Capítulo 14

28 1 0
                                    

Me desperté cuando era de noche otra vez. Recordé a Gustavo. Él no había insistido en llamarme, al parecer estaba muy ocupado con su negocio.
Necesitaba asegurarme de que Phoenix estuviera sana y salva, tal vez la sentía demasiado cercana y me estaba volviendo LOCO DE REMATE, pero también era cierto que para un hombre no había nada más lindo que tener una hija.
Eso último me parecía interesante, ya que para mí querer irracionalmente había sido un cuchillo de doble filo desde la primera y ridículamente estúpida vez.
Intenté hacer un flan que salió tan negro como los empresarios del casino, así que volví a intentarlo una y otra vez. Eso de "la tercera es la vencida" es una PUTA MENTIRA. Aunque de todos modos me devoré el quinto, el sexto y el séptimo. Luego, caí sobre el sillón. Evidentemente tenía que ir a clases de cocina, Christophe Krywonis* me diría "¡NO SERVÍS NI PARA LIMPIAR PLATOS, IGNORANTE DE MIERDA!"
Yo le pegaría una patada en la panza con tal de que aprendiera a tener un poco de empatía por los demás. Seguro que si le hicieran lo mismo a él, reflexionaría sobre su personalidad mejorando un poco este mundo tan paupérrimo* de sentido.
Pensé en rendirme y volver a Argentina, pero tenía un buen presentimiento. El escroto me decía que algo prometedor iba a suceder a continuación. Así que prendí la televisión y me puse a ver un programa de preguntas. Algo bastante contradictorio (o completamente lo opuesto).
En las gradas había una audiencia llamativamente variada respecto a sus orígenes mientras que el conductor era un colorado PUTO. La participante estaba vestido como una dominatriz* de primer nivel, prácticamente forrada en cuero. Me la imaginé castigándome a latigazos cuando una pregunta apareció en la pantalla:
"¿Qué jugador de fútbol es reconocido por ganar en todos los países donde compitió? "
La sadomasoquista frunció el ceño, no sabía nada de cultura general.
-Opción A: Marcelo; Opción B: Zlatan Ibrahimović; Opción C: Nigel de Jong; Opción D: Carlos Tévez.
-¿Cuál es el apellido del primero?
-Vieira da Silva Júnior, aunque solo hay un Marcelo en el mundo del fútbol.
-¿Puedo usar el comodín?
Apagué la pantalla. Al parecer había consumido demasiada televisión por un día, ya estaba de muy mal humor. Llamé a la pelirroja para asegurarme de que estuviera bien, aunque me atendió un hombre con la voz grave e intimidante.
-¿Quién es?
-Emm... Maxi. ¿Usted es el padre de Phoenix, no?
-Efectivamente. Mi hija no está en casa ahora mismo, lo lamento.
Escuché unos gritos agudos a lo lejos cuando él cortó la llamada, evidentemente la tenía de prisionera. Todas las princesas necesitaban a un príncipe que fuera a rescatarlas, debería descubrir donde vivía para liberarla. Así que llamé a Ella con tal de que me ayudara.
-¡Ahora estoy ocupada imbécil!
-¡Phoenix está encerrada en la torre del dragón!
-¡¿QUÉ DEMONIOS?!
-¡El padre la tiene de prisionera en su casa!
-¿Ayer se debe haber mandado una grande, no? ¡Esperame un mi... -La interrumpí.
-¡Obvio genia, está castigada!
-¡Era una pregunta retórica IDIOTA!
Cortó la llamada. Me dio intriga el programa de preguntas y me sentí un poco estúpido, pero de todos modos prendí la pantalla. La dominatriz estaba por ganar un millón de pesos, lo que definitivamente iba a quedar en la historia. Me sorprendía que al final sí terminara siendo algo prometedor. La sadomasoquista se puso a llorar de repente mientras yo no entendía una CHOTA.
-Es que... -Musitó- De hecho sí, creo que mi hijo nos está viendo.
-¡Nos queda poco tiempo, si querés ganar deberías responder ahora mismo! -La dominatriz lo fulminó con la mirada- Última pregunta: ¿Cuál es la capital de Serbia? Opción A: Belgrado; opción B: Valjevo; opción C: Leskovac; opción D: Ruma.
