuarto.

¿De qué habla...-

Seokjin cortó la llamada cuando la puerta fue abierta, apareciendo una grande silueta. Seokjin apretó los dientes con furia y temor.

—¿Qué quieres, Sehun?

Sehun sonrió, cerrando la puerta tras de él.

—Tú y yo al fin nos vamos a divertir.

—Tu puta madre se va a divertir, fuera de mi cuarto.

Sehun hizo una mueca de molestia.— Que mal hablado, deberíamos hacer algo con esa boca tuya.

Sehun caminó hasta Seokjin, quien se levantó para dar pelea.

Sehun lo tomó del cuello, apretando fuertemente. Seokjin tiró un golpe hasta la mandíbula de Sehun quien se tambaleó hasta atrás y se tomó la quijada, mirando a Seokjin intensamente.

—Sí, eso me gusta, pequeña puta.

—Yo no soy pequeño, tú eres anormalmente grande.— vociferó Seokjin.

Sehun se carcajeó.— Ya verás que otra cosa tengo anormalmente grande.

Seokjin frunció el ceño, sintiendo el vómito en su garganta. Sehun lo acorraló, Seokjin se puso en defensa.

—Llamé a la policía, vendrán en cualquier momento.— advirtió Seokjin.

Sehun lo tomó del cabello y lo volteó para golpearlo contra la pared, aprisionándolo ahí. Seokjin gritó y movió sus manos ciegamente para tratar de golpear a Sehun.

—Aún tenemos tiempo.

—¡Suéltame! ¡grandisímo imbécil! Voy a... ¡ah!— gimió de dolor Seokjin cuando su cabeza rebotó en la pared.

—Sigue hablando, vamos.— la voz de Sehun sonaba distante, tan irreal, tan enferma y lasciva.

—Dejame, Sehun, ¿qué quieres? ¡Maldita sea!

Sehun se presionó en Seokjin, evitando que el pelinegro pudiera moverse. Tomó otro puñado de su cabello con su otra mano y con fuerza golpeó el rostro de Seokjin en la pared una y otra vez, hasta que la pared comenzó a teñirse de un rojo escarlata.

—Sehun... maldito... imbécil...— susurraba Seokjin con todas sus fuerzas, su mandíbula escocía y dolía malditamente mucho.

—Oh vamos, no te vayas tan pronto, jugar contigo debe ser mejor que golpear a la otra prostituta de Namjoon.

Sehun volteó a Seokjin para acunar su pene en la mano, Seokjin se removió asqueado, lo que ocasionó que Sehun gruñera y apretara su intimidad con fuerza. Seokjin soltó un lastimero gemido y tomó del cabello a Sehun para halarlo hasta abajo y golpearlo con su rodilla.

Sehun gritó. Seokjin se movió para llegar a la puerta pero el dolor en su intimidad le obligada a caminar pesadamente.

—No tan rápido.— dijo Sehun, tomando de la camisa a Seokjin y lanzándolo en el suelo.

—¡Suéltame! ¡maldita sea! ¡auxilio!— gritó.

Sehun soltó su puño en el abdomen de Seokjin. Seokjin pataleó y lanzó puños ciegos cuando sintió el aire irse de su sistema.

Sehun lanzó otro puño. Se levantó y comenzó a patear en el abdomen al pelinegro que ya comenzaba a ver borroso.

¿Por qué?

¿Por qué? Maldita sea, ¿por qué?

Sehun lo volteó, Seokjin nisiquiera pudo gritar cuando sintió sus pantalones ser bajados.

—Veamos que hay aquí.

—No... por favor...— susurró.

—¿Qué? No te escucho.— se burló Sehun.— tal vez sea porque te falta estímulo.

Seokjin escuchó una bragueta ser bajada, entró en pánico cuando comenzaron a separar sus nalgas.

—¡No!  Sehun, por favor, te lo suplico, por favor, no lo hagas, ¡no lo hagas!

—Tú eres demasiado ruidoso.— fueron las últimas palabras que escuchó Seokjin cuando su cabeza fue alzada para ser golpeada en el suelo con una fuerza bruta.

Todo estaba oscuro ahora...



:0

Maldición.

Espero que estén bien:3

Besos💕

—StarNightYJ

~Hold Me Strong~ {NamJin}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora