#1| 𝓽𝓱𝓮 𝓽𝓻𝓾𝓽𝓱 𝓾𝓷𝓽𝓸𝓵𝓭 ➷ 𝐯𝐡𝐨𝐩𝐞

𝓯𝓲𝓷𝓪𝓵 ➳

- ¿C-cómo voy a entrar ahí después de todo lo que pasó, Hoseok? – le preguntó Yoongi a su hermano haciendo que el pelirrojo sonriera. El omega también estaba nervioso.

Taehyung, Jimin y Seokjin los estaban en la sala donde esperan los familiares de los pacientes. Era el momento para la familia Min de estar solos.

- Vamos, Yoongi. Estoy contigo, estamos juntos. – le dijo Hoseok agarrándole delicadamente una mano, sonriéndole.

Yoongi asintió mientras suspiraba y le daba un apretón a la mano de Hoseok. El pelirrojo abrió la puerta y lo primero que ambos vieron fue a Sunhee acariciándole el pelo a Dongyul mientras este estaba acostado en la cama del hospital con los ojos cerrados.

Cuando los mayores escucharon la puerta del cuarto abrirse, ubicaron su mirada en los dos chicos que estaban parados en el marco de esta.

- Hoseok, Yoongi. – sonrió la mujer. – Pasen.

Hoseok le sonrió a su madre y miró al alfa que se encontraba en la cama. Dongyul le sonrió a Hoseok haciendo que al omega se le aguaron los ojos.

- ¡Papá! E-estás bien. – sollozó Hoseok mientras corría a apretar a su padre en un abrazo de omega carente del tacto de su padre. – L-lo siento. – se disculpó cuando el alfa se quejó de la fuerza que Hoseok utilizó para abrazarlo.

- N-no pasa nada, hijo. V-ven acá. – dijo el mayor realmente tratando de no cansarse al hablar. – D-dale un abrazo a papá.

Hoseok soltó un sollozo y abrazó a su padre. Dongyul no pudo evitar llorar cuando sintió a su pequeño omega sollozar en sus brazos mientras le decía lo mucho que lo quería y lo contento que estaba por saber que estaba bien.

No, Hoseok. La madre Luna me está dando tiempo de despedirme.

Sunhee observaba la escena llorando, estaba feliz de la escena de afecto que les estaba brindando el par de padre e hijo, pero, por otro lado, la omega presentía lo que iba a pasar tarde o temprano. Su omega estaba sintiendo la agonía que estaba sintiendo su alfa en esos momentos.

Sentía como, poco a poco, su lazo se iba desprendiendo e iba perdiendo la fuerza y la pasión por la cual se caracterizaba. Se le estaba yendo la calidez que le brindaba, dándole paso a un sentimiento frío como el invierno.

Te me estás yendo, mi alfa.

La omega dejó de observarlos y fijó su mirada en Yoongi. El joven alfa tenía las manos en sus bolsillos y estaba cabizbajo mientras en sus labios se formaba un puchero que le decía a la omega que Yoongi estaba a punto de echarse a llorar.

Los sentidos maternales de Sunhee se activaron y fue a abrazar a Yoongi. El alfa recostó su cabeza en el hombro de la mujer y dejó escapar un pequeño sollozo.

- Todo va a estar bien, Yoongi. – le susurró la mujer, pero Yoongi no le dijo nada.

Para que sus hijos, en plural porque ella siempre había considerado a Yoongi como un hijo, estuviesen bien, ella tenía que creerse que todo iba a estar bien.

En esos momentos, la omega tenía sentimientos encontrados. Estaba perdiendo a su otra mitad y Yoongi estaba muy mal.

Ayúdame, madre Luna.

Hoseok y Dongyul que estaban ajeno a todo lo que estaba pasando con la omega y el alfa, seguían abrazándose.

Dongyul despidiéndose.

Hoseok aprovechando el momento, ajeno a lo que verdaderamente pasaba con su padre. 

En ese abrazo habían recuperado todo el vínculo de padre e hijo que habían perdido. Después que el mayor hubiera arreglado el matrimonio de su hijo menor, Hoseok no le hablaba ni por equivocación.