-Emm... ¿Me quedan comodines?
-¡No! -Respondió el colorado con una sonrisa de satisfacción en su rostro.
La participante se puso a meditar como si fuera a saber la respuesta por arte de magia. Su cara de concentración era un poema, ni que se estuviera conectando con los muertos. Unos minutos después, le pidió al conductor que les repitiera las opciones y él lo hizo seguro de que era imposible que ganara.
Entonces, dijeron que irían a un pequeño corte dejándonos a todos los espectadores mirando un montón de publicidades de cosas que no pensábamos comprar con tal de ver que sucedía a continuación. Parece una idea demasiado simple, aunque curiosamente lo sencillo funciona con una gran parte de las personas.
-¿Te decidiste o no? -Le preguntó a la dominatriz.
El timbre sonó de repente tomándome desprevenido y maldecí al aire furioso, necesitaba ver lo que iba a pasar a continuación. Pero la adolescente era más importante para mí. Caminé hasta la puerta y la abrí. Luego, le pregunté a la petisa por que estaba tan ocupada.
-Te voy a contar la verdad solo con la condición de que prometas guardar el secreto. ¿Está bien?
-¡Tengo miedo! -Cité a Auronplay.
-Manipulo las mentes de las personas.
-¡Y yo controlo las vaginas para que se humedezcan!
-¡Es en serio! ¡Tengo una grabación para probártelo si no me creés!
-¡Entonces quiero verla!
Lo siguiente fue tan impresionante que me olvidé del colorado puto y la dominatriz. El video estaba grabado con una cámara espía escondida en unas orejitas de Minnie. Había varios hombres sentados en una mesa para jugar al Blackjack, todos pensaban que era malísima. De hecho, hasta le hablaban como si fuera tonta.
Ella comenzó a ROMPERLES EL CULO de una forma impresionante, media hora después los tipos no se podían creer todas las fichas que había acumulado.
Entonces, el más viejo dijo que iría a buscar algo para beber. Okis lo siguió y exclamó tomándolo de sorpresa.
-¿La práctica me sirvió para mejorar, no?
-Sí... -Musitó- Aunque quizás fue una noche de suerte.
-¿Vamos a seguir jugando?
-Creo que fue suficiente blackjack por hoy.
-Alguien tiene miedo de que le siga ganando... -Susurró divertida.
-¡Eso es tan incierto! -Exclamó él furioso- ¡¿Qué tal si jugamos unas rondas más así me dejás de romper los QUINOTOS?!
-Gracias.
La desgraciada volvió a la mesa. Luego, apareció el hombre con una botella de ron. Hart intentó apostar todo lo que tenía, aunque había un pequeño problema.
-¡La apuesta máxima son cinco mil dólares! ¡Acá hay más del doble ! -Dijo uno de los hombres.
-¡Solo es una ronda!
Ella pausó el video y la fulminé con la mirada.
-¡Quiero ver que pasa a continuación!
-¡Después te lo mando estúpido!
-¡Pero lo hubieras frenado antes! ¡Además, me hiciste olvidar a la domanatriz!
-Prefiero no preguntar... -Rodé los ojos- ¡Y yo voy a salir de tu departamento ahora mismo! ¡Si te vas a quedar acá tirado no hay ningún problema!
-¿Donde conseguiste la cámara espía?
-Tengo contactos... -Respondió haciéndose la misteriosa- En realidad, son orejitas de Minie.
Subimos al auto. Intenté buscar un video del programa pero no hubo caso, me iba a morir con la duda de si la sadomasoquista era la primera en ganar ese programa de preguntas.









____________________________________

Aclaraciones:

Christophe Krywonis: Chef conocido por criticar severamente los platos de los participantes en los concursos de cocina.

Paupérrrimo: Superlativo de pobre.

Dominatriz: Mujer que adopta el papel dominante en algunas prácticas sexuales.

Un roto de los nefastosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